~Woosan Oneshots~

~Solo quería verte sonreír~

Pese a que el trabajo le ocupaba a San la mayor parte del día, siempre le dedicaba un tiempo a disfrutarlo con Woo, yendo a la piscina, al parque, a pasear al río, a cenar al restaurante favorito del menor e incluso, yendo al cine, aunque ninguno de los dos acababa viendo la película porque se dormían a la mitad.

Sin embargo, esta vez era diferente. San estaba a cargo de su primer proyecto en la empresa. Tenía que producir el próximo musical del verano: Illusion, con una temática de piratas coloridos y optimistas. Pero optimismo era lo que más le faltaba, y también, un poco de distracción.

Wooyoung, siempre tan intuitivo, lo notó enseguida y no había día en que no intentara hacerlo sonreír. Sin embargo, siempre fallaba. Se sentía triste por no poder sacarlo de ese estado y porque, para qué nos vamos a engañar, necesitaba la dosis de atención diaria de su persona favorita.

Uno de esos tantos días, Woo había preparado una sorpresa. Había contratado a una empresa de globos para lanzarlos desde el patio de la casa y que así, al asomarse a la ventana, San viera la frase "Te amo" entre diversos globos con forma de corazón. Lamentablemente, las nubes abundaban y amenazaba con llover.

Woo maldecía dentro de sí mientras recordaba las miles de veces que San le había dicho que tenía que ser más precavido, pero con lo tozudo que es, decidió seguir adelante con el plan.

En cuanto llegaron los globos, llegó la lluvia. Mientras San seguía inmerso en el proyecto, Woo trabajaba duro bajo la lluvia para poner todo en orden y que saliera todo perfecto. Dentro de lo que se pudiera.

-¡¡¡San-ah!!!-gritó Woo desde abajo.

San se asomó.

-¡¿Qué haces ahí?! ¡¿Estás loco?!- Preguntó San con notable preocupación.

Sin contestar, pero mostrando una traviesa sonrisa, Wooyoung soltó los globos.

Por el viento, no consiguió su objetivo.

-Quería hacerte llegar este mensaje- dijo Woo con mucha ilusión.

-"¿Motea?"- preguntó San confundido.

-Diablos, no ha salido como quería... Quería decir que te amo- se lamentó Wooyoung.

Sin dejar de reír, a San se le llenaron los ojos de lágrimas. Ni él se podía creer lo tierno que podía llegar a ser a veces.

-Anda, sube y ponte ropa seca que te vas a resfriar- ordenó San fingiendo estar enfadado.

Una vez estaban ambos dentro, Woo con ropa seca y tomando una taza de chocolate caliente, le confesó su plan original.

-Solo quería verte sonreír- se sinceró Wooyoung- Te echo de menos.

Sin pensarlo ni un minuto, San lo envolvió en un cálido abrazo y le besó la frente.

-Lo siento, no sabía que te sentías así. Pero, sabes que te amo, ¿verdad?

-¿Más que a ese proyecto?

-No seas tonto. Claro que sí.

Y esa lluviosa tarde, consiguieron compensar los días en los que no pasaron tiempo juntos. Una tarde maravillosa que se unirá a su colección de recuerdos atesorados.

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Hace mucho que no actualizaba, pero quería hacerlo con una historia bonita.

Como siempre, muchísimas gracias por leer, por comentar y por votar.

Un abrazo ❣