Future plans - Proposal

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Las mañanas iniciaban a las cinco de la madrugada, con piernas enredadas, bostezos en forma de suspiros, sonrisas con un ojo abierto, y besos ajenos.

— Buenos días, Shō

Murmuró sobre los labios del más bajo. A Kageyama le encantaba despertar de esa manera, contemplando la maraña de cabello anaranjado de su novio bajo su mentón.

Desde que habían pasado la primera noche juntos, siendo amigos e incluso durmiendo en camas separadas; de allí en adelante siempre soñó con algún día estar bajo las mismas tapas con Hinata.

En ese entonces no era consciente de sus sentimientos, prefería conformarse de que la comodidad y calidez que le otorgaba su nuevo compañero de equipo, era netamente por su personalidad y forma de ser, permitiendo que fuesen buenos amigos.

Más adelante descubrió que los nervios que aparecían no eran por estar en una casa desconocida con un chico de otro salón, sino porque su corazón estaba sin permiso anudando un hilo rojo hacia el otro jugador.

— Buenos días, Tobio

La sonrisa resplandeciente que le dedicaba, podía competir fácilmente con el sol de la mañana, el mismo que se colaba a través de la persiana, indicándole que el amanecer estaba llegando y debían levantarse si querían iniciar a tiempo su día.

Unos besos y risas más, se obligaron a salir de la cama, o Kageyama no resistiría más y terminaría atacando por completo a Hinata.

La primera noche que llegaron a su hogar, cayeron derrotados después de mudar todas sus pertenencias, hasta el día siguiente que aprovecharon de ordenar lo que sería actualmente le nido del amor.

Hinata sentía que su relación se volvía mucho más íntima con su novio, era un gran paso si lo viese de cierta manera, considerando que compartir con un compañero de equipo durante toda su adolescencia, es muy distinto a irte a vivir con él en una ciudad nueva.

Lo primero que le propuso a Kageyama fue empezar a llamarse por su nombre cuando estuviesen los dos solos, dándole un toque más privado a lo que es su convivencia diaria.

Aunque el verdadero motivo, era porque a ambos le daba una vergüenza tremenda mencionarse por su nombre de pila delante de más gente, así que servía como práctica, hasta que pudiesen mencionarse naturalmente.

Después de luchar entre ellos por quien tomaba primero la ducha y terminasen bañándose los dos después de una pasional locura, Kageyama se sienta disfrutando como su novio le deleitaba con desayunos novedosos aprendidos en su paso por Latinoamérica.

Hinata contaba entusiasta sus aventuras por Brasil, como tuvo varios compañeros de equipo, hasta que tuvo uno definitivo, y luego presenció la boda con su novia. También de los distintos aprendizajes en vóleibol de playa, como eran los atardeceres y la salida del sol en la mañana, disfrutando del oleaje y la arena blanca.

Kageyama podía estar horas escuchándolo, descubriendo cada día más cosas de su alegre novio.

Aprovechaban al máximo esos instantes, durante el día se separaban sus caminos, uno hacia Osaka y el otro hacia Tokio, dirigiéndose a sus respectivos clubes deportivos.

A veces en la hora de almuerzo se mensajeaban, otras entre prácticas cuando les tocaba estar en la banca se mandaban fotos, incluso sus compañeros de equipo colaboraban en ello, grabando o tonteando cuando Hinata y/o Kageyama estaban en la cancha, inmortalizando el momento y enviándoselo al chico contrario.

En las tardes se reencontraban, yendo de compras y preparando la cena, finalizando en las noches perdiéndose en la cama mientras hacían el amor.

Todo parecía andar tranquilo, incluso si Kageyama no tenía un futuro definido. Era consciente sobre una oferta en el extranjero, solo que todavía no había encontrado el momento de abordar aquello con su pareja.

KageHina Wedding Week 🧡💍💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora