Capítulo 22: Conferencia de discusión II - "Latidos"

3.6K 555 398
                                    

En el momento que Luo WuXian escuchó aquella profunda e hipnótica voz llamar a su nombre; por un segundo sintió que sus rodillas cederían, y terminaría comprando terreno en Qishan. Sin embargo, años de control de sí mismo le impidieron ceder a tales reacciones biológicas vergonzosas frente a tanta gente.

Guárdelo para más tarde, cuando se hallen los dos a solas y Luo WuXian pueda nuevamente, presionar a su Lan Zhan contra una cama esta vez.

Así que, armándose de todo el valor que un macho pecho lampiño que es. El Joven Príncipe de los demonios entregó a Wei Fen a los brazos de su Jiejie, para girar lentamente en dirección a donde provino aquella voz. Se encontró con aquel bello rostro, causante de sus más precisos sueños húmedos por los dioses.

Tan bellísimo como el día en que se despidieron, aquella vez terminando sus estudios en Gusu. E incluso, podrá decirse que mucho más.

—Lan Zhan —pronunció, lo más firme que pudo sin permitir que se notara su nerviosismo. Luo WuXian inhaló suavemente, antes de añadir con toda la calidez posible del mundo acercándose a paso lento hacia su adorado Jade—... ¿Cómo has estado, Lan Zhan?

Wen Ning sintiendo cómo cambiaba el ambiente, decidió despedirse de sus primos para reunirse con su grupo de hermanos marciales. Él valoraba mucho su salud mental, muchas gracias.

Lan Wangji, lucía tan nervioso como el otro adolescente, respondiendo con la mirada baja. Sus largas pestañas se agitaron como las alas de una mariposa, y el corazón de Luo WuXian se hinchó en su pecho ante tan espléndida imagen. —Bien. Wei Ying está aquí.

El aludido, ya había cortado la distancia sosteniendo las manos del Jade entre las suyas con tanta ternura y delicadeza. Apreció con sus plateados ojos brillando, cómo las orejas de Lan Wangji se ruborizaban lentamente. Además, contrastaba perfectamente con el uniforme rojo que vestía de QishanWen para la conferencia. Era sin duda una vista magnifica.

—Hermoso —Luo WuXian murmuró, lo suficientemente audible para nadie más que su amado. En ese instante, para ambos, no había nadie más que ellos dos envolviéndose en una abrumadora burbuja de afecto ignorando deliberadamente al resto.

Los discípulos presentes de las demás Sectas a excepción de GusuLan y Lianmeng Shan, miraban atónitos la interacción de ambos herederos. Sobre todo, al ver que no se trataba de nadie más ni menos que Lan Wangji, ¡El perfecto discípulo Lan y ejemplar!

El Joven Maestro reconocido por su personalidad de iceberg viviente, quien repele la interacción con otro ser humano que no sean su hermano mayor o tío, e incluso con el último siendo algo casi limitado. ¡Lan Wangji es la definición de inalcanzable en persona!

Sin embargo, ahora mismo; toda muralla de hielo se vio derretida ante la radiante aura cálida del Luo WuXian, a pesar que este último comparte aquella personalidad estoica como el Segundo Jade; no obstante, mucho más accesible que el otro adolescente.

En definitiva, era la interpretación perfecta de polos opuestos y almas gemelas. Muchos se alegraron por ello; en especial los que conocieron personalmente al Joven Príncipe de los demonios durante su estadía en Gusu. Otros ya sospechaban que algo así ocurriría; luego de ver cómo ambos no podían estar lejos del otro, más los preocuparía el hecho de no resultar de aquella manera.

¿Querías saber cómo encontrar a Lan Wangji? Pregúntale a Luo WuXian; no, no era necesario. Porque, literalmente era de esas situaciones en la que puedes decir lleve el dos por uno. Donde estaba uno estaba el otro; si pides a uno, el otro viene incluido en el pack. Sí o sí tienes que llevarlos a ambos, y no hay excepciones.

Luo Yadian y Lan XiChen por su parte, lucían maravillados observando cómo sus hermanitos se miraban con ojos de corazones. Shen Qingqiu no parecía sorprendido por ello, más se veía así por el hecho de que Luo WuXian actuaba como lo hacía su marido cada vez que estaba con él.

ʟᴏᴠᴇ ɪꜱ ʜᴜᴍᴀɴɪᴛʏ (SAVE + AU MDZS) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora