El camino a la casa de Sam y Emily fue más largo de lo que pensaba. La casa quedaba en medio del bosque, LITERALMENTE. Yo, siendo una persona que tiene miedo y muchísima fobia a los insectos (en especial arañas), fue una experiencia traumática. Más de una vez, casi, por muy poco, me le subía a los dos lobos que iban caminando en sus dos patas como si nada. ¡COMO SI NO HUBIERA UNA ARAÑA MÁS GRANDE QUE MIS MANITAS JUNTAS!. Ay, dios Santo y la virgen purisima, no morí de un infarto porque no podía morir en esta realidad.
Finalmente llegamos, después de caminar entre árboles que para mí, una humana sin sentido de orientación, eran todos iguales. La casa era pequeña, una cabaña de madera con pintura azul desgastada pero con unas bellas flores amarillas plantadas en el pequeño jardín. Jared sonrió al verme tan desorientada, era muy maldito cuando quería.
—Anda, Aby, ¡Los chicos se comerán todo y no me dejarán nada!.—Me apresuró el glotón 1.
No sé en qué momento me quedé parada mirando a la casa, solo me di cuenta cuando mi hermano me tomó de la mano y me llevó a tirones hasta la puerta de la casa. Por dentro era más pequeña que si la veías de afuera. Tenía ese aspecto cálido y lleno de amor, se sentía como en casa. Una mesa pequeña, para seis personas normales, dominaba el espacio del comedor, esta estaba repleta de muchos cuerpos enormes. ¡Santa madre de dios, voy a morir!. Los cuerpos estaban sobre la mesa atacando alguna comida que había sobre la pobre madera con cuatro patas que soportaba el peso de esas bestias.
Escuché unos pequeños pasos que salían de una cocina que estaba conectada al comedor, mi vista se fue para esos lados y la vi allí parada, con su sonrisa enorme y que trasmitía cariño. Las marcas que estaban en su rostro, que estaba en gran parte de su rostro, la hacían ver extrañamente más hermosa. Emily Young estaba a unos pasos míos, la cual fue abrazada de forma muy cariñosa por parte de su lobo, Sam. No creía que ese hombre sonreía tan hermosamente, pero el verlo junto a su impronta era ver otra faceta de él.
Jared soltó mi mano y se lanzó a la mesa con los demás, olvidando que su hermanita estaba parada en el umbral de la puerta, tiesa como un muerto. No pensé que entraría en pánico en ese momento, pero no por miedo, si no por primera vez, en vivo y en directo, a la manada Quileute en todo su esplendor. Emily notó mi presencia cuando Sam me miró.
—Ella es la ....—Comenzó a decir Emily, con un brillo en sus ojos que no sabría describir.
—No, no.—Negó Sam casi espantado.
Emily pensó que era una impronta, lo iba a ser, pero no de mi hermano, ¡Emily por favor, confunda pero no ofenda!.
—Es mi hermana, Aby.—Se metió Jared, con la boca llena de pollo.—Aby, ella es Emily, la prometida de Sam.—Me presentó.
Todo bien con Emily, la amo y todo, pero para quienes conocen mi historia "Alpha" con Sam, sabrán entender mi obsesión con Marlene.
Sonreí tímidamente. Me temblaban todos los huesos.
—Mucho gusto en conocerte, Aby.—Dijo Emily, con una sonrisa de disculpa.—Pasa, siéntete como en tu casa.
Casa... Estaba en casa. ¡Ay no saben como tuve que luchar por no llorar ahí!. Pero ese sentimiento de conmoción se fue por el retrete cuando sentí la mirada de más de 9 personas en mí. Me sudaban las manos como la mismísima mierda. Me incomoda que me miren, mucho más cuando me siento sapo de otro poso.
—Hazte a un lado, Brady.—Le ordenó Jared, empujando a un niñato que debía de tener 13 años. Brady Fuller, que pequeño era.—Ven Aby, ven a mi lado y come antes de que desaparezca todo.
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El Beso Del Lobo. | Experiencia en mi RD.
De Todo¿Alguna vez has pensado en estar ahí, con él, a su lado?. ¿Qué darías a cambio por estar con él?. Y con todo el esfuerzo que conlleva el poder estarlo, ¿Valdría la pena la espera y la dedicación por siquiera sentirlo cerca de ti?. Libro que escribo...