CASADA CON EL REY ALFA 🏰[Jeongtae] [OMEGAWERSE]

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-La reina hará una fiesta de compromiso mañana, señorita-la Omega mira a su doncella, quien está haciendo una reverencia y sin poder creerlo, se acerca a ella.

-¿Qué? ¿Mañana? ¿Tan pronto? - pregunto, sin poderlo creer.

-Sí, señorita.

-¿Sabes si vendrá muchas personas? - volvió a preguntar, sintiendo su lobo movers con inquietud.

-Sí, señorita, vendrán reyes, reinas, principes y princesas de algunos reinos cercanos, como también, el pueblo vendrá, ya que se les fue avisado que habría una fiesta de compromiso y que deberían de ir con sus mejores atuendos.

La Omega de Jeongyeon se puso aún más nerviosa. Justo como ayer.

Jeongyeon no sabía que estaba mal con ella o su Omega, pero justamente ayer, cuando estaba cerca del principe Kim, sintió una felicidad, eufórica y ganas de bajar las orejas y mostrarse sumisa ante la presencia del Alfa. Era frustrante para ella, ya que, no sabía porque, ni siquiera se había sentido así nunca, haciéndola sentirse peor. No sabía si había algo malo en ella o su lobo.

-Señorita, mañana por la mañana, deberá desayunar, darse un baño y con nuestra ayuda, vestirse y peinarse, estando lista un poco antes de la una de la tarde.

Jeongyeon asintió, pensando seriamente que era lo que haría. No era que ella estuviera realmente nerviosa por verse con Taehyung, sólo qué, se sentía incómoda a su alrededor, y mañana, no sería la excepción. Después de lo que pasó ayer, la Omega trato de evitar lo más posible al Alfa, teniendo éxito por momentos.

Ese día, acabo más rápido de lo que empezó. La Omega se encontraba subiendo las escaleras hacia su habitación, seguida de sus tres. Doncellas, quienes la acompañaron al jardín trasero a distraerse y desestresarse un rato. Al estar por llegar, un peculiar aroma llegó a sus fosas nasales, inmediatamente levantó la cabeza...pero, su lobo hubiera preferido no hacerlo.

Ahí estaba, el príncipe Kim con la ministra Kim Jennie. Ambos estaban besándose.

El Alfa se separó de la Omega, al sentir un aroma que había conocido y captado ayer. Porqué sí, ambos se habían olfateado sus aromas, haciendo el ambiente incómodo durante la hora del té, el lobo del Alfa había rasguñado internamente a su humano, para dejar que saliera, pero Taehyung lo reprimió lo más que pudo.

Sus ojos se encontraron con los verdes de ella, haciendo que se separará rápidamente de la ministra, quien gruñó en molestia, para después, mirar hacia donde miraba el Alfa.

-. Jeongyeon...

-Buenas noches príncipe Kim. Ministra Jenny - Jeongyeon al mirar a Jenny, mostró sus ojos y su hermoso color en un explandor fuerte, haciendo jadear de sorpresa a la Omega.

-E-Ella es...

-Es un placer, soy Yoo Jeongyeon, futura esposa del principe Kim.

Sin perder la amabilidad, le sonrió e hizo una reverencia.

-. K-Kim...

-Veo que interrumpí algo, no se preocupen, yo sólo iba a mi habitación, realmente estoy muy cansada. Con permiso.

Sin parecer descortés y con una sonrisa ligera en sus labios, caminó, pasando entre ambos y entrando a su habitación. Sus Doncellas miraban a la Omega apenadas, sabían que el príncipe hacia ese tipo de cosas con la ministra, pero nunca se imaginaron que su futura esposa lo vería. Pero por miedo y las amenazas que anteriormente el Alfa les hizo a ellas, nunca le dijeron nada a su madre, la reina.

Las doncellas ayudaron a cambiarse a Jeongyeon, dejándola en una bonita bata de seda, mientras su cabello ondulado caía por sus hombros y pechos, y todo rastro de joyas, había sido despojado de su cuerpo.

-Hasta mañana señorita, que descanse.

-Espera... - la doncella asintió y se acercó un poco a ella.

-¿Necesita algo más, señorita?

-Mi madre...ella, ¿Cómo está? ¿Porqué no he ido a verla? - la doncella apretó sus labios en una fina línea.

-Su madre y su hermana están en perfectas condiciones, pero la reina le prohíbe su presencia en su habitación, ya que es peligroso que esté con ella, puede convencerla que no contraer matrimonio con el príncipe y escapar.

A Jeongyeon le pareció una idea tan tonta y absurda, pero asintió, porque no podía exigir nada y menos, cuando ella no tenía voz ni voto en ese palacio.

-Esta bien. Muchas gracias.

La doncella asintió, hizo una reverencia y se marchó.

Sólo quedaba esperar.

Nuevo capítulo, espero les guste no olviden votar.

Estan chulos ❣️💗.