bubble gum | Bajifuyu

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Chifuyu sintió algo frío en su mejilla.

Abrió los ojos encontrándose con el pelinegro inclinado hacía abajo sosteniéndo una lata de bebida, Baji ladeó su cabeza sonriéndole y mirándolo divertido.

"¿Te dormiste?, no demoré tanto."

Chifuyu lo contempló en silencioso, con un mal sabor en la boca y su estomago tenso. Había tenido un horrible sueño en esa media hora que Baji había ido a buscar los dorayaki, los ojos cansados del pelinegro observándolo y una sonrisa débil junto a sangre saliendo por las comisuras de sus labios.

Y su cuerpo poniéndose frío en sus brazos.

Justo en sus brazos, sin poder hacer nada.

"¿Chifuyu?."Este lo miró preocupado, la mirada que le daba el rubio lo había inquietado.

"Ah, tuve un mal sueño."Comentó Chifuyu rápidamente enderezandose en su lugar, tomando la lata de bebida que le ofrecía y evitando el contacto visual.

Angustiado.

Parecía que aquella imagen estaba grabada en su mente, desgarrando su pecho con un horrible sentimiento de angustia. Baji lo miró curioso más solo se sentó junto a él en la banca de aquel parque; en silencio, solo ofreciendole consuelo con su compañía.

Sí, era todo lo que necesitaba Chifuyu.

luego de unos minutos habló;

"Gracias."El de ojos azules sonrió mirando la lata en sus manos, con ojos tristes."Es extraño que me ponga así por un sueño, es estúpido..."

Baji frunció sus labios en una mueca, mirándo el paisajes frente a él; no gustandole nada las palabras de quién estaba a su lado. No sabía qué podria haber soñado el rubio para opacar su radiante sonrisa, pero definitivamente no iba a perdonar a lo que fuera.

"No lo es."Baji habló con fuerza, cruzándose de brazos determinado."Si te afecta, no es extraño ni estúpido, Chifuyu. Recuerda eso."

Lo corrigió.

Eso había tomado desprevenido al de ojos azules, finalmente lo miró a la cara, haciendo contacto visual en todo ese tiempo allí sentados los dos, observándo la sonrisa que el pelinegro le estaba brindado ahora.

"Que profundo."Sonrió finalmente, con la tranquilidad que el pelinegro le había contagiado.

Cierto.

Baji estaba a su lado, sonriendo enseñando sus característicos colmillos con orgullo, con sus ojos brillando, tez rosada, él está bien; vivo. Chifuyu sintió la angustia desvanecerse para pasar a un completamente calma, suspiró con fuerza como si expulsara toda su preocupación.

"Tengo mis momentos."Baji alardeo con orgullo."Pero si aún te sientes mal puedo tomar tu mano."

Chifuyu soltó una risita.

"Pero ahora me siento completamente bien."Chifuyu se levantó de la banca."Gracias por la generosa oferta."

Baji se quedó allí observándolo ahora más animado, se sintió satisfecho por eso, prefería ver a Chifuyu como el molesto rubio que se le pegaba como chicle todos los días, carismático. Aunque no pudo evitar sentirse ligeramente ofendido de que rechazara su mano, ¿cómo se atrevía?.

"Como quieras, no podrás sostener la mano de Kaisuke Baji todos los días, ¿sabes?."Se levantó llevando su mano libre a su bolsillo."No tienes ese honor, aún."