Te compartí mis cosas preciadas, te hablé de mis libros y tú hiciste lo mismo, quise regalarte uno pero lo tuyo no eran los libros con historias fantásticas, cursis lo tuyo eran los libros de leyes, a pesar de ello pensé que eras especial, la verdad lo eras para que negarlo? En serio sentí que había encontrado a alguien como yo, con mis mismos desordenes mentales, pero ya sabes lo que paso.
No se, y aun no lo sé, si fue la soledad o la falta de Amor que me abrazaba en esos tiempos fue lo que hiso que comenzaras a meterte en mi piel, que hiso que yo no quisiera estar con nadie mas que no fueras Tú, hasta tus conversaciones sobre Romano I romano II me parecían interesantes, me decias palabras bonitas pero sin esperanzas, me dabas besos vacíos que me llenaban, cuando el se iba nos volvíamos ese secreto que nadie tenía que saber, no eramos nada era un hecho, pero para mi lo eras todo, con el tiempo solo quería que fueras una conmigo.
Pero tú NO ERAS ASÍ. Ahora lo recordabas? Todo se volvió una locura, nos veíamos, nos cruzabamos, no me mirabas, me ignorabas te alejabas, nada Estaba valiendo la pena.
