My Little Pony: La Leyenda de Green.

Capítulo 4

Celestia: ¿Qué es lo que quieres hablar conmigo? -pregunto parada frente a mi-.

Green: Quiero saber porque me defendiste en la junta con los nobles ¿Qué razón tenias para hacerlo? -dije serio yendo directo al punto-.

Celestia: ¿Acaso debería haber razones para defender a mi hermano menor? -pregunto-.

Green: No soy tu hermano... -dije molesto-.

Celestia: ¿Que? -dijo incrédula-.

Green: ¿Por que te sorprendes? Tu misma lo dijiste fuerte y claro, no eres mi maldita hermana, te oponías rotundamente a que formara parte de la familia real, después de todo, solo soy un huérfano al que nadie quería -hable con molestia, cada palabra que salía de mi boca la dejaba aun mas en shock-.

Celestia: Demian ¿A-Acaso tu...? -pregunto nerviosa-.

Green: Si Celestia, escuche lo que dijiste, cada maldita palabra salida de tu boca, apuñalando mi corazón una tras otra -dije molesto- Así que responde, tenias la oportunidad perfecta para despojarme de mi corona ¿Por que me defendiste?

Celestia: D-Demian, yo... yo puedo explicarlo ese día yo... -la interrumpí antes de que acabara-.

Green: Ahórrate tus explicaciones Celestia, no quiero escuchar excusas tontas salidas de tu boca, si no son respuestas a mi pregunta, no me interesa nada proveniente de ti -dije viéndola a los ojos- Solo responde la pregunta, luego puedes irte.

Celestia: Escucha, se que estas molesto, se que dije cosas que probablemente te lastimaron, pero quiero que sepas que de verdad lo lamento, lamento todo lo que dije, lamento haberte lastimado, es que... estaba celosa -dijo con la voz temblorosa, como si fuera a quebrarse en cualquier momento- sentía celos por tu talento con la magia, sentía celos porque desde que llegaste Luna se olvidó completamente de mí, me molestaba como cada día te acercabas a mi y me llamabas hermana, sentía que no te lo merecías al quitarme a la mía, pero un día simplemente dejaste de venir, ya no insistías en jugar conmigo, ya no me llamabas hermana o "Tia". Al principio lo tome como algo bueno, creí que finalmente te habías rendido, pero con el tiempo comencé a sentirme vacía, sentía que algo me faltaba y no sabia lo que era, y cuando comenzaste a lanzarme esas miradas frías e indiferentes, me di cuenta que lo que me faltaba eras tú, tu alegría a mi alrededor, tu sonrisa al pedirme que jugara contigo y tus miradas de asombro cada vez que me veías levantar el sol, no sabia porqué te habías alejado, no creí que me hubieras escuchado, solo creí que te habías molestado conmigo por ignorarte, por eso te defendí contra Zilverpip, creí que si notabas que comenzaba a tratarte mejor e intentaba acercarme a ti, volverías a querer pasar tiempo conmigo y esta vez si podríamos jugar juntos, yo de verdad lo siento, lo siento mucho.

Finalmente se rompió, Celestia estaba llorando frente a mi, de rodillas en el suelo, suplicando que la perdonara.

Una traicionera lágrima bajo por mi mejilla, pero mi mirada de seriedad no cambio, quería calmarla, abrazarla y decirle que todo estaba perdonado, pero los recuerdos de sus palabras hacían que el resentimiento surgiera y me impidiera hablarle con cariño.

Green: Celestia... -ella solo levanto la mirada para verme- seré honesto contigo, no te perdono por lo que dijiste y tal vez nunca lo haga, lo que hiciste fue realmente estúpido y acabo con todo el cariño que te tenía, no te odio, pero no me importan tus disculpas, ya que como dije, no me importa nada proveniente de ti -dije de manera seca-.

Celestia: Y-Yo lo entiendo -dijo secándose las lagrimas- solo quiero que sepas, que de verdad estoy muy arrepentida de todo lo que dije ese día.