De maestro a doctor

Capítulo 1

El tiempo solía avanzar demasiado rápido, hace catorce años apenas que habían llegado a Alemania, no sabía nada de su cultura, comida e idioma, sin embargo gracias a su suegra logró aprender todo. Conforme pasó el tiempo también muchas cosas cambiaron: Inuyasha y Kagome se reencontraron para después casarse y tener una hermosa niña llamada Moroha, Naraku junto a Kikyo se fueron a vivir a Japón, ellos no lograron tener hijos pero cuidaban a Kasesh mucho, este último actualmente estaba a punto de cumplir la mayoría de edad; sin duda era un hombre muy apuesto con ese cabello plateado y ojos rojos, se parecía a su hermana Towa aunque el mayor tenía rasgos de su tío Naraku. Inutaisho hace tres años que falleció dejando a Izayoi sola siendo visitada por su hijo y nuera muy seguido. Kanna se casó y vivía muy feliz junto a su marido mientras que Jakotsu definitivamente decidió cambiar su carrera siendo ahora uno de los mejores diseñadores volviéndose algo parecido a fuckboy pero saliendo con puros hombres nuevamente. Sango seguía con Miroku en un feliz matrimonio y sus hijos hermosos, solían visitarlos cuando iban a México.

Actualmente Rin tenía treinta y seis, mientras que Sesshōmaru..., bueno la edad de él no era tan relevante, lo importante es que seguía siendo muy fuerte y atractivo teniendo a miles de mujeres a sus pies a pesar de ser casado. Sus hijas Towa y Setsuna tenían catorce años, ambas demasiado hermosas siendo la mayor más parecida a su mamá con el cabello de su padre mientras que la menor era más parecida a su padre con el cabello de Rin. El peliplata no solía decirlo pero sin duda estaba orgulloso de la belleza de sus niñas al igual de sus logros los cuales eran muy diferentes. 

Setsuna había destacado bastante en música y académicamente mientras que Towa destacó en deportes y gastronomía. Ambas eran bastante diferentes, la mayor era una persona muy alegre, expresiva en cambio Setsuna era lo contrario; pero juntas eran un desastre es por eso que en este momento Rin escuchaba como castigaba a ambas y estaba molesta.

—Ya basta Sesshōmaru.

—No Rin, basta tu..., eres muy blanda con ellas.

—Si quiera las conoces suficiente, a ellas les da igual tu castigo —Rin mantenía la calma, a pesar de que estaban algo grandes no quería que sus hijas vieran una discusión fuerte pero sentía que ya era suficiente, la azabache estaba cansada ya de la indiferencia de Sesshōmaru, sabía que él trabajaba para que no le faltara nada a su familia pero él no sabía que a ellas les faltaba él pues se había hecho un padre ausente. Rin por esa razón se salió de trabajar viendo como sus hijas estaban tristes y se sentían solas, ellas no tenían suficiente atención; Towa fue la que le dijo todo eso cuando tenía doce años así que la azabache decidió dejarlo todo por ellas. Quizá no les faltaba nada económicamente, pero descuidaban ese aspecto sentimental.

—Volveré al trabajo —El peliplata se volvió hacia la puerta —Luego hablaremos lo de la escuela.

Una vez que se escuchó la puerta del apartamento cerrarse Rin suspiró mientras que Towa derramaba un par de lágrimas, Setsuna sólo se volteó a otro lado un poco incómoda sin saber como reaccionar a la situación. La azabache se acercó a su hija mayor abrazándola con una mano y con la otra se acarició el vientre.

—Se pondrá furioso cuando se entere —Le dijo su hija llamando la atención de su hermana menor. Rin estaba embarazada.

—No se puede hacer nada.

—¿Por qué no me quiere?

—Ni digas eso, él te ama y quiere lo mejor para ti, pero no sabe como expresarlo.

Todas se quedaron en silencio viendo el ventanal del lugar donde actualmente se hospedaban y es que hace algunos meses atrás cuando Kasesh estaba de visita, entre los tres accidentalmente golpearon un tubería de gas en la mansión donde vivían, fue por eso que se fueron al apartamento que Kanna les prestó en lo que arreglaban ese problema de la mansión.