♡ xv.

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Jaehyun y Doyoung se habían ido a la biblioteca luego de comer, planeaban leer un poco. Se habían colocado en el sitio más solitario.

Doyoung no dejaba de besarle el brazo y la mano, por lo que el menor le tuvo que detener con un breve regaño, quería concentrarse.

Y hubiese sido fácil hacerlo, de no ser por la repentina mano que se deslizó por su muslo hacia su entrepierna lentamente.

Jaehyun volteó el rostro, viendo a Doyoung con la mirada fija en sus textos.

Negó suavemente mientras mordía su labio, retirando la mano, haciendo que el contrario se quejase con un puchero.

Soltó un suspiro.

—¿Vamos al baño? —preguntó el menor, sus mejillas se sonrojaron. No podían tocarse ahí en la biblioteca donde cualquiera los vería.

Doyoung le sonrió y se colocó de inmediato de pie, saliendo como un rayo.

Jaehyun maldijo mientras ordenaba un poco las cosas, y tomó ambos celulares para salir también. No creía que se robaran unos lápices y unos textos aburridos.

Entró al baño y al notar que sólo un cubículo estaba ocupado, cerró la puerta principal. Caminó hacia el lugar ocupado, para ver la puerta abierta y a Doyoung sentado de piernas abiertas sobre la taza. Tenía el cierre abajo y su polla afuera, le sonreía.

—¿Qué pasa si alguien más hubiese entrado? —murmuró Jaehyun mientras cerraba la puerta tras de él, tragando.

—Se habría llevado un espectáculo. —respondió con una risa, introduciendo un dedo dentro del pantalón de Jaehyun para tirar de él más cerca. —Me muero por probarte.

Jaehyun de nuevo estaba perdido, ¿realmente era el mismo Doyoung de hace unos minutos?

Las manos acariciando su entrepierna le sacaron de sus pensamientos.

—Vas a tener que permanecer callado, por si alguien entra. —le susurró el mayor, alzando su camiseta para lamer bajo su ombligo nuevamente, le encantaba ese lugar.

Jaehyun le peinó el cabello, intentando colocarlo tras su oreja. Estaba nervioso, ¿podrían meterse en problemas si alguien los descubría? Doyoung parecía relajado.

El mayor le bajó el pantalón, y se inclinó para comenzar a lamerle sobre la ropa interior. Jaehyun se mordió el labio para evitar soltar muchos ruidos.

Doyoung continuó lamiendo y chupeteando hasta que una gran marca húmeda se formó en su ropa interior, y hasta que estuvo completamente duro, claro. Entonces la bajó también.

Doyoung era muy bueno, en todos los sentidos. También era muy habilidoso, en todos los sentidos.

Dios, ¿había algo que ese chico no hiciera bien?

—Amor... —susurró por lo bajo.

Doyoung usaba su boca tan bien, no podía pensar en nada concreto. Sólo en lo bien que Doyoung podía tragarle.

El mayor le animó a que penetrara su boca luego de varios minutos, y Jaehyun lo hizo sin ser muy brusco, pero Doyoung parecía aguantar tan bien que no pudo evitar comenzar a moverse cada vez más rápido.

Cuando sintió ese cosquilleo en su estómago, comenzó a moverse un poco más rápido, pero Doyoung le obligó a quedarse quieto, y succionó su glande con fuerza, haciendo que se corriera de todos modos.

Doyoung se veía increíblemente feliz tragando. Le limpió con su lengua después de eso.

Jaehyun estaba intentando controlar su respiración mientras Doyoung le subía los
pantalones. Se sentía incómoda la ropa húmeda, pero lo aguantaría.

—Sabes tan bien, tal como imaginaba. —sonrió Doyoung, alzando una mano para colocarla en su hombro, y lo empujó, obligándolo a inclinarse, hasta que quedó de rodillas frente a él, entre las piernas abiertas del mayor.— Mi turno, sé un buen chico.

anime boy » jaedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora