COME BACK HOME (Oliver Aiku × OC) [Blue Lock]

nice while it lasted

- ¡Viniste, Arai! ¡Por fin te veo! A veces parece que no vivimos en el mismo pueblo.- Yoha, detrás de Carla hablaba. Parecían sacadas de “Mean Girls”.

Yoha era buena chica, pero Carla cambiaba a cualquiera, parecía poder manipular a la gente a su antojo.

- También me alegro de veros.- Hayami falsificaba sus sonrisas demasiado bien, por suerte, sólo yo sabía cuándo eran verdaderas.

- ¿Por qué no te vienes con nosotras? Todas estamos allí.- Yoha me arrebató la silla de las manos.

- Tranquilo, estaré bien.- Hayami me tranquilizó.

- Sí, tranquilo, te la devolvemos enseguida.- Carla también me sonreía, pero con un aura totalmente diferente.

- Pasadlo bien.- dije antes de retirarme, es cierto, chicos y chicas habían hecho dos grupos separados. Seguramente para ponerse verdes y cotillear entre ellos.

Vi de lejos a un rubio teñido, tenía el pelo tan desenmarañado como yo lo suelo tener y hasta que no vi su perfil, no hubiera adivinado de quien se trataba. Esas gafas de pasta negra eran icónicas.

- ¿Yuki?- Yuki Hakano, solíamos jugar juntos al fútbol en primaria, pero antes de terminar el primer curso de secundaria, se mudó a la ciudad con sus padres y su perrita la portera.

- ¿Oli?- él era el único que oficialmente podía llamarme así.- ¡No me lo creo!

Dejó su copa a alguien más y me abrazó fuerte. Echaba de menos ese olor a vainilla que lo distinguía del resto. Cuando se separó pude observar su piercing en su labio, estaba algo maquillado y vestía de blanco, todo lo opuesto a mí.

- Pero qué… Yuki, pareces otra persona.- dije sonriendo gracioso.

- ¡Mira quién fue a hablar! Aunque la verdad, mucho Gucci, pero sigues teniendo esa cara de vagabundo de siempre, ¿qué con esa pelusa que tienes en la cara?- se burlaba de mis tres pelos que tengo por barba.

- Cállate, la barba ahora se lleva así.- aparté su cara juguetón.

- ¡Sí, claro! ¡Oh, por cierto! Te quiero presentar a alguien.- agarró la mano del chico que aguantó su vaso.- Sé que dijeron que sería descortés trae a alguien de fuera, pero la verdad es que me da igual. Él es Aston, mi novio.

El chico era más alto que Yuki, pero no más que yo. De pelo negro corto, con flequillo a los lados de su cara, como cortinas y sus ojos verdes. Vestía de negro igual que yo, ellos dos juntos parecían el ángel y el demonio.

- Oh, encantado, soy Oliver Aiku.- le ofrecí mi mano, pero él al cogerla, rompió todos mis esquemas que me hice en la cabeza. Atrapó mi mano y me atrajo hasta él para darme dos besos, uno en cada cachete, para luego mirarme con una sonrisa.

- ¡Soy un gran fan tuyo! ¡Casi me da un ataque epiléptico al verte entrar por esa puerta!- este chico era francés seguro, tenía un acentazo que no se lo quitaba nadie.

Me quedé un poco pillado y sorprendido y eso Yuki lo notó.

- Aston no es fan del fútbol ni nada, sólo le gusta los futbolistas que están buenos.- se metió en la conversación.- Pero tranquilo, no estoy celoso ni nada, porque yo soy igual con los cantantes.

- Me tienes que contar mucho Yuki, por lo que veo.- le dije mirándolo de reojo y con una sonrisa.

- De mí no te libras esta noche, Oli.- me guiñó un ojo.

Yuki era estudiante todavía, él estudia química y Aston, física, así, en la facultad de ciencias, se conocieron. Vaya pareja. Según mi amigo, nunca supo que le gustaban los hombres, simplemente nunca estuvo interesado en el amor hasta que conoció a Aston, así supo que el amor no entendía ni de género, ni de sexos. Yo igual le expliqué como había vivido estos seis años, de partido en partido y de chica en chica. Pero después me dijo algo que me dejó seco.

- Bueno, eres un tipo que va de flor en flor, pero lo de Carla lo tenías bien escondido, ¿eh?- me dio un codazo.

- ¿Qué?- él noto mi cara de confusión total y arrugó la suya.

- No sé, lo dicen todos, que al final volviste con ella, ¿no es así?

- No… Yo… Yo no…- en ese momento escucho las ruedas mojadas de la silla de Hayami haciendo más estruendo de lo normal y cuando giro mi cabeza, la veo desaparecer por la puerta.