capitulo 7

214 13 2
                                    

DANIELA.

-apolo por favor ayúdame est - –con lagrimas en mis ojos y débil hablo a través del teléfono-

Mi mejilla suena en una cachetada haciendo que suelte el teléfono

Unos minutos antes ...

El aire en mi rostro me hace sonreír, siempre me ah gustado salir por las noches a caminar o salir a fiestas, es como liberarme de todo el peso que traigo encima.

Tan solo faltan unios cuantos metros para llegar a casa y tomar los malvaviscos. Iba pensando en el momento con apolo hace unos minutos, cuando alguien tapas mi boca con un trapo, Daniel me ah enseñado muchas cosas de boxeo pero lamentablemente ninguno funciono por el miedo que tenia en este momento, mi cuerpo cada ves se siente mas débil hasta caer en sueño profundo, siento como un par de manos me tocan para subirme a un carro ...

Hora y media después

Abro rápido mis ojos al recordar lo ultimo que paso, todo mi cuerpo se siente sumamente débil. Al abrir mis ojos solo puedo encontrar oscuridad mas un rayito de luna que se cola por una diminuta ventana

Tengo que salir de aquí ...

Miro a todos lados para buscar una manera de salir pero es imposible, todo esta oscuro y no quepo por esa diminuta ventana, dejo caer mi cuello comenzando a sollozar, siento las lagrimas aproximarse when alguien abre una puerta de metal haciendo un ruido escalofriante eh irritable . Escucho unos murmuros por parte de dos hombres los cuales entran a los segundos.

Uno me sonríe pícaro y el otro pasa su mirada por todo mi cuerpo

Quiero salir de aquí, quiero irme a casa, no quiero estar mas tiempo acá

--Daniela escúchame, siempre pero siempre debes llevar una navaja contigo y tu celular, por mas que parescas loca debes hacerlo ¿me entendiste? - las palabras de Daniel resuenan en mi cabeza, con discreción tomo una mini navaja que estaba en mi pantalón, los dos hombres se me acercan y comienzan a tocarme. Me muevo incomoda mientras suelto lagrimas-

-sh sh sh deja de moverte o te ira peor –cierro con fuerza mis piernas escuchando a aquel señor asqueroso. Mis lloriqueos se hacen presente mientras suplico que me dejen ir, el otro señor pasa con un lado mio y comienza a tocar todo mi abdomen-

Asco, eso es lo que siento

Con mi pequeña navaja desato las cuerdas que tenían agarradas mis manos, me muevo rápido y le encajo mi navaja a ambos señores, estos se quejan

-hija de perra –escucho a uno decir y rápido saco mi teléfono, mi primer contacto es Raquel así que le llamo-

-¿Dani? ¿Dónde estas? –Lloro al escucharlo, es apolo- ¿Dani estas bien? ¿Por qué lloras?

-apolo por favor ayúdame, est- -mi mejilla suena en una cachetada dada por un señor, escucho a través del teléfono a apolo gritar por este pidiéndome mi ubicación, repito ayúdame unas cinco veces y el señor mas mayor tira mi teléfono la pequeña ventana -

-¡¡NO, NO, SUÉLTENME YA !! –Mis mejillas están empapadas de lagrimas causadas por las varias cachetadas que me han dado, por el estrés de no poder salir de aquí y por el miedo ...-

Uno de los señores me mira de arriba abajo y niega con rapidez mientras el otro sube mi blusa y posa una mano en uno de mis pechos, con mis manos desatadas lo empujo y le piso la cara llorando, el otro me agarra los brazos y pataleo tratando de liberarme pero me es imposible.

A través de su sonrrisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora