Me enamoré de un...¡¿CASANOVA?! ♡Harukyu♡ *TERMINADA* ✔️

🌹Capítulo 21🌹♡FINAL♡

Airi

Mi hermano y Junkyu eran un par de tontos.

Se amaban y ninguno de los dos decía nada.

Todo porque había ocurrido un malententido: Mi hermano pensaba que Kyu estaba con Yoshi y Kyu pensaba que mi hermano estaba de cassanova otra vez y por eso ignoró sus llamadas.

Sabía perfectamente que no tomarían cartas en el asunto porque estaban molestos el uno con el otro.

Supongo que este es un trabajo para Watanabe Airi. Debo de ponerme en ello.

No quería estar más de intermediaria para los dos. Me había cansado de ser su palomita mensajera, por lo que decidí organizar un plan que si Dios quiere, todo saldría bien y tendría al fin mi shipp confirmado.

Los amo demasiado, y siempre supe que tarde o temprano mi hermano se daría cuenta de que también amaba a Kyu. Los comencé a shippear desde el momento en que se vieron por primera vez, y no porque Kyu lo mirase, sino porque mi hermano no le quitaba los ojos de encima. Casi se cae ese día el princeso.

Y se besaron. Yo tenía obviamente que shippearlos. Desde entonces lo he seguido haciendo, les tomo fotos a escondidas y las comparto con mis amigas, y también a algunas fujoshis cómo yo que se las vendo. Porque debo de ganar algo a cambio, obviamente. Todas me tienen envidia por vivir con un chico tan guapo como lo es mi Oppa, y por estar a tan solo una habitación de diferencia de la misma en la que él y su mejor amigo están siempre. Todo un tesoro, la verdad.

Incluso he buscado en el fondo del Internet acerca de hechizos de amor y me topé con un libro. Una foto de ambos, velas blancas, un círculo con sal y cabello o prendas de vestir de ambos y el hechizo daría efecto.

Tardé 13 años, pero el punto es que lo logré.

No podía estar más feliz porque mi hermano descubrió lo que sentía. Y me parecía perfecto que fuera con alguien como Kim Junkyu, la persona que más lo amaba en el mundo. Porque siempre me ha contado todo lo que siente por él y me daba mucha lástima que mi hermano fuera un estúpido inconsciente. Pero sucedió, finalmente el día llegó. Después de esperar por mucho y superar obstáculos como el gusto de mi hermano por las fiestas y los ligues de una noche y el metido Yoshi en mi historia de amor perfecta, ambos podrían ser felices.

Solo que no se hablaban. Y yo no podía permitir esto, claro que no.

Debía ponerle un felices para siempre al final de mi fanfic. Ese en el que llevaba trabajando desde hace años y que terminaría con ellos dos casados y con hijos. Todo perfecto como debe ser.

Preparé un encuentro entre los dos citándolos en el puente del lago de los cisnes, el lugar más hermoso de toda la ciudad. Y aunque desconfiaron un poco al final aceptaron porque les dije que uno quería hablar con el otro y viceversa, todo no era más que un macabro plan de mi parte, acerca del cual no sabían para nada. Me reí diabólicamente en alta voz en mi habitación mientras pensaba en él, escribiéndolo en mi libreta rosa con mi bolígrafo de plumas.

Esta noche esos dos iban a hablar. Seguramente pensaban que uno de los dos se disculparía. Y quizá no debía meterme en su relación y respetar sus decisiones, pero a la mierda, en las series que veo así es como se resuelven los malentendidos, con un encuentro en el que cara a cara confiesen sus sentimientos. Cruzaba los dedos porque estos no hubieran cambiado y sucediera el beso, claro que sí. Me sangraba la nariz solo de pensarlo. Debía tirar muchas fotos del tan ansiado momento.

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Un poco antes de que se pusiera el sol, fui al lago para decorar el lugar. A lo largo del puente esparcí pétalos de rosas rojas en el suelo y al final de este coloqué un arco nupcial que se asimilaba al muérdago de la navidad.