Loca por un ángel (yuri)

¿¿¿Me ama o no me ama???

Aquel día ya era Viernes y al día siguiente era mi cumpleaños, día en que me madre había decidido hacer una fiesta.

Estaba a punto de cumplir ya los 17, así que mi madre decidió que ella compraría aperitivos y esas cosas y nos dejaría la casa para nosotras durante toda la noche. Aquello me alegraba bastante. He de admitir que estaba bastante nerviosa.

La mañana en el instituto se me pasó muy despacio y estaba un poco preocupada.

El día anterior mi madre me había preguntado que a qué personas invitaría a la fiesta y se extrañó mucho de que no dijera a Tania.

-¿Estáis enfadadas o algo? - pregunó.

-No, pero es que ella me dijo que no podría venir - mentí.

En realidad, no le había dicho nada, ya que yo para ella ni siquiera existía. "Puede que ni siquiera sepa que mañana es mi cumpleaños..." pensé.

La verdad, ya no me importaba.

Últimamente Jake se había cogido más confianza al ver que Tania y yo no nos hablábamos, y estaba siempre detrás de ella, diciéndola chorradas y haciéndola reir. Yo me limitaba a mirar a otro lado y cuando ella estaba delante, me agarraba fuerte al brazo de Alexia, intentando poner celosa a Tania.

Estaba yo pensando en esto cuando me llegó una nota. Era de Jake.

Jake: oye, sigues con Tania?

Yo: pregúntala a ella.

Jake: es que me da cosa

Yo: por?

Jake: no sé, últimamente la veo muy preocupada y creo que es por lo vuestro. Deberías hablar con ella.

Yo: pero si no me habla ¿cómo quieres que hable con ella?

Jake: hombre, pues lo primero invitándola a tu cumple o llamándola o algo.

Yo: Jake tu no lo entiendes, las cosas han estado muy chungas últimamente.

Jake: ya, Tania me lo contó.

Yo:  ¿Entonces para qué preguntas si ya lo sabes?

Jake: no sé, yo sólo te pregunto si seguís juntas. O sea según tú, ¿seguís juntas?

Yo: No lo sé. Pregúntala a ella.

Justo le mandé la nota con esto último cuando sonó el timbre indicando que el recreo acababa de empezar.

- Oye Yamy, tengo que hablar con el profe de mate sobre el trabajo, ¿me esperas en el banco de siempre? -preguntó Alexia. Asentí.

Me fui primero a la cafetería y allí me compré regalices y bolsas. Luego salí al patio y me senté en el banco al que ella se refería.

Era un banco apartado que estaba rodeado de arbustos y que era difícil de ver.

Estaba yo allí comiendo los regalices, pensando en mis cosas, cuando oí voces.

Al principio no me importó, yo no soy muy cotilla que digamos, pero luego reconocí las voces: eran las de Tania y Jake.

Me levanté del banco y seguí las voces. Estaban cerca del banco, les podía ver desde los arbustos que rodeaban el sitio en el que  estaba.

Me arrodillé para que no me vieran, y escuché.

-Jake, ya te dije en su día que no quiero nada más que amistad contigo - dijo Tania.

-Ya pero...joder, dijiste que necesitabas tiempo y que sí que tenía oportunidades. Por favor Tania, dame una oportunidad. -

Ella suspiró.

- Jake en estos momentos no estoy en situación de salir contigo ya lo sabes -. Él la miró con sorpresa.

-¡Pero si ya no estás con Yamy! - ella miró a otro lado y cerró los ojos. Siempre les cerraba así de fuerte cuando intentaba resistirse a llorar,  yo lo sabía bien.

- A-aún así - dijo con la voz temblorosa.

- Jake, al decirte que tenías oportunidades sólo te lo dije para que me dieras tiempo. Pero lo siento Jake, no me gustas. Lo siento. - él miró a otro lado.

- Pero Tania, ¿por qué me rechazas si ella ni siquiera te habla?- ella suspiró.

Iba a decir algo justo cuando sonó la sirena anunciando que el recreo había terminado.

- Vamos a clase, anda- dijo suspirando. Él no dijo nada y los dos se fueron. Yo me quede ahí un poco más, pensando en lo que acababa de pasar.

La verdad, no sabía qué pensar. "Me estoy liando" pensé. "¡¡¡¡¿¿¿ME AMA O NO ME AMA????!!!!"