Jealousy ┈━ Spreen [EDITANDO]

1

Me desperté con una migraña que no me permitía visualizar en donde estaba exactamente. Mi cuerpo y demás estaba entumecido causando más dificultad para levantarme, ¿Dónde mierda estoy? ¿No estaba en mi habitación hace unas horas? ¿Qué me pasó?

En el estúpido e inútil intento de levantarme para reincorporarme pude observar a la distancia como un chico venía hacia mi con una cara de preocupación mientras gritaba un nombre ¿Será el mio? Junto a él venian varios policías. Debe haber pasado algo grave.

. . .

Volví a despertarme aunque esta vez tardé un poco más en abrir los ojos a causa de la luz proviniente de una ventana a mi izquierda. Me acostumbré a la iluminación y me detuve a observar todo mi entorno. Paredes blancas, aparatos médicos, una intravenosa. Era una sala de hospital.

Confundida traté de recordar mi ultima acción o que fue lo que hice para llegar a este punto. Cerré los ojos con fuerza y fruncí las cejas mientras hacía el esfuerzo de rebuscar en las memorias que en este momento me estaban fallando hasta que un sonido me interrumpió. Alguien habia llegado.

- Veamos...

La enfermera que unicamente venia por el chequeo se quedó estática al mirar que estaba despierta. Inmediatamente se regresó a toda prisa y al cabo de unos segundos llegó un médico.

- Buenos días, Señorita Mia. ¿Cómo se encuentra? ¿Le duele algo?

Mientras me revisaba traté de organizar mis ideas. Estaba en un hospital pero no sabía que había pasado.

- ¿Señorita Mia?

Oh.

- Disculpe, debe haber alguna confusión. - Dije. - Yo no me llamo Mia.

Aclaré. El médico me miró sin ningún tipo de expresión e hizo señas a la enfermera. Un chico llegó corriendo, se veía agitado mientras saludaba al médico quien parecía darle los últimos detalles.

- Su nombre si es Mia. Mia Smith para ser precisos, así fue registrada.

Esta vez el médico me habló y mi expresión de confusión se hizo más fuerte.

- Debe estar confundida por el golpe y todo el evento traumatico. Le recomiendo descansar, puede hablar con su amigo sin embargo, no se sature de información.

Asentí y el chico igual.

Lo miré detenidamente por unos minutos mientras pensaba de dónde se me hacía conocido. Él no dijo ni una palabra, parece que en su mente trataba de buscar la mejor manera de decirme lo que sucedió.

- Creo que es mejor ver la TV antes de hablar. Acabas de despertar. - Su tono de voz era suave y tembloroso, estaba nervioso. No dije nada más y solo asentí.

Encendió la TV que se encontraba en la habitación mientras cortaba lo que parecía una manzana. ¿Cuando trajo eso?

- Disculpa. Soy alergica a eso.

Dije.

- ¿Sí? Que raro, es tu fruta favorita. - Respondió con un aire de confusión. - No te preocupes, traje otras cosas para que comas.

Regresé mi vista a la TV. Justamente había empezado las noticias.

Me concentré hasta que la primera imagen apareció ocupando toda la pantalla. Era una foto mía en blanco y negro, luego varios edits sacados de twitter con las siglas "R.I.P" ¿Qué?

La voz del chico que hablaba en el fondo se desapareció. Ahora escuchaba la voz de mi madre que estaba siendo entrevistada mientras lloraba, mi padre estaba a su lado también triste.

No pude evitar llorar. ¿Era esto una especie de cámara escondida?

- Es un gran dolor saber que mi hija está muerta.

Muerta.

Yo.

Estoy muerta.

Mi cuerpo empezó a temblar y el llanto se intensificó. El chico pelinegro se levantó inmediatamente y apagó el TV mientras me miraba desconcertado. No sabía que sucedía.

- Estoy muerta... ¡Estoy muerta!

Empecé a gritar sin parar, totalmente histérica mientras me movía sin ningun cuidado. Un abrazo del chico me detuvo de casi caer de la cama. Seguí llorando.

- Tranquila, estás aquí. Estás viva, estás respirando, tienes otra oportunidad. Tranquila.

- Mamá, llama a mi mamá y dile que estoy viva. Eso es falso, ¡Llama y di que es falso! YA. Por favor...

Unas palmadas lograron tranquilizarme. El cuerpo médico llegó mientras él me abrazaba y rápidamente hicieron lo posible para controlar la situación.

- Tranquila. Sabes que cuentas conmigo para todo. Todo va a mejorar.

Su sonrisa tan sincera solo me hizo sentirme más confusa.

- Disculpa pero ¿tú quién eres?