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—Regresamos en el tiempo, yo era Sarah fier y-
—¡Y yo Grace Turner! —interrumpió la pelirroja emocionada—Era bonita y rubia.
—Eras tú —le dijo Deena un poco divertida y ella sonrió en grande.
—Por eso.
—Bueno, eran inocentes —continuó Deena conduciendo en auto—Sarah no convierte a las personas en asesinas. ¡No era una bruja!
Josh estaba más confundido que antes.
—Tenemos un 5150 en posesión —sono la radio de auto—del vehículo 961 sospechosos en camino...
—Solomon Goode —solto Deena, y su hermano la miro confundido.
—¿Quién?
—El ancestro de Nick Goode —hablo Elena con una mueca.
—El hizo un pacto con el diablo e incrimino a Sarah —dijo Deena un poco nerviosa.
—¡Deena! —gritaron Josh y Elena asustados, la chica conducía como una loca desesperada.
Deena frenó el auto de inmediato.
—Los Goode no están entregando a toda la gente de Shadyside —dijo Deena mirando a su hermano—Goode le da un nombre al diablo, el mal se apodera de esa persona, luego esa persona mata y asesina, el diablo se alimenta de la sangre de esos muertos y Goode obtiene su deseo, Es Sheriff, su hermano, alcalde. Sunnyvale progresa...
—Y Shadyside no —hablo Josh entendiendo.
—Exacto por eso los Goode hacen esto una y otra vez —le dijo Elena con una mueca mientras apoyaba su brazo en la ventana.
—Si, Siempre hay un Goode que le pasa el mal a la otra generación, Solomon, su hijo, de un primogénito a otro, hasta el dia de hoy, hasta llegar a Nick Goode...
—Y a Sarah...
—Por dios —dijo la pelirroja viendo una llamada en su teléfono—Es mi mamá...
—Luego le contesta —le dijo Deena mirádonla para luego mirar a Josh— ¡La incrimino! es la única que descubrió la verdad.
—Hasta ahora, Deena —dijo Elena un poco culpable por rechaza la llamada su mamá, Amelia.
—Los asesinos querían evitar que lo descubrieramos —dijo Josh mirádonlas.
—Si, para proteger el pacto de Goode —dijo Deena con una mueca.
—Pero chicas...—dijo Josh y las dos le miraron de inmediato—Si ya han venido antes por nosotros.—la pelirroja fruncio el ceño—Ahora que sabemos la verdad que sabemos del pacto, ¿Qué ocurrirá?
—Ay no.
—¡Oigan! mi mamá sigue llamando. —hablo Elena, y los dos hermanos le miraron, está mostró su teléfono. —¿Le contestó?...¿Eso es un si o no?
