La Maldición Rota

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"Chicos vamos de salida, no abran la puerta y no se duerman tarde" indico el hombre en el marco de la puerta a los adolescentes.

"Sí papá"

"Sí John"

Respondieron los dos sin despegar la mirada de la televisión. Sus padres habían quedado en salir a comer a un restaurante con los tíos y hermanos. Ellos habían preferido quedarse al haber llegado tan solo hace seis minutos a la casa. No tenían ganas de salir para ser el centro de atención, los habitantes de Beacon los veían como una encantadora pareja milagrosa de las dos familias. Eran amigos, aunque no era que nunca fueran a tener algo más que eso más adelante, Derek lo quería y se lo demostraba a los padres del castaño con pequeños gestos.

Stiles solo se dejaba dar cariño y atención sin decir nada y eso para sus padres era algo bueno, mientras estuviera cómodo todo estaba bien para ellos. La puerta fue el último sonido que escucharon dos segundos después. Derek al no oír nada tomó el control y apagó la tele.

"¡No! ¿Pero que haces?" Cuestionó volteando al moreno que escondía el control detrás de su espalda "Estaba en la mejor parte" señaló a la pantalla frustrado "Derek"

"Podemos hacer algo más entretenido" le quieto importancia a la tele.

"Quiero terminar de ver la película Derek" pidió haciendo pucheros. Siempre funcionaba y no dudaba que está vez también lo hiciera. Pero se quedó con los ojos abiertos al sentir como los labios de su amigo se pegaban a los suyos.

¿Era un sueño, verdad? No estaba pasando.

Parpadio haciéndose atrás para verlo directo a los ojos.

"¿Qué fue eso?" Preguntó señalando sus bocas.

"Un beso" sonrió.

"Sí bueno, eso ya lo sé genio, pero por qué" no se movió de su lugar al verlo acercarse más, estaba acostumbrado a su cercania y nunca dejaría de hacerlo.

"Porque me gustas" respondió subiendo su mano hasta su mejilla.

"¿Te gustó?" le gustaba él, eso era una locura. Por qué razón le gustaría, eran amigos de la infancia, eso estaba mal "No, no puedes gustar de mí. Somos amigos Derek." Se puso de pie negando. Derek estaba confundido, eso era.

"Stiles, sé lo que siento y no pienso dejar de sentirlo" le siguió acercándose hasta estar frente a él y tomar sus dedos hasta su mano por completo, nunca se equivocaba. Sabía que desde que lo vio por primera vez le gustaba, tal vez todo empezó con cariño de amigos, pero después ese sentimiento se desarrollo más conforme pasaba el tiempo, cada hora de su vida Stiles estaba a su lado, hasta cuándo se sentía mal él lo cuidaba y al revés, ese castaño frente a sus ojos era su mundo, lo sabía. Y sin él todo perdería sentido para él.

Sus ojos verdes le demostraba que no mentía, pero no podía corresponderle, además aún era un niño y Derek se iría a la universidad de Boston dentro de seis meses. No podía interponerse en sus planes y arruinar todo. Porque si de algo estaba seguro era que Derek dejaría ese sueño por quedarse a su lado.

"No podemos Derek" sus palabras fueron firmes. Se soltó del agarre del moreno que mantuvo sus manos al aire al sentir la ausencia de su calor.

"Pero...no estoy diciendo que tengas que estar ya a mi lado Stiles, solo quiero que sepas mis sentimientos y algún día puedas aceptarme, trabajaré duro para el día de mañana merecer que estés a mi lado." Jamás pensó que aquel castaño le rechazaría, le quería, sabía que lo amaba.

"Acepto tus sentimientos Derek, pero no por ahora." Bajo la mirada avergonzado. Tenía que hacerlo por su bien.

"Entonces eso esta bien para mí, te demostraré que hablo enserio" sonrió levantando con sus manos a los lados de su mentón el rostro de Stiles "Algún día estaremos juntos como cuando niños decíamos, ¿Recuerdas? Siempre hablábamos de eso." Contó contento de recordar eso. Su Stiles siempre le decía a sus madres que se casarían cuando fueran grandes y él también les decía eso a los mayores mientras sostenía sus pequeñas manos entre las suyas. Cumpliría esas palabras, no ahora, pero algún día.

"Lo recuerdo" adquirió un rojo en sus mejillas "No podría olvidarlo cuando mi madre siempre nos apoyaba junto a los demás, hasta nos compro unos trajes a nuestra medida de pequeños para armarnos un tipo de fiesta" soltó una risita. Ese día habían armado una fiesta entre familia, mientras ellos vestían trajes.

"Sí, ellas siempre hacían sus ocurrencias" rio también admirado el bello rostro del menor.

Quería acercarse y besar otra vez sus labios, pero no podía luego de escuchar lo que había dicho. Tenía que ser paciente y llevar las cosas con calma. Así que al no poder hacer eso mejor lo tomo de la mano y los guío hasta la cama para acostarse y acomodarse como siempre hacían. Stiles dejo la charla de segundos atrás para más adelante y se pegó a él cerrando los ojos. Su olor le gustaba, le hacía cosquillear la nariz y eso era agradable. Su cuerpo emanaba calor y eso lo rodeó llevándolo a un sueño de inmediato. Derek paso sus dedos por la mejilla del menor en suaves caricias por minutos, le gustaba verlo dormir entre sus brazos.

A la mañana siguiente actuaron como de costumbre, no dejaría de hacerlo por nada del mundo. Era normal para ellos tomarse de las manos y caminar juntos. El moreno lo llevo hasta su salón de clases despidiéndose con un suave beso en su coronilla para tomar su camino a su salón.

"¿Por qué no simplemente aceptan que son pareja y ya?" La voz molesta de Liam sonó detrás de él.

"Porque no lo somos Liam" aclaró por milésima vez.

"Ajá si y yo no me tiro a Theo" tomó su lugar a su lado. Era más que claro para todos que esa pareja de amigos era más que eso. Hasta ese alfa miraba retadoramente a los alfas de su clase para mantenerlos a una distancia considerada de su amigo. No por nada Brett se había alejado tan pronto lo vio.

"Eres mío" reprochó el alfa a sus espaldas al escucharlo.

"Tú cierra la boca" hizo el gesto con su mano para que se callara "Esto es entre Stiles y yo, así que vete a sentar" mando.

Theo sonrió perverso, beso sus labios y se fue a sentar a su lugar.

"No puedo creer que Theo sea un masoquista" una mueca de disgusto hizo a Liam reír, Stiles estaba divertido de ver al alfa actuar así con su amigo "Y tú no eres el que se lo tira" murmuró.

"Lo empezó a desarrollar hace unos días, le gusta que lo ate" le guiño un ojo al alfa que le mando un beso a distancia haciendo reír a sus amigos a su lado.

"Dios que cosas hacen ustedes" movió su cabeza disgustado.

"Nos dedicamos a experimentar de todo, puedo decirte que es algo genial, deberías hacerlo con tu novio" mordió más el tema que hacía molestar a su amigo.