Muy pronto te convertirás en mi pequeña muñeca gachapón, te protegeré y te admiraré. Siempre te cuidaré, pero solo si prometes nunca salir de tu jaula de plástico ¿lo prometes?.
♡-
El dibujo de portada no me pertenece así que créditos a su autor...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
– Entonces así fue como me quedé con la herencia de mi abuela, mis tíos me pegaron con la escoba – Contabas haciendo ademanes con tu mano golpeando al aire como si tuvieras una escoba en mano – Todo estaba escrito en el testamento, no podían hacer nada.
TK soltó una suave risa al aire sacándote una sonrisa también al sentir que se estaban divirtiendo, elle se acomodó mejor en la mesa mirando como tomabas de tu jugo de fresa. Después de haberse presentado aun parecía que este te quisiera decir algo importante, evidentemente no podías obligarlo así que simplemente estabas esperando a que iniciara.
Elle sabía que estabas esperando, pero le daba algo de nervios todo ello. Después de todas aquellas sesiones nunca tuvo el suficiente valor de hablar con más detalles.
¡Oh! claro, cabe decir que elle era tu paciente si se puede decir así. Ya que hace tiempo que dejaste de ser profesional con el de pelo verde.
Eras psicóloga, ustedes se conocieron en un juego online y después de ganar confianza comenzó a contarte algo de su historia; cuando le ofreciste ser su psicóloga gratis solo por el hecho de se llevaban bien este pareció no ceder ante la idea.
Se encontraba totalmente mal y no se encontraba en la mejor situación económica como para pagar los servicios de un especialista. Se podría decir que le caíste del cielo, desde que comenzó a liberarse contigo su vida comenzó a girar de formas más fluida.
– ¿Cuánto tiempo planeas quedarte?.
– Depende de como me vaya en el trabajo, aunque tenga una vida asegurada con la herencia – Dijiste mientras arrimabas los platos de comida a un costado y te recostabas de la misma manera que tu amigue. Los separaban unos centímetros considerables pero aun así TK no podía evitar sentirse intimidado por la cercanía, haciendo que se levante inmediatamente pero siguiendo sentado en el sillón.
– ¿Conocías a Mike? – Al ver tu mirada confundida con el nombre obtuvo todas la respuestas que necesitaba – El loco que te miraba por la ventana.
– ¿Loco? solo lo saludé, antes ya nos habíamos visto.
TK guardó silencio, su cuerpo sentía una gran sensación de malestar hasta casi podía sentir una gran escalofrío que recorría su espalda.
– ¡¿Cuantas veces lo has visto cerca de ti?! – Gritó golpeando sus palmas con la mesa, haciendo que des un pequeño salto en tu lugar.
– Apenas dos veces, cuando llegué nos "conocimos" en una lavandería – Hablaste con calma tratando de que elle deje de estar tan tenso – Se sintió como ver a tu amor de verano.
Habías murmurado lo ultimo pero fue lo suficientemente alto como para que elle(? de pelo verde lo escuchara, TK suspiró con preocupación. Quizás solo estaba dramatizando, dos veces puede haber sido solo casualidad.
Pero el recuerdo de como el te miraba le hacia dudar de todas formas, no importa si esta paranoic(e) o no. No volverás a interactuar con el.
– Simplemente no vuelvas a verlo otra vez, es peligroso.
