Cherry: ...¿Qué?
Keith: ¡Lo que escuchaste!
Cherry: Espera...
Keith: ¡No, espera tú! no es la primera vez que ocurre esto, no puedo estar un tiempo considerable con alguna amiga sin que salgas con tus malditos celos. Ya me tienes harto, lo he soportado por bastante tiempo, pero esta es la gota que rebalsó el vaso.
Cherry: Pero...
Keith: ¡Bop! ¡pero nada, no intentes justificarte! ¡desde antes siempre sugería la idea de discutirlo, pero cada vez que lo hacía cambiabas el tema o directamente me ignorabas! Además, ahora que lo pienso bien, cuando batallo con personas peligrosas (arriesgando mi vida), tú no haces nada más que sentarte en un altavoz mágico y sonreír a la nada, ¡ni siquiera me apoyas! ¿crees que eso es correcto? Esto ya no podía seguir así. Me hubiera gustado acabar en buenos términos, pero no lo voy a tolerar más. Adiós, Cherry.... ojalá te vaya bien.
{Keith, molesto, se va del sitio con la mente en blanco. No sabía ni por donde iba, solo dejaba que sus pies lo guiaran. Luego de un rato de caminata furiosa, el peli azul se sienta al borde de la acera a pensar. No puede evitar que unas lágrimas abrasadoras recorrieran sus mejillas. Había actuado de manera impulsiva, y no estaba seguro de haber decidido de manera correcta. Se queda allí durante mucho tiempo, sintiendo el peso de cada minuto. No quería moverse, pero se obliga a hacerlo.}
{Se levanta, aún pensando en lo que había hecho, y comienza a caminar rápidamente hasta la estación. Con suerte, el tren llegaría rápido y podría ahorrar algo de tiempo. Lamentablemente, sus planes se verían arruinados por un cartel colgado en la entrada (bloqueada por rejas), el cual dictaba: —Cerrado por mantenimiento—}
Keith: Demonios...
{Se le había ido de la cabeza totalmente. Esos últimos días, la estación cerró sus puertas por problemas relacionados a la salubridad. Era verdad; en una ocasión Keith llegó a ver una rata arrastrando un trozo de pizza como si nada, y se notaba que no era la primera vez que lo hacía. Por lo tanto, como remplazo del metro, el chico había utilizado el autobús. Miró su teléfono, eran casi las once. A esa hora, al menos en su ciudad, era casi imposible encontrarse esa clase de vehículo por las calles. Pensó en pedir un taxi, pero no traía la billetera consigo. La única opción que le quedaba era una caminata de hora y media hasta su hogar.}
{Al peli azul, que da un suspiro, no le queda más que resignarse y probablemente llegar a su casa a la una de la mañana. Sin embargo, se le ocurre algo que lo hace cambiar de opinión. Da media vuelta y, pensando en lo que hará a continuación, comienza a caminar. Lo más probable es que no lo aceptara, pero, de todas maneras, no tenía nada que perder.}
*originalmente, más o menos por esta parte aparecían Skid y Pump, más que nada como un cameo.
((no) P.O.V. : Sarv)
{La chica se encontraba observando por la ventana de su apartamento. Le gustaba aquel ambiente nocturno; la oscuridad, esa brisa fría... una maravilla, según ella. No estaba viendo nada en particular, solo disfrutaba del clima. Se queda allí unos cuantos minutos hasta que decide que ya es suficiente y se aparta, dirigiéndose a la cocina. Llevaba puesto el mismo conjunto rosa pastel, que era su favorito. Mientras buscaba algo para comer en el refrigerador, escucha el timbre en la entrada.}
ESTÁS LEYENDO
En la misma sintonía -Boyfriend x Sarvente-
RandomSarvente, una joven monja, se esfuerza día tras día intentado que la gente se una a su religión. Es muy querida en la comunidad gracias a su carisma y entusiasmo por hacer las cosas, lo cual a su vez le ayuda en su trabajo. Un día como cualquier otr...