「➶ ︾ 🇷🇺〃 Rusia, un joven universitario al cual se le dificulta mucho relacionarse con los demás.
↱ 🇺🇸 ᵕ̈ ↷ ೃ USA, otro joven universitario al cual se le da de maravilla relacionarse con los demás.
¿Que pasaría si estos 2 se llegaran a jun...
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USA se encontraba mirando la ventana del auto. Mientras miraba hacia afuera, se preguntaba porque era tan difícil tratar con su padre. ¡Reino Unido era jodidamente terco! Nunca lograba llegar a un acuerdo con él, en este momento, él y el mexicano volvían a su casa, después de haber visitado a su papá. Y nuevamente, el encuentro había terminado en una discusión.
— Oye wachito, ya llegamos— Dijo el mexicano, dando leves golpecitos a la ventana del auto, por donde el estadounidense estaba viendo.
— ¿Huh? Oh, claro, ya me bajó.— Luego de decir esto se bajo del auto. Ingreso a su casa, donde el canadiense le esperaba.
— No te fue muy bien, ¿cierto?— Pregunto Canadá, preocupado por la respuesta.
El norteamericano negó con la cabeza, bajando su mirada, aunque no se noto por los lentes de sol que él portaba. No obstante, su aura cambió rápidamente, a una más animada. Posó ambas manos en sus caderas, para luego decir, con total confianza y ánimos, lo siguiente; — Está bien, todo es a su tiempo. Ahora, lo que necesito, es encontrar unas prendas bonitas para ir a esa fiesta, no me la pienso perder. Voy a brillar— Exclamó. Parecía como si unos brillos pequeños estuvieron a sus costados. El canadiense solo sonrió aliviado, aliviado de que su hermano no se deprimiera.
— ¿'Tas seguro que vas a ir? No sé, ahora que estás así, creo qué- — El mexicano hablo. Iba a continuar, pero el americano le interrumpió.
— ¿Así como?— Sacó sus manos de sus caderas, para darse media vuelta y ver al mexicano. Se cruzó de brazos arqueando una ceja. — Si te refieres a ese tipo, yo no voy a andar lloriqueando por alguien que se perdió este bombón.— Se señaló a sí mismo con sus pulgares, para luego irse a la cocina a comer algo.
El mexicano solo suspiró, sabía muy bien que el de habla inglesa solo fingía estar bien para no preocuparlo. Era obvio que estaba dolido por cierto africano, pero, tal y como lo hacía con todos sus problemas, solo lo tapaba. Lo sabía bien, lo conocía desde que era un niño. Desde pequeño ocultaba sus emociones negativas.
— 'Ta bien, pero si tú vas yo también voy.
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