capítulo 13

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Despertar abrazando a la persona que te gusta y que esta te corresponda, pero como no un momento así siempre tiene su triste final. El de este momento fueron unos fuertes golpes en la puerta que hicieron despertar a kat-chan de mal humor.

—Quien mierda toca a esta hora!?— fueron las primeras palabras que salieron de su boca y tristemente para el que se encontraba detrás de la puerta yo no pensaba calmarlo, a decir verdad, a mi también me había enojado que lo despertarán de esa manera.

—Bakugou, bajen a desayunar— la reconocible voz de Shoto se escuchó detrás de la puerta.

—Yo lo mato— kat-chan expresó haciendo una explosión con una de sus palmas.

—Vamos kat-chan, eso se puede dejar para luego—besé su frente esperando que se distraerá y no pensara en las palabras que le dije para que no matará a Shoto, solo lo hacía porque sabía que él solo cumplía órdenes.

—tch— miró hacia otro lado sonrojado.

—vamos, hay que desayunar— me levanté de la cama y agarré la ropa del día anterior, para ponérmela.

Al terminar de vestirme vi que kat-chan seguía en la cama, algo que inevitablemente llamó mi atención.

—no tienes hambre?— me encontraba confundido, bien sabía que al despertar kat-chan tenía un hambre descomunal.

—no es eso... es que...— apartó la mirada mucho más sonrojado que de costumbre (garantizo que esta vez el sonrojo ganaba de paliza al pelo de kirishima), recordando lo que pasó la noche anterior algo me decía que al final si lo había dejado paralítico.

—me inventaré una escusa, ahora vuelvo con nuestro desayuno. ¿Está bien Kat-chan?

—si—tapó su cara con las mantas enrollando se en ellas a modo burrito.

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—Y bakugou?— la voz de momo me sacó de mi trance mental de buscar una buena escusa.

—Se encuentra un poco mareado, no es nada, pero le llevaré el desayuno a la habitación si no es problema.— si le decía un simple "se encuentra mal", la precuparía y me haría llevarlo a un médico. Cacharía* rápido la mentira no era opción.

Cacharía* expresión que  usa para expresar que los pillaría.

—No hay problema, no te preocupes. Si empeora dime y pido a recobery Girl que venga— la voz de momo ahora se escuchaba preocupada, cogió  dos bandejas de un mueble y colocó un desayuno en cada una de ellas.

—No te preocupes momo, así lo haré—En verdad no quería preocuparla...

—Dile a baku-bro que mejore— la resplandeciente sonrisa de kirishima, que destacaba aquellos picudos dientes de tiburón se presentó luego de esas palabras con un pulgar alzado.

—Así lo haré— sonreí a kirishima.

—Bueno dale el desayuno, quizás le falta energía— de esa tiene suficiente.

—Dile que le hice salsa picante especial esclusibamente para el— mina hizo aparición poniendo una salsa en la bandeja donde se encontraba el Colacao de bakugou— lo siento, no pude evitar escuchar la combersación y mientras ustedes hablaban... Como se que le gusta...

—Da igual mina, es todo un detalle— sonreí y cogí la bandeja— me retiro, Itadakimasu

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— Te tardaste— un bakugou sentado sobre sus 5 almohadas más cómodas me esperaba en la habitación con un lindo puchero en sus labios.

—Me distrajeron con frases para que te recuperarás de tu "mareo repentino"— hice comillas con los dedos para que entendiese que esa fue la escusa que puse.

—que escusa más sosa— no es que tuviera mucho tiempo para pensar y aparte heredar un análisis de nerd de el izuku real me hizo pensar en que la escusa en la que estaba un unicornio de promedio no volaría y tendría que confesar ante los métodos de mina.

—Gracias a ella mina te hizo esto— le extendí su bandeja del desayuno— aunque lo veo muy cargado para un desayuno— señalé aquella salsa que me dió ella tiempo después.

—no para mi— sonrió con malicia viendo aquella salsa.

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—ahhhhh estoy lleno— dejé la bandeja a un lado para tirarme hacia atrás en la cama. Con mis pies aún cruzados, pero, mi espalda haciendo contacto con el colchón de la cama todavía desecha.

Sentí el cuerpo de bakugou caer a mi lado.

—ah— se quejó obviamente por aquello que no lo dejó ir a desayunar abajo y tener un domingo normal; el movimiento había sido lo suficienteme brusco como para hacerle daño.

—Lo siento— me jiré hacia donde se encontraba. Quizás había sido un poco rudo de más.

—No te disculpes Deku baka— apartó la mirada para tapar su sonrojo inútilmente.

Me acerqué a su mejilla y le di un beso, uno que no venía a cuento, pero me apeteció sentía que en nada me dormiría así que sería como un beso de buenas noches sin ser de noche.

—A que vino eso?— su voz sonó su "cabreada" yo solo reí para cerrar los ojos, su comportamiento se me hacía extrañamente adorable.

¿YO? ¿COMO IZUKU MIDORIYA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora