Infierno prohibido

capítulo 5

Ambrosia

Llevo tres copas y aún no puedo dejar de pensar en Azazel él lleva besándose con dos demonios diferentes.

Es increíblemente irritante, ya que cada vez que se besan él me mira y no entiendo por qué.

—Hola, guapa—me saluda un demonio, el cual es una clase 3 o 4 es de los que poseen a los humanos

— mi amor—le digo mientras tomo un último trago y empiezo a tocar el pecho del demonio

—quieres ir a un lugar más privado?—Pregunta a lo que asiento mientras lo beso

Los dos salimos del sito de la fiesta y encontramos un cuarto donde hay una cama y algunos santos al rededor

—uy vamos a pecar —digo mientras él empieza a quitar mis zapatos

Entramos en una guerra de besos donde él empieza a besar mis pies cosa que me calienta demasiado, sube sus manos y saca mi tanga lanzándola a un lado de la cama, sube su mano por mi muslo llegando a tocar mis labios los cuales estaban bastante húmedos, pero no llegamos a más, ya que una voz nos interrumpe

—creo que ya llegaste demasiado lejos—dijo el maldito Azazel mientras mataba al demonio con solo mirarlo

—que mierda te pasa! —digo levantándome y empujando su pecho haciendo que choque contra la puerta

—que te importa —dijo mientras recogía mi tanga y salía del cuarto

{maldito hijo de puta}

No sé si es la frustración o que, pero las ganas de llorar llegan haciendo que gotas negras salgan de mis ojos, muchos creen que los demonios no siente o no tienen nada, pero claro que si solo que para nosotros es peor, ya que cuando un demonio sufre o llora el vicio llega a nosotros, muchos empiezan a comer en exceso y otros a beber o drogarse y tener relaciones por montón dejando a su familia y cosas así, vivimos lo que hacemos sentir a los humanos básicamente tenemos una especie de karma cuando lloramos o sentimos tristeza

—ya, mortem tienes que calmarte —me dije a mi misma intentando lidiar con todo lo que está sintiendo.

Necesito salir de aquí antes de que los vicios lleguen a mí y empiece a tomar o drogarme

—amor mío —dice oxy corriendo hacia mí --mírame-- dijo mientras agarraba mi cara y me hacia mirarla.

¿—porque estás triste? —dice mientras olía mi cuello ya que ella tienen ese poder, siente los sentimientos de todos con sus olores

—estoy bien solo me canse por eso me voy, amor—digo antes de besarla y dejarla atrás.

Salgo de la iglesia y me doy cuenta que ya es muy tarde es la una de la mañana y conociendo a los portadores de alma se que no es bueno ya que algo me puede pasar, demonios me pueden atacar y es muy malo

{humanos idiotas }

Tengo un largo camino hasta el hotel, ya que queda lejos y no puedo usar mi magia.

—hola chica —me dijo un chico que conducía en un carro negro —necesitas que te lleve? —me pregunto y sentí sus intenciones las cuales no eran malas pero algo en el no me gustaba

—claro, voy para el hotel—dije mientras subía al asiento de copiloto, ya que estaba muy cansada y no me importaba nada

— ya se a que hotel vas —me dijo haciéndome desconfiar mas

—bueno...cuantos años tienes?—le pregunte intentando ignorar la extraña sensación que tengo —yo tengo 17-

—yo tengo 19 reciento cumplidos —dijo mientras colocaba su mano en mi pierna—no pareces de 17 —dijo mientras sabia su mano por mi pierna

—si, me gusta cuidarme—dije mientras intentaba no sentirme incomoda

—bueno pues a los de arriba también les gusta cuidarte — dijo haciéndome estremecer al instante pero no logre preguntarle nada ya que sus ojos se pusieron blancos y un fuerte dolor invadió mi mente y muchos gritos se escucharon a tal punto que el dolor era insoportable y no aguante mas, me desmaye

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Me desperté después de un rato esposada en una silla

{porque mierda no me puedo teletransportar}

busco con mi mirada la razón por la cual no puedo teletransportarme y lo descubro muy sencillo ay muchas runas en todo el cuarto esas runas evitan que los demonios usen poderes.

--Miren quien despertó --dice el chico

--maldito, que es lo que quieres--dije mientras intentaba soltar las esposas.

--En el cielo hay un rumor--dice mientras me da un puñetazo en la cara --dicen que portas sangre de ángel y demonio, cosa que es imposible --dijo antes de golpear mi cabeza haciendo que sangre negra salga de la herida.

--Vamos a ver si es verdad--dijo mientras intentaba meter una aguja en mi brazo

--maldito déjame--digo intentando luchar para que no me toque --no me toques idiota--no logro nada, ya que la aguja entra en mi brazo.

El maldito sacó sangre de mi, cosa que me hace pensar, si tengo sangre de ángel pudo usar algún poder celestial, ya que las runas no funcionan con poderes angelicales.

{Vamos ambrosía concéntrate}

Se supone que mediante algún poder podría llamar a Azazel y pedirle ayuda.

Mi mente queda en blanco y solo pienso en una persona Azazel el cual aparece en mi mente y empiezo a pedir ayuda, supongo que lo logre, ya que sangre roja empieza a salir de mi nariz, eso significa que no use poderes demoniacos.

--Dime nena --dice acercándose a mí agarrando mi mentón y alzando mi cara --dicen que Azazel volvió al juego?--dice asiéndome sorprender, ya que no sabía que él ya era un príncipe desde hace mucho.

--Veo en tu carita que no lo sabías --dijo mientras intentaba besarme.

sus labios tocaron los míos pero enseguida me aparte a lo que el respondo riéndose-

--Azazel fue un príncipe desde los 15, ya que sus padres fueron los primeros en seguir a lucifer y azazel demostró ser el mejor en todo--dijo mientras mezclaba unas cosas con mi sangre

--el siempre trabajo bajo las sombras, pero los ángeles siempre supimos que era un príncipe tanto así que enviamos a un ángel para asesinarlo--dijo mientras yo veía como mi sangre se volvía blanca cosa que me asustaba y no entendía el porqué

--el único problema es que Azazel y carla se enamoraron, el cielo ardió bajo el engaño de carla por lo que le dieron a elegir entre el cielo o Azazel --dijo mientras yo no podía creérmelo mi mente estaba en blanco no podía ni imaginarme a Azazel con pareja.

--Y obviamente carla eligió al cielo sin importarle Azazel, Azazel cayo en la tristeza cosa que trajo los vicios con ello, tiempo despues Carla confeso tener un secreto por el cual quería volver al infierno pero nunca la dejaron volver --dijo.

Yo intentaba asimilar todo lo que me estaba diciendo cosa que me costaba mucho, ya que no me imagino el dolor que debió pasar Azazel.

—cual era el secreto?—dije intentando entender todo que sucede.

—veo que eres muy curiosa—dijo

Pero todo quedo interrumpido por una fuerte explosión que me sacó volando haciéndome chocar contra una pared por lo que me desmaye  al instante.