ᴄᴀʀᴛᴀs ᴀ ʟᴀ ɴᴏᴠɪᴀ ᴅᴇ ᴍɪ ᴇx| ᴄʜᴀᴇɴɴɪᴇ ɢ!ᴘ

𝟒𝟔;; 𝐃𝐞𝐣𝐚𝐫 𝐢𝐫

❝𝐂𝐚𝐫𝐭𝐚𝐬 𝐚 𝐥𝐚 𝐧𝐨𝐯𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐦𝐢 𝐞𝐱❞

Jisoo miraba a Jennie con poco de dolor en sus ojos.

La quería mucho, pero le era agotador ver las facetas tristes de la menor.

Se sentía mal de no poder hacer nada.

Jennie estaba dormida al lado suyo, y Jisoo estaba sentada en la cama con su mirada puesta en la coreana menor.

Un mal pensamiento vino a su mente, el cual era irse, le lastimaba que Jennie siempre estuviera apagada y que ella no pudiese hacer nada, pero sacudió la cabeza borrando esos pensamientos.

Se acercó a la menor más, lo suficiente como para estar pegada a su cuerpo y entonces en ese momento, tomó el rostro de su menor entre sus manos con sumo cuidado. Observó sus facciones y mordió su labio inferior con una sonrisa, no le cabe duda que Jennie es hermosa.

Pero entonces, un suceso descabellado le puso los cabellos de punta, la castaña dormida tenía algunas lágrimas pasantes por sus ojos, y escuchó muy claramente como articulaba un suave "Roseanne" mientras se recostaba mejor en sus manos.

Jisoo sintió su corazón romperse en mil pedazos.

Suspiró con pesadez y se apartó de Jennie con algo de temor de ser descubierta.

Le tenía un gran cariño a la menor, y podría considerar que pasaron un buen rato juntas, pero la mirada de la menor siempre estaba apagada y buscaba algo en los ojos de la mayor que jamás encontraría.

Jisoo supo desde el primer momento que Jennie no quería en ningún sentido utilizarla para olvidar, pero lo más seguro es que la menor de seguro no estaba en sus mejores momentos como para haber iniciado una relación.

Se sintió algo apenada cuando recibía las cartas, pero después de todo, quería ser mejor para Jennie entonces cumplía las cosas.

Funcionó mucho en su relación.

Pero al parecer no fué suficiente para hacer feliz a Jennie.

Entonces, se dio cuenta que no era algo lo que nesecitaba la menor, si no que era alguién. Y ese alguién era quien hacía que los detalles hicieran que Jennie fuera feliz. No en si por ser detalles lindos, si no el mero hecho de quien se los daba hacía que fuera especial para la coreana.

Eso no lo sabía quien escribía las cartas.

Quien escribía las cartas no sabía que era su ser el que Jennie nesecitaba.

Y Jisoo... Jisoo al pasar del tiempo se dio cuenta de aquello, y estaba muy segura que no iba a ser otra persona por una chica.

Amaba a Jennie y quería que fuera feliz.

Aunque su corazón rogara por quedarse con ella no podía. No se lo permitía.

Jisoo quería que la castaña fuera feliz si la involucraba o no.

Justo igual a Roseanne, quien incluso sacrifico muchas cosas por la coreana, la diferencia es que ella era la felicidad de Kim Jennie.

Jisoo miró a Jennie con la mirada gacha, al parecer la coreana menor tenía un mal sueño. Entonces en ese momento, abrió el cajón de la habitación.

Aquél cajón que estaba lleno de cartas.

No nesecitaba darle una explicación a Jennie, si veía las cartas, la castaña descubriría las cosas por si sola.

Kim Jisoo no quería romperse más, entonces simplemente luego de dejar a la vista las cartas, se marchó del departamento con una pequeña sonrisa pensando que hizo bien.

Gracias por leer 💕