Eddy miraba extrañado como aquel personaje de pelo turquesa el cual no dejaba de reír apenas lo vio.

-¡Amigo te dije que te quedarías calvo en algún momento!- soltó el tipo entre risas las cuales ocasionaba que lagrimas salieran de sus ojos- ¡Y para empeorar estas creciendo para abajo!- ese comentario solo lo hizo reír mucho más fuerte y provocando que sus manos se posaran en su estomago debido a las molestias. 

-¿Quien diablos eres tu?- Eddy soltó las palabras con notoria irritación hacia aquella persona a la cual con todos los modales del mundo le abrió la puerta, si sabia que la persona detrás de la puerta era alguien asi de fastidioso seguramente lo hubiese dejado afuera. 

-¿Cómo que quien soy?- las risas del chico se detuvieron y en su rostro se mostraba una nueva de confusión ante lo dicho por Eddy- Ey hermano, se que mis bromas aveces son pesadas pero no es para que te enojes y finjas no conocerme- el chico de pelo turquesa ignoro la mueca de desagrado que hizo Eddy y simplemente entro a la casa.

No dio más de cinco pasos y enseguida se detuvo en su lugar contemplando como la sala de la casa estaba llena de niños que lo miraban de forma intrigada, hizo un paseo rápido por todo el lugar mientras miraba con los ojos bien abiertos a cada uno de los jóvenes que estaban allí y se dio la vuelta para ver a Eddy quien permanecía parado en la puerta y está aún seguía abierta.

- No me jodas ¡¿Quien carajo son ustedes y que mierda hacen en este lugar?!-

Nadie contestó, en medio del silencio se escucharon los pasos apresurados de alguien que venía del patio de atrás y rápidamente Jimmy estaba en la sala.

-¡¿Nathan?!-

Jimmy! ¡Rápido ayudame!- ahora el chico de nombre Nathan corrió hasta el lado del joven rubio- ¡Unos delicuentes juveniles invadieron la casa de Kevin y de mejillas dulces! ¡Tienes que ayudarme a sacarlos de aquí antes que decidan destruir la casa!-

Los jóvenes se miraron entre ellos confundidos al ver cómo ante los ojos del recién llegado ellos eran "delicuentes juveniles" .

-¡¿A quienes llamas delicuentes pelo de mierda?!- Kevin fue el primero en reaccionar ante la acusación y como siempre su reacción fue una completamente violenta.

-¡Vallanse de la casa de mis amigos delicuentes!- Nathan empezó a mover las manos por el aire como si estuviese espantando a unos perros callejeros con rabia. 

- Nathan espera- rápidamente Jimmy se interpuso en la pelea sabiendo de antemano como podría llegar a reaccionar Nathan ante las "intimidaciones" del pequeño de gorra roja- Ven un segundo conmigo-

Los dos mayores se retiraron del lugar dejando una vez más a los jóvenes, pero esta vez para la suerte de todos no hubo un ambiente incómodo entre ellos.

-¿Quien mierda se cree para estar llamándome delincuente?- Kevin seguía maldiciendo en voz baja, pero no lo suficientemente baja para hacer que los otros no lo escuchasen.

-¿Quien era el de pelo de colores Eddy?- Ed recién parecía haberse percatado de lo que acaban de suceder en frente suya.

- No lo sé idiota- Eddy se encontraba igual de irritado que Kevin, desde que había abierto esa puerta de encontraba completamente irritado por los comentarios del mayor- No debí haber abierto esa maldita puerta- se dijo en un susurro Eddy, mientras una vez más se arrepentía de haber abierto la puerta de la casa.

Los más pequeños del grupo hicieron acto de presencia en la sala entre risas, risas las cuales desaparecieron al sentir que algo no andaba del todo bien con sus vecinos y amigos.

-¿Están bien?- pregunto Jimmy preocupado ante lo que pudiese haber pasado.

Nadie contestó, porque ninguno sabía con esa exactitud que responder a los dos niños que los miraban preocupados y intrigados.

- Ok pequeño creo que entiendo lo que me dijiste- todo el grupo empezó a prestar atención a lo que dirían esas voces que se acercaban a donde ellos estaban, pero eso fue lo único que se escuchó.

Los dos mayores hicieron acto de presencia haciendo que los menores recién llegados notaran la existencia del chico de pelo turquesa.

El chico los miro y ellos miraban al chico.

Rápidamente el chico despegó la mirada de ellos y la dirigío al rubio que estaba al lado suyo.

- Ese es...- el chico apunto con su dedo a Jimmy.

Jimmy suspiro y asintió con la cabeza un tanto avergonzado.

Nathan pego un fino chillido y alzó en sus brazos al pequeño Jimmy.

- Eres adorable- el pequeño era estrujado entre los brazos del mayor, pero no llego a aplastarlo de sobre manera así que solo disfruto del pequeño abrazo que le estaban dando.

El ambiente en la sala se sentía menos tenso ante las risas que habían soltado los demás por tal acción tomada por Nathan.

Nathan hablaba animadamente con el grupo y soltaba algún que otro chiste que hacian que los jóvenes simpatisaran  rápidamente con el mayor, olvidando completamente que era un completo desconocido ante sus ojos, pero el mayor parecía conocer hasta su tipo de sangre, pero eso paso a segundo plano cuando se encontraron perdidos entre sus risas.

-¿Que les parece un poco de té? Sus gargantas deben de estar secas de tanto reir- hablo Jimmy una vez todos se habían calmado, racibiendo un "Si" por parte de todos los jóvenes, rápidamente se dirigió a la cocina siendo seguido por los dos menores del grupo, quienes de habían encariñado con el de sobremanera.

La sala volvió a estar en silencio, pero este era un silencio que no era capaz de ahogarte en el, era solo un silencio, un silencio dedicado a cambiar los pequeños dolores de estómago que tenían por reír tanto.

-¿Tu quien eres?- hablo Ed dirigiéndose a Nathan.

- Yo soy Nathan-

- Eso ya lo sé tontito- Ed lo miro divertido ante ignorancia de Nathan- ¿Pero porque estás aquí?-

-¿Te refieres a porque vine a esta casa?- Es solo asintió con la cabeza- Oh, soy amigo de los chicos- Nathan le sonrió.

-¿Entonces tu y yo somos amigos también?- pregunto emocionado Ed al pensar que aquel que lo hizo reír sería su amigo.

- Así es grandote-

Ed soltó unos pequeños pero no muy fuertes gritos de felicidad ante la repuesta positiva.

-¿Eres de Peach Creek?- pregunto Nazz.

- Oh, no no, yo no vivo por aquí, yo vivo mucho más lejos-

-¿Eres millonario cierto?- Eddy soltó de la nada- Hueles a dinero-

El salón quedó en silenció y la risa de Nathan no se hizo esperar, haciendo reír por un buen rato.

- Tienes razón, así es- Eddy lo miro atento a que terminara de hablar- Se podría decir que soy millonario-

Los ojos de Eddy brillaron y una mueca se formó en su rostro. Edd lo miro y suspiro cansado y Ed se reía ante la reacción de Edd.

El ambiente se rompió cuando la puerta del frente se abrió de golpe.

-¡¿Porque estás aquí Nathan?!- Kevin, quien traía consigo varias cosas fue el primero en reaccionar.

- Yo también me alegro de verte cariño-

Mí mente no fue capaz de hacer un capítulo decente en en días, pero fue capaz de hacer 6 borradores de 6 diferentes historias...

En fin.

¡¿Nuestro futuro?! (Kevedd) (Pausado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora