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—¡Solomon! —exclamo la morena cuando llegaron a la casa de Goode.
—Sarah —dijo sonriente.
—Grace —hablo la rubia divertida y los dos rieron.
—Es una locura, Sarah —dijo Solomon cuando estaban adentro de su casa, tenia el cerdo en sus manos—Es demasiado, no puedo aceptarlo...
—Solo aceptarlo —le dijo la rubia.
—Consideralo mi dote —dijo Sarah sonriendo.
—Además, están prácticamente casados ¿No oiste? —bromeo Grace divertida.
—En ese caso, dile a tu padre...—miro a Sarah—Que vales mucho más, pero gracias de verdad.
—Por nada —dijo Sarah sonriendo— De vez de cuando, a todos nos acecha la desgracia...
—Mi...Mi hermano quiere que desista, que regrese al asentamiento, dice que los Goode no somos agricultores pero están tierras son fértiles, lo sé —se acercó a Sarah y Grace— Habra buenas cosechas, ya vendrá la dicha...
—Debes descansar —le dijo Grace con una leve mueca mirándolo.
—Si, parece un cadáver —le dijo Sarah divertida.
—Sarah Fier y sus cumplidos —dijo Solomon, y se rieron.
—Bueno, se hará de noche —hablo Grace con una mueca—debemos irnos.
—Hoy habrá luna llena —le dijo Solomon mirando a ambas—nada bueno ocurre en el bosque tras el ocaso.
—Pareces mi padre —dijo Sarah divertida.
—Entonces...—Sarah le miro— ¿Irás? —pregunto Solomon y Grace carraspeo— ¿Irán?
—¿Adónde?
...
—Las bayas te hacen ver un mundo más allá...
—¿Qué hacen una anciana con eso?
—No es una anciana más...
—La viuda tiene mil años —dijo Hannah mirando a Lizzie.
Las cuatros chicas se encontraban en el bosque yendo a la casa de la "viuda".
—Se nutre de la sangre de las vírgenes —dijo Lizzie divertida.
—Tu estás a salvo —dijo Sarah y todos le dieron una sonrisa divertida.
—Sacrificó a su marido para esposar al diablo y obtener vida eterna. —dijo Lizzie mirando a las tres.
—Oír frecuentaba a los indígenas —dijo Sarah mirándolas—incluso se enamoró de uno por éso exilió aprendió su medicina, me contó Solomon, El le llevó a su mujer tras parto fallido, pero ya era tarde...
—¿Estás segura de que es por aquí? —pregunto Grace mirando a Lizzie, le daba miedo el bosque, y más si es de noche.
—¿Como sabes el camino?
Lizzie miro a ambas con una sonrisa.
—Ya he ido, ¿Recuerda el anillo de fuego de Abigail? —dijo divertida.
Las cuatros rieron de inmediato.
—Se rascaba como un perro durante el sermón —dijo Grace divertida a recordar eso.
—Mi madre me dijo que durmió con un demonio —dijo Hannah a las tres— El obsequió del diablo...
—O más bien el loco de Thomas —dijo Sarah con una pequeña mueca.
—Como sea, Abbi me obligó a ir a casa de la viuda —dijo Lizzie sonriente.
—¿Y curó con brujería? —pregunto divertida la rubia y ella le sonrió.
