My Sweet Love || [Ereri] 🌸

Cap.2: Promesa.

3 meses después

Han pasado 3 meses desde que me mude a la casa de los Jaeger.

Tres meses, que Eren me había dedicado solo a mí...

Hacíamos diferentes cosas, sin salir del terreno de los Jaeger.

Dormíamos (y mucho, en la cama, sobre el sofá o en el césped del jardín), veíamos la Tv (no sabía que existían tantas películas y series), caminar por los patios (algo sencillo, pero, podíamos charlar), recorrer juntos...

Pasábamos parte de la noche, solo charlando y contando nuestros secretos, que nos gustaba, que no nos gustaba, las manías que teníamos, entre otras cosas (me confeso que nunca se había interesado en un chico, y yo le dije que nunca había salido con nadie), yo creo que las carcajadas que dábamos de repente, las escuchaba toda la ciudad.

Era la primera vez que hablaba con alguien de esta forma, era mi primer amigo.

También habían sido tres meses, desde la partida del señor Jaeger de su viaje de negocios.

La primera mañana que pase en la mansión, llegaron las cajas con mi ropa, la verdad era demasiado femenina, pero me gustaron algunas cosas (me gustaban las sudaderas esponjosas).

Aquí, estaba mucho mejor.

***

Yo estaba viendo la Tv cuando Eren se sentó a mi lado y me entro una caja.

—¿Qué es? — le pregunte, era una caja un poco mas grande que mi mano.

—Ábrelo—.

La abrí, era un móvil, nunca había tenido uno... la verdad nunca me intrigo tenerlo.

Me entrego una hoja con mi correo y contraseña, la clave del wifi y otros datos que solo mire confundido.

—No te preocupes, olvidare tu contraseña en unos minutos— me confeso sonriendo, aunque a mí no me importa.

—Esto...— Eren tenia mucho dinero, así que no podía quejarme en que esto era muy costoso como para permitirse —Por que me das esto—.

—Es un obsequio—.

Intercambiamos números.

—Si tienes dudas con el móvil, llámame, o por una emergencia, he incluso si solo quieres llamarme— me dijo sonriente.

Me dio un beso en la mejilla y dijo que volvería tarde y no me preocupara, que no lo esperara a cenar... no hace falta decir que asentí sonrojado, el me beso, fue en la mejilla, pero... igualmente se sintió especial.

Él se fue.

Por primera vez, me quede solo en la gran mansión de los Jaeger.

***

Levi estaba solo en casa, las criadas se habían ido a sus hogares con sus familias, ya eran las 12 de la noche.

Quería llamarle, pero sentía que no debía hacerlo, era tarde y quizás estuviera ocupado, y no estaba del todo aburrido, tenía el plasma y vio películas, también descargo algunos juegos en el móvil.

El pelinegro comenzó a jugar con uno de los pompones de su pijama, era rosa y consistía en unos shorts ajustados con un chaleco que tenía pompones colgando y todo hecho con una tela de algodón, traía unas pantuflas de conejo, le gusto que fueran ajustadas, así no se caían o despegaban de sus pies.