Capítulo Cincuenta Y Nueve

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-Es hermoso-dijo Riss mientras lo tomaba lentamente entre sus manos, como si se fuera a desvanecer, como si el pequeño cuarzo fuera el diamante más divino jamás encontrado. Danáe lo tomó de sus manos y se lo colocó en el cuello
-Me encanta. Es el primer regalo que he recibido en mi vida-confesó Riss mientras se miraba al espejo
-Me alegra que le guste. Me dijo que tenía algo que decir-le recordó Danáe mientras se sentaba en el borde de la cama
-Si, yo, quería pedirte permiso-dijo Riss
-¿Permiso?-repitió Danáe confundida
-Quiero enamorarte Danáe-pronunció mientras tomaba la pequeña caja entre sus manos y se la entregaba, Danáe la abrió y se encontraba un sencillo anillo de plata
-Quieres marcarme-aseguró Danáe mientras miraba el pequeño anillo
-¿Qué? No, es decir si, pero no ahora. Louis dijo que debía darte eso porque es un...-estaba hablando rápidamente Riss de manera nerviosa, pues sentía que lo había arruinado
-Majestad, lo que más me cautiva de usted es que a pesar de la realeza y sus reglas, se es fiel a si misma. Y claro que tiene mi permiso-dijo Danáe y Riss la abrazó
Era el día más feliz
El olor a pino de Danáe se había vuelto un poco más dulce y el de Riss resaltaba el aroma a chocolate. Le colocó el anillo y
Le quedaba grande
-Oh, esto no estaba planeado-dijo Riss mientras se reía
-No necesito un anillo para saber que seré tuya y tu serás mi alfa-Dijo Danáe
-Mi omega, mi hermosa omega-canturreó Riss mientras acariciaba su cabello

Más Hermosa Que El Castillo ~lesbian omegaverse~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora