Moving in together - Making it official

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Las luces del parque adornaban su camino de vuelta, todavía quedaban puestos de comida abiertos, al igual que varios juegos.

A medida que avanzaban, el efluente de gente disminuía considerablemente, las farolas eran las que alumbraban ahora el tranquilo sendero. Aprovechaban el hecho de ir solo para tomarse de las manos tímidamente, como lo hacían todas las noches después del entrenamiento.

A pesar que no es la primera vez, Hinata siente sus mejillas arder ante el tacto ajeno, junto a un revoloteo en su interior.

Jamás se imaginó enamorarse de un chico, menos que este fuese el arisco Kageyama. Si pensó alguna vez que en un punto de su vida podría conocer una chica, entablar una buena amistad, enamorarse y ser quizás la mujer con la que comparta toda su vida.

Pero ahí se encontraba de la mano con alguien de su mismo sexo.

No era que estuviese cerrado a esas posibilidades, la verdad es que no había pensando en ello, mas el amor, simplemente le llegó.

No entendía muy bien que tenía el armador, como para captar su atención de manera romántica. La mayoría del tiempo discutían y le golpeaban, los gritos eran frecuentes por cualquier mínimo error dentro de la cancha. Sin embargo, Hinata aprendió a descifrarlo, entendiendo que el más alto simplemente es así en personalidad.

Y sólo con él.

No obstante, de todo eso, Kageyama fue quien siempre creyó en él, incluso desde el partido que tuvieron en secundaria, jamás lo miró en menos, siempre lo tuvo como un igual, aún si había una diferencia abismal en cuanto de habilidades dentro del vóleibol.

El hecho de crear un verdadero compañero, una unión que va mucho más allá de una amistad —como la que tiene con Yachi o Yamaguchi —, permite crear un lazo fraternal bastante más estrecho a comparación de los demás.

Durante el último tiempo, fue el menor quien comenzó a preocuparse más por él, tal vez desde que se reencontraron después del campamento juvenil.

"Tú puedes volar aún más alto."

Una simple frase, sin entender bien el significado detrás de ella, fue tan impactante e importante para Hinata, que quedó tatuado en su corazón.

Solo bastaron seis palabras simples para incentivarlo a volar muchísimo más en la cancha.

Así como Kageyama sintió que el bloqueador central le regaló una nueva corona, Hinata sintió que el más alto le regaló unas nuevas alas.

Era bastante engorroso saber diferenciar la delgada línea entre amor y amistad, una que jamás pensó cruzar.

Los actos sin intenciones del pelinegro lo envolvieron en un abrir y cerrar de ojos. Ya no era que quería volverse un amigo para él, Hinata aspiraba ser mucho más íntimo.

Pero las cosas se salen de control, y ahora el más bajo se encontraba observándolo de soslayo cada vez que Kageyama se cruzaba en su campo de visión, perdiéndose en un océano de posibilidades al ver sus ojos.

La invencibilidad vuelta tangible.

— ¿En qué piensas?

Perdido en sus memorias y explicaciones desconocidas de como terminó enamorado del idiota de su amigo, Hinata no se percató que iba en silencio, más de lo normal.

— En lo increíble que es la vida

Una sonrisa radiante siempre le bastaba a Kageyama, incluso si no entendía a qué se refería el contrario.

Pero estaba de acuerdo con él, porque la vida le permite estar a su lado.

— Oi... — detuvo el paso, sin soltarle la mano — ¿Tienes que irte ahora? Es tarde como para que te vayas a tus montañas

KageHina Wedding Week 🧡💍💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora