Aria Carter
Viernes 3 de septiembre.
Al correr de esta semana me habían llegado notas que me citaban al bosque de mi ciudad, era donde los chicos de mi secundaria citaban a las chicas para declararse, raro, pero era como una tradición, pero, era una hora antes del partido de fútbol. Y le había prometido a Liam ir a verlo.
No tenía con quien hablarlo de si era una buena idea ir o no, porque no había la suficiente confianza para hablarle con Bella, porque para alguien que no fuera del pueblo, podía ser una estupidez. A mi nunca me habían citado ahí, pero a mis amigas si, y siempre lo había anelado.
Pero aún después de meditarlo, por horas y todos los días que me aparecían esas notitas, decidí ir.
¿Pendeja? Si.
Pero también me comencé a preguntar quien podía ser. No podía ser ninguno de los nuevos porque no sabían de esa "tradición" local, ísí que supuse que era alguien que ya conocía.
Cuando volví del instituto me bañe, estaba sola, ya que Milo estaba entrenando y papá estaba en el restaurante.
Saqué de mi armario un pantalón negro de Jean y una campera de cuero negra con una remera blanca ajustada.
Me coloque un poco de rimel y corrector de ojeras. Agarre mi teléfono y salí de mi casa. Quedaba a unos 15 minutos caminando de mi casa, y estaba un poco atrasada así que apure mi paso. Al estar ahí me plantee si seguir caminando o no así que me di vuelta para volver, pero algo me hizo seguir y entrar al bosque.
Me apoye sobre un árbol, uno en el que me había contado Bone qur tuvo su primer beso. Quedé mirando la entrada del bosque, o por lo menos por donde todos entraban.
Al cabo de unos dos minutos llegó quien suponía que me había mandado las notas, mi respiración comenzó a acelerarse igual que mi corazón, no podía a creer lo que veía. Quede paralizada, sin poder hablar ni mover un dedo.
Orión Hassing
15 minutos antes
-Si Liam, te llevo los guantes -le respondí a mi hermano y abri la puerta principal- ya estoy saliendo, pero si no me cortas no me puedo ir -cerre la puerta- chau Liam -le corte.
Levante la vista y vi a Aria salir casi corriendo en la dirección contraria al partido, se supone que todos van a los partidos. No me culpen, la curiosidad me mata. Me subí a la camioneta y comencé a seguirla con cierta distancia y lentes de sol.
Se detuvo en un bosque, se dio vuelta algo nerviosa, pero entró al bosque igual.
Cuando fui a bajar para seguirla alguien se me adelanto, y dude al bajar. De las últimas personas que esperaba ver. Tenía varios pensamientos de que podían estar haciendo ellos dos ahí, pero me negue a aceptar que era lo que pensaba. Y me baje de la camioneta. Me escabullí entre los árboles para que no me vieran.
-¿profesor prescot? -hablo Aria, su voz se notaba extrañada.
-Aria-hablo él y se escucharon unos pasos, no pude ver, pero se que se acerco- me alegra que allá decidido venir.
-si, no creo que se confundio, o yo, no tuve venir, fue una buena lección de vida profesor -se río nerviosa y comenzó a caminar.
Me asome sigilosamente para verlos y la tomo del brazo.
-espera, podríasos hablar, se que sos una chica muy lista y estas pasando por un momento complicado con tus amigas, podríamos hablar.
ESTÁS LEYENDO
Todo es por ti
RomanceUna serie de eventos desafortunados lleva a la desaparisión del profesor Rober Prescot, los ojos del pueblo se fijan en en los estudiantes de la secundaria de Glasgow. La unión de dos personas completamente diferentes para un bien común. La historia...