Niñato - JOERICK

1 - ¿Nueva vida?

La vida es monótona para muchos, sin darnos cuenta hacemos la misma rutina de siempre. Y aunque nos demos cuenta, no hacemos nada por cambiar aquello.

¿Por qué? Hay varias respuestas, algunos piensan que es por comodidad, otros que es normal como ir al baño cuando quieres hacer tus necesidades. Y luego están lo que creen que es por miedo. Miedo a enfrentarte a algo nuevo que no sabrás como manejar.

Estoy de acuerdo con las tres, de todo ello, hay un poco.
Pero a mí, Erick Colón, me gusta salir de lo habitual de vez en cuando. Por eso hoy, 10 de enero del 2022, acabo de dejar mi vida en mi lugar natal, en mi pequeño pueblo que no supera los 2000 habitantes, donde he vivido mis 25 años que tengo de vida.
Amo el pueblo, amo a su gente y la vida cómoda que llevo que se lo debo a mi querido abuelo, que lo que nunca le ha faltado es el dinero, por lo cual no me falta nada. Tengo una cantidad muy grande en el banco, por todo el dinero que siempre me pone en éste.

Mi padre no era millonario, tenía lo suyo de igual forma por mi abuelo. Pero él siempre quiso quedarse en nuestro pueblo y aquí hacer su plata, pero lo normal, un sueldo común y corriente. Nunca quiso más, decía que no lo necesitaba ya que con su esposa e hijo estaba más que bien.

Él pueblo tiene lo suyo, no es difícil salir de adelante pero tampoco es fácil. El supermercado es pequeño, hay varias fábricas, las mismas tres tiendas de ropa conocidas y las mismas casas con pequeños nuevos habitantes; hijos que han nacido de los viejos habitantes.
Como todos aquí, la mayoría, estudian para trabajar en las fábricas o tienda. Pero en todo lugar está la excepción, la cual aquí, soy yo.
Me fui unos años, varios, al pueblo vecino el cual es un poco bastante mejor que en el que vivo. Ahí forme mi estudio, con mejores recursos, para empresario.

Hace varios años que venía sintiendo mi vida muy monótona. Mi sueño de pequeño era ser dueño de alguna de las mejores fábricas, y formar una pequeña familia.

Era mi sueño,como bien he dicho, ahora las cosas han cambiado por varias razones.

Primero, que es lo que no me permite formar una familia aquí son los pocos recursos que hay, (aunque al día de hoy, ya formar una familia no quiero), pero al ser yo una persona que me van los hombres. Así es, soy gay, éste pueblo no tiene nada contra ello, pero no hay chicos que sean como yo, o no tan abiertos. Y mira que he buscado. ¿Tan difícil es que alguien sea gay, aquí? Suena mal, tal vez, pero es que es así. Hay mayoría de chicas, y los pequeños hombres que se encuentran son, muy pequeños, muy grandes o casados.

Hasta que di con Federik, del pueblo vecino. Dos años juntos, casi tres, en los que creí que había encontrado el chico de mis sueños. ¿Existe eso? ¿Qué es el chico de tus sueños? En pocas palabras, me quiso robar una gran suma de dinero, y cuando digo gran, es porque así es. Con ella se podía alimentar unas ¿cuatro familias? La típica, los padres, y dos hijos, toda la vida, sin necesitar más.
Eso no es lo peor, no, eso ni me dolió. Hubo otras cosas, que fueron las que me rompieron, pero será otro día que hablemos de ello.

Maldito Federik.

A lo que iba al principio, es que estoy abandonando mi pueblo, que es una de deshorna para los habitantes de aquí. Para finalmente, luego de años de insistencia por parte del abuelo José Colón, estoy por mudarme a New York. Una ciudad muy concurrida, muy conocida, y totalmente distinta a lo que es mi pueblo.

–Joven Colón, tiene dos casas para elegir, o también dos departamentos.

–No le entiendo. ¿Dónde estoy? –pregunto confundido.

Ya me encuentro en New York, ahora mismo estoy bajando de la limusina, la cual fue a recogerme al aeropuerto por pedido de mi abuelo.

–Ésta es una de las casas que puedes elegir para vivir, su abuelo, el señor Colón nos ha pedido que le llevemos por los cuatro lugares nombrados anteriormente. Ha dicho que, cualquiera que te guste, será para ti. –comenta.