1: New normal

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Desde que su matrimonio había llegado a su fin, John tenía mucho más tiempo para concentrarse en su papel como miembro de los Thunderbolts.

No estaba herido por su inminente separación ni mucho menos, tanto él como Olivia habían tenido largas conversaciones durante semanas antes de tomar una decisión, y el proceso se había realizado de la forma más pacífica posible. Fue difícil, pero ya era tiempo de seguir adelante.

Si era honesto, esos siete meses los llevaba de maravilla, lo que sea que tuviera con sus obligados compañeros de equipo había mejorado en ciertas partes.

Emil tenía muchas historias que compartir para él y era un buen oyente, Yelena era un agradable contrincante, entrenar a Ava y tratar de ser un amigo consumía parte de su tiempo y, en cualquier caso, Justin le tomaba cual conejillo de indias para su creación de armas y otras cosas que prefería no preguntar.

Y Zemo, John estaba asustado de Zemo.

No, no le tomen a mal, John había superado superficialmente su desagrado al Sokoviano y podían entablar una conversación sin problemas, pero... John estaba confundido y aterrado.

Y es que hay que entender que John es alguien que siente las cosas con mucha fuerza, sus emociones se presentan de manera tan enérgica y abrupta que es complicado entenderlas y manejarlas. John vive con los sentimientos muy al borde, no hay estado intermedio entre uno y otro.

Y en esos meses, John había comenzado a sentir algo, algo que en su mente no estaba para nada bien.

Zemo no se veía interesado en las relaciones en absoluto, aquello le causaba mucha mas vergüenza, ¿Cómo podía él decir que ese tipo tan distante le comenzaba a gustar?

Zemo estaba muy lejos de su liga.











Ava se dio cuenta en muy poco tiempo.

Mientras ambos se entretenían a las afueras del improvisado complejo para el equipo, cerca del Neosho River, la joven fantasma se quedó demasiado callada. John dejó de empujar los pequeños barcos de papel y los retiró del agua, mirándola con curiosidad.

-¿Te pasa algo?- murmuró, antes de ponerse de pie de pie y acercarse a ella -Podemos hacer otra cosa...

-John, ¿Te gusta Zemo?

Cada parte de su cuerpo se tensa mientras se sienta con las piernas cruzadas, tragando saliva con fuerza y torciendo el rostro en una mueca de preocupación.

-Yo... Yo, no creo que...- tartamudeó, con la cabeza gacha, de pronto muy asustado de lo que Ava fuera a decirle -¿De dónde sacas esa idea?

El viento le golpeó el rostro y John quería huir de Cherokee, de pronto todo el estado de Oklahoma se había vuelto pesado, no le gustaba la idea de ser descubierto y menos por la morena. Odiaba esa sensación, la necesidad enfermiza de querer huir.

Ava se acercó un poco más, y John hizo su máximo esfuerzo para quedarse quieto mientras ella le tomaba por el brazo, recostando la cabeza en su hombro -Tus ojos brillan como rayos cuando lo miras, además, en la última misión te pusiste en riesgo para ayudarlo.

-Él era quien traía la memoria con la información que Ross nos pidió, no iba a dejar que un edificio lo aplastara- dijo, en un intento de excusar sus protectoras acciones saltando entre Zemo y la pared con cero blindaje más que su propia piel -Además, los intento proteger a todos, Zemo no es especial.

Ava se río de esto, como una niña caprichosa que no está dispuesta a algo contrario a lo que quiere oír, meciéndose a su lado y torciendo la boca en una mueca engreída -Si, lo es.

John se avergonzó todavía más, de ser posible, al borde de la queja verbal en un ruido aún mas penoso, pero apenas encorvando los hombros hacia adelante tratando de ocultar la cara.

-Hey- murmuró la morena, llamando su atención -John, yo he confiado en ti, creo que puedes confiar en mi, ¿No?

-Mira, yo he estado sintiendo estas cosas y simplemente el tema se acaba ahí, lo que sea que tengo no va a afectar al equipo y no quiero que él lo sepa- dijo, resignado, cubriendo su rostro con la mano libre.

-¿Qué? Vamos, John, no puedes dejarlo ir así por así. Dime lo que pasa, yo te puedo ayudar y...

De pronto, Walker la interrumpió, mirándola con esos ojos destrozados que no recordaban otra cosa que un mar turbulento bajo la ira de los dioses, sin paz, temblando de un lado a otro. Cual océano, sus irises temblaron y el gesto se volvió el de un pesar tenso.

-Escucha, Ava, las cosas son más complicadas que eso, ¿De acuerdo? Cuando yo...- se quedó mudo, antes de tratar de ajustar la posición.

Tanto él como la castaña se separaron y se pusieron uno frente al otro. Starr ya lista para enfrentar las negativas del rubio y este listo para evitarla a ella.

-Cuando tengo estos sentimientos, son demasiado pesados; la ira, la tristeza, van y vienen con demasiada rapidez y se vuelven tan vívidos que logran marearme y no puedo evitar que sea así. Desde que esto por Zemo comenzó he intentado controlarlo, pero si se lo dices y él decide no corresponder... Yo, prefiero tragarme lo que sea que tenga en el corazón antes que ser rechazado.

Ava se miraba tan decepcionada de su respuesta, que suspiró de una manera que a John le recordó a su padre, o a Lemar cuando hacía algo muy malo.

-¿Y eso es todo?- bramó la castaña, con un tono exaltado -Podrías intentarlo, tú mismo me has dicho que si veo la oportunidad de ser feliz que la tome y huya lejos con esa esperanza, y Zemo...

-Zemo no se ve interesado en esto tampoco- le contradijo -Cuando Valentina habla de su novio, cuando Justin menciona las personas con las que durmió, cuando tú hablas de los chicos y chicas que cantan baladas tan románticas, ¿Has visto su expresión? ¿Oyes sus respuestas? Además, te recuerdo que su matrimonio pasado fue con una mujer, con quien tuvo un hijo.

-¿Y qué si no es un romántico? ¿Y qué si tuvo una esposa? ¡Tú también! ¿Por qué importa eso?

-¡Ava, él separó a los Vengadores por una promesa a esa mujer! Yo no podría... Jamás podría pedir un lugar tan importante en su vida, ni creo merecerlo y eso...- John notó que era la tercera vez que se quedaba en silencio ante ella.

Ella entonces pareció darse algo de cuenta, y agachó la cabeza con pena. Al levantar el rostro, John vio sus ojos húmedos, pero no se atrevió a decir nada y, en cambio, sujetó sus manos.

Ella habló, su voz bajita y casi miserable mientras apretaba sus muñecas -No lo entiendo, ¿Por qué te sientes así? Tú me has dicho que todos merecemos algo, ¿Cuándo te volviste tan infeliz?

No recuerda cuándo perdió la felicidad, ¿fue el día en que murió Lemar? ¿Él también murió ese día? ¿O fue, de hecho, su humanidad la que se derrumbó de su cuerpo y ya lo dejó? Tal vez siempre fue así, un vacío que se tambaleaba.

Quizás cuando Mike murió, cuando Kate escapó de casa, cuando su padre se volvió loco por la rabia de perder a sus dos hijos.

Tal vez incluso desde Afganistán, había muerto en batalla hace tanto tiempo, y ahora todo lo que John Walker era no pasaba a un cadáver lamentable. O pudo ser en los tribunales del CRG, o firmando esos papeles de divorcio.

-No importa- le dijo, acariciando con sus dedos con delicadeza -Ya no importa...

𝙊𝙝! 𝙠𝙡𝙖𝙝𝙤𝙢𝙖 ━━ 𝘂𝘀𝗯𝗮𝗿𝗼𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora