¿𝐂𝐨𝐦𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢𝐦𝐨𝐬 𝐮𝐧 𝐡𝐞𝐥𝐚𝐝𝐨? [𝐆𝐫𝐞𝐠 𝐅𝐞𝐝𝐞𝐫 𝐱 𝐎𝐂]

Capitulo II ~Los rumores corren rápido.~

Narra: Greg.

-¿Desde cuándo tienes novio?- Pregunte una vez que nos acomodamos en los asientos.

Max se giró a verme como si no entendiera.

-No lo tengo.- Respondió.

-¿Entonces porque Bean dijo...?- No pude acabar la frase porque empezó a reírse.

-De verdad crees todo lo que Bean dice. Ya has visto como suma.- Empece a reírme con ella.- Supongo que escucho como mamá me lo preguntaba y se le ha quedado en la cabeza.

-¿Hablas mucho con él?

-Algo, nos escribimos o así, tenemos mucho en común pero nada más. Y además te hubiese dicho si estaba saliendo con alguien. - Alzó los hombros y giró la vista hacia la ventana.- No sé para qué dudas.

-No se.- Dije con una sonrisa.- A Veces puedes ser muy misteriosa.- Oí como se rió.

De alguna manera me sentía aliviado, pero sabía que me ocultaba algo, parte de la información se la comió y eso era algo que me inquietaba, porque ¿y si ese tío podía llegar a ser algo más? ¿Me quedaría sin mi mejor amiga? Pero lo más inquietante es que ese nudo en el estómago no se me fue, creía que seria por, no se, por los nervios del ultimo día, o la posibilidad de que Max esté en una relación, bueno, antes que yo, lo de que Max esté en una relación me da igual ¿no?

El resto del camino fue tranquilo hasta que Duffy empezó a meterse con las zapatillas de Donna.

-Eh tú ¿de dónde has sacado esas zapatillas? ¿De zapatilandia?- Su risa siempre me recordó al de una foca, no se por que.

Mi hermano intentó defenderla, de una manera un tanto pobre. Duffy le cogió del cuello de la camiseta y lo alzó levemente.

-Sueltale.- Dijo Max levantándose de su asiento.

-¿O qué?- Preguntó con tono socarrón. Ese tío ya ha muerto.

Antes de que Kurt (se había subido hace unas paradas) mi padre o yo pudiéramos darnos cuenta de lo que pasaba Max ya había salido de su asiento, postrado delante de Duffy y alzado la pierna para dar una patada donde dios sabe bien qué duele, el autobús entero hizo una mueca de dolor y luego empezó a reír.

-O le haré un favor al mundo y te dejaré sin hijos.- Dicho esto se volvió a sentar y a lo suyo, no sin antes contestar con una sonrisa al gracias de Keithie y revolverle un poquito el pelo a Donna.

.

.

.

Bajamos del autobús y nos dirigimos hacia la puerta principal del instituto, o así era hasta que llegó William, de la clase contigua a la nuestra, quien se puso entre Max y yo y le pasó el brazo por sus hombros. De verdad, ¡quien en su sano juicio hace eso!

Nunca he hablado con él, y no era mi intención hacerlo, pero si que escuche. Sobre todo por que tenia a casi todas las chicas del curso detras de el, con esa ropa, el libro en la mano y el aire misterioso, tenia el pelo negro y unos ojos grises de encanto... digo... no de encanto, de repulsión, si eso es, repulsivos, era apenas unos pocos centímetros más alto que yo y tenía varios piercings en la oreja. Por lo que escuche en los pasillos es un chico que oculta muchos secretos y bla bla bla, honestamente parece sacado de disney channel ¿Sabeis esas peliculas del chico misterioso pero apuesto que al final resulta ser un vampiro? Bien, pues tiene ese aire.

-He oído que le has pegado en sus partes a Duffy.- Dijo riendo, acompañado por la risa de Max.

-Vaya, los rumores se esparcen rápido.

-Mas si eres tu.- Ambos rieron ¿por que mas si era ella? No lo entiendo.- ¿Has llegado a alguna conclusión?

-A una.- Se aclaró la garganta y dijo.- Los camellos no saben de la existencia de los tiburones. ¡Y nadie habla de ello!- William miro un segundo arriba, como pensandolo.

-Ostias.- Ambos rieron, otra vez, si, solo rien.

-Mmm.- Me carraspeó la garganta en un afán de llamar la atención.

William se giró a mi un poco molesto mientras que Max se veía divertida. Me quede mirandola esperando a que explicase algo o no se hiciese algo.

-Oh.- Dijo dándose cuenta.- Greg él es William, un amigo.- Dijo señalándole.- Y William el es Greg.

-¿El?- preguntó William extrañado.

-El.

-¿El que sí se puede saber?- Pregunté extrañado.

-Nada.- Contesto rápidamente Max. Se formó un silencio incómodo.

-¡Max!- Grito Lucy, su mejor amiga.

-Luego os veo.- Se despidió.

-No olvides mi pregunta.- Le gritó William despidiéndose.

-Adiós.- Y nos dejó solos.

Sentía una gota de sudor frío resbalar en mi frente. Exagerado, quizás. Pero las chicas no mentían al decir que tenía una mirada penetrante.

-Bueno..- Dije rompiendo el silencio.- ¿De qué conoces a Max?

-Vamos juntos a la clase de Latín y literatura.- Respondió encogiéndose de hombros.

-¿Y cuál es esa pregunta?

-Nada que te incumba.- Dicho esto desapareció entre la gente, dejando una nube de su perfume, que olía extrañamente delicioso, ¡pero qué me pasa!

-Que tío mas raro.

Nota de autora: Holii, ¿que tal?

Siento no haber podido publicar antes, estaba de vacaciones y no he podido escribir, pero aquí os traigo el segundo capitulo, espero que os haya gustado.

✴️Capítulos nuevos todos los sábados.✴️

❤️Si os ha gustado no olvidéis votar y comentar.❤️

🌆Gracias por leer.🌆