Capítulo 27

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Después de la cena, Su Yanyi regresó a su habitación. Había varias bolsas de compras en su cama. Ella los abrió.

Dentro había pijamas de conejitos, pijamas de panda, pijamas de tortuga y pijamas de monos, algunos de dos piezas y otros enterizos. Una palabra podría resumirlos todos, lindo.

Estas eran las cosas que le había ordenado a Kang Zhong que preparara para ella.

Ahora bien... ¿Cuál debería ponerse primero? ¿Podría hacer sonreír a Qin Jiran con esto? Por el bien de su sonrisa, Su Yanyi realmente había hecho todo lo posible esta vez. Ella entendió que había que hacer algunos sacrificios.


Maestra, esta tortuga es tan linda. ¿Puedes ponértelo primero, por favor? ¡Ese caparazón verde es demasiado lindo!


Intervino 001, la voz de la niña ficticia sonaba pequeña y emocionada, dejando a Su Yanyi sin palabras. Solo podía esperar que Qin Jiran tuviera los mismos gustos que 001.

Se puso el pijama de tortuga y se dirigió al estudio de Qin Jiran. El hombre estaba hablando con alguien por teléfono. Sus ojos se lanzaron instintivamente hacia la puerta cuando la escuchó abrirse, y en el momento en que la vio, sus ojos se abrieron y su cuerpo se congeló.

La voz de la persona que habla en la otra línea de repente se convirtió en un ruido de fondo.

"Tú, tú..." Qin Jiran de repente sintió que todas las palabras le habían fallado.

Cuando la persona en la otra línea levantó la voz para preguntarle a Qin Jiran lo que dijo, el hombre finalmente salió de su aturdimiento. Se apresuró a decir algunas palabras por teléfono antes de colgar.

"Puedes seguir haciendo lo tuyo, no me hagas caso", dijo Su Yanyi. Mientras hablaba, tranquilamente se dirigió a un sofá cercano y se sentó.

Qin Jiran recorrió con la mirada su atuendo, mirando con cautela su conjunto de pijama de tortuga verde. Luchó internamente un poco antes de decir finalmente con fingida compostura: "No es nada. ¿Necesitas algo? ¿Qué tal si desayunamos gachas de maíz mañana? El maíz fresco sabe muy bien".

La mención de la comida hizo que Su Yanyi se sintiera muy feliz, pero la decepción la reemplazó cuando vio que la expresión de Qin Jiran era fría.

¿Por qué no estaba sonriendo? ¿Podría ser que ni siquiera este ridículo atuendo fue suficiente para hacerlo sonreír?

Enfurruñada, se levantó y se acercó para pararse frente a él. Luego, levantó la cabeza y lo miró sin pestañear. Su mirada era tan desconcertante que sintió que se le erizaba la piel.

Dio un incómodo paso hacia atrás, pero mantuvo la mirada fija en su rostro, temiendo que, si miraba hacia abajo y veía su pijama de tortuga, se reiría.

Eso sería malo.

Su falta de respuesta llenó a Su Yanyi de más decepción. Parecía que su decisión de usar un atuendo tan ridículo realmente era... bastante ridícula.

"Continúa trabajando", dijo antes de darse la vuelta para irse. Dado que esta táctica era ineficaz, tendría que pensar en otra cosa.

Dejando atrás al inconsciente Qin Jiran, regresó a su habitación y se quitó el pijama de tortuga. Luego, los arrojó junto con los otros conjuntos de pijamas a su armario. Decidió no volver a jugar a ser linda; era demasiado ridículo.

Rebirth of the Film Emperor's Beloved WifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora