Mudanzas y juegos

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Todo comenzó cuando nos mudamos de vecindario, quién diría que todos mis problemas empezarían aquí.
Mis padres se mudaban muchísimo, vivíamos de alquiler en alquiler, hasta que por fin encontramos un buen vecindario y una buena casa.
Sólo tenía 5 años cuando nos mudamos aquí.
Recuerdo muy bien el día que hicimos la mudanza, sentí que un pequeño niño me observaba, mamá dijo; mirá tenemos un pequeño niño de vecino cómo tú, seguro serán buenos amigos.
Cuando lo miré sentí que me hubieran destrozado  mi corazón y el tiempo se detuvo, todo lo que decía mamá pareciera en camara lenta, la verdad es que en ese momento no comprendí que era el significado del sentimiento, pero con el tiempo lo entendí.
Mamá pregunto al niño como era su nombre, con ojitos de gatitos y muy tímido dijo; me llamo Theo señora, mamá dijo ¡Hola Theo seremos vecinos! Con un tono de felicidad, Theo abrió sus ojos sorprendido, sonrió y se escondió detrás de un pequeño muro que nos separaba, mamá dijo, es buen niño, sólo muy tímido. Quien diría que es su peor defecto.
La verdad es que nunca fuimos amigos, y menos cuando mamá se enteró que su madre se prostituía, tampoco me dejó acercarme mucho a él. Intenté jugar o hablar pero jamás quiso.
El único medio de tener una relación con Theo era un amigo en común su nombre era Timoteo de cariño lo llamaba Timo, cuando mamá no estaba y  la niñera cuidaba de ambos, Timo, Llamaba a Theo y jugamos los 3, pero Theo no hablaba conmigo y hablaba poco con Timo.
Era demasiado feliz, en esos momentos, pero pensaba que algo estaba muy mal en mí para que no quiera jugar conmigo.
Disfrutábamos esos momentos en las tardes, con todos los juguetes dispersos en mi patio, cuando Lili nuestra niñera, nos llamaba tomábamos la merienda que con tanto cariño nos preparaba, Chocolatada con anillos de azúcar con sabor a coco es una galleta típica de aquí.
Observaba que Theo tomaba su taza de chocolate muy rápido,comía muchas galletitas con desesperación, Lili decía; tranquilo Theo, come despacio no estamos jugando carreras, Theo con la boca llena sonreía y mastica  un poco más lento. 
Timo llenaba su boca de galletas y hacia caras graciosas y los dos reíamos, pasábamos un hermoso momento, hasta que Theo debía irse y mamá llegaba.
Lili se encargaba de que mamá no se diera cuenta que Theo venía a casa, porque sabía que no le agradaba su madre. Lili era de un corazón enorme y obvio que no era fácil al principio convencerla pero Theo con su timidez y respeto se ganó su corazón, Lili también notaba cosas que yo nunca las noté  la convenció y ganó su corazón. Theo ganaba los corazones de las personas sin decir mucho, ese era su don.
Ganó mi corazón cuando tenía 5 años, ahora tengo 21 años y todavía le pertenece.

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⏰ Última actualización: Sep 02, 2021 ⏰

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