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¿Me pueden decir si les salen todos los capítulos?🥺🥺🥺 A MI ME APARECEN COMO NO PUBLICADOS LOS QUE YA PUBLIQUÉ .

Muchas gracias por leerme.
Un abrazo.🍒

Rose.
25:

—Entonces, ¿Necesitas que vaya contigo porque eres un bebé aún?

—No, Rose. Deja de molestar. —Responde fastidiado. —Necesito a un fósil que esté conmigo en el viaje, y tú eres la indicada.

—Si esa es tú manera de convencerme, créeme que cada vez te alejas más de ello.

—Ya, Rose. Te lo estoy pidiendo por favor.

—Está bien. Yo solo bromeaba. Por supuesto que te voy a acompañar al viaje, ya ha pasado demasiado tiempo desde que vimos al tío Theodore y su familia.

—Ni pareces la mayor. —Se queja.  —Y recuerdo escuchar que él y su familia no viajaron porque estaban con los padres de ella. O eso creo, mira que el dúo hacia tanto ruido.

—Sí, justamente por eso ha sido. —Dejo la cama, tengo que estar de regreso con mi padre en su empresa. — ¿Cuándo sería el viaje?

—La siguiente semana, después del cumpleaños de nuestro padre. Por cierto, ¿Sabes qué regalarle? Ya terminé con mi lista.

—Te vas de la ciudad, y del país, hermanito. Ya sabrás tú qué puedes regalarle. —Alzo los hombros. —Y ya que estamos aquí, ¿Has notado rara a nuestra madre?

—Sí, y es por mi viaje. Al principio lo aceptó, pero ahora tengo la percepción de que tiene dudas sobre ello, pero ya tomé mi decisión de estudiar en Seattle. —Ladeo la cabeza.

—Supongo que tendrá sus recuerdos allá, pero nada de eso tiene que repetirse... Considero. —Le palmeo el hombro. — ¿Estarás por la noche?

—Tendría sentido, ya le tranquilizaré. Claro que me verás, ¿Por qué no?

—Con eso de que hora sales a cenar, al cine... —me mofo.

— ¡Calla! Qué haces lo mismo y nadie te dice nada. —Contrapone. Me río, no lo gana.

—Pero yo salgo con mi novio... No con mi no oficial, pero que solo los dos creen que nadie sabe nada. —Muevo la cejas.

—Valentina y yo solo somos amigos, estuvimos todos estos meses juntos salvando  su año, es eso.

—Como tú digas, Manuel. Pero... —camino a la puerta—, los besotes en el jardín y las manitos agarradas no dicen lo mismo.

Salgo corriendo para no escuchar su respuesta. Alcanzo a escuchar murmullos, me río sola. Mi madre y yo comentamos justo ese tema, e incluso papá ha mencionado verles muy juntos cuando iba por ellos al colegio o cuando pasa a recogerlos después de sus salidas. Y qué no sabrá más el diablo por viejo que por diablo.

— ¿Nos vamos? —le pregunto a Iker al entrar al cuarto de seguridad.

—Solo déjame guardar esto —desliza el libro en el estante. —Ya podemos irnos.

—Me encanta que te tomes tan en serio tus estudios, estoy segura que serás el mejor de todos ellos. —Sonrío y tomo su mano. — ¿Qué leías?

—Las leyes, Rose, siempre leyes y más leyes. —Pese al tono monótono de su voz, sé que está emocionado por lo que se viene. — ¿Y tú con tu tesis?

—La tengo totalmente controlada, seré la primera en hacer la defensa, y mírame, voy de aquí para allá como si nada. Y te confieso, estoy ansiosa, más no nerviosa.

TAN CERCA DE MI©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora