Después del escape

9- Otro beso Dannette...

(Ebernette en multimedia).

EBER

Habíamos estacionado las motos alrededor del lago y yo ya me había quitado el suéter, las botas y el vaquero, estaba en bóxer y Dannette siquiera se había quitado las botas, solo tenía la mirada fija en el agua del lago.

El lago se veía pequeño desde fuera pero es enorme, es de agua azul y muy limpia, todas las veces que he venido el agua está fría y fresca, Jay, Nashla, Kiliam, Maicol, Alexandra y yo venimos aquí siempre.

—Si no quieres entrar no te obligaré- Aclaro, está enseguida me repasa con la mirada y abre los ojos como platos, se aclara la garganta.

—Ya dije que entraré- Dice y se quita el crop top por la cabeza, me fijo en su negro sostén.

Ojos locos, no tengo control en ellos, por su culpa Dannette pensará que soy un pervertido o un loco enfermo.

«Es imposible no mirarla, solo mira con la sensualidad que se baja los vaqueros».

Y si.

Miro sus Panties viendo que son rojos como su vaquero el cual se acababa de quitar, no tiene las botas...supongo que se las había quitado.

Estaba en ropa interior en frente de mi pero estaba distraída haciéndose un moño el cual iba por un mal camino, es de senos pequeños pero culo grande y cintura de muñeca, su piel es blanca pero al estar debajo del sol se crea un hermoso contraste.

—¿Estás lista? - cuestiono desesperado y esta tiene cara de enojada porque no logra envolverse la melena roja que me tiene loco.

—Si - la escuchó suspirar para dejar el enojo supongo, esta se acerca y me sonríe.

—Ven, escalaremos ese muro, es un poco alto pero podremos subir para lanzarnos agarrados de esta cuerda- digo- ¿de acuerdo?.

—Si Eber never - dice en tono militar y sonríe.

—¿Sabes nadar?- preguntó curioso, Es mejor prevenir que lamentar.

—Obvio, si no me hubiese opuesto a venir - ríe mostrándome sus hoyuelos y joder si que se ve hermosa, sonrió, esta sonroja y mira lago y veo sus ojos brillar, Dios se ven blancos cuando el sol los ilumina- ¿N-nos metemos o que?.

Joder, se me había olvidado todo.

«Hasta a mi».

¡Oye conciencia!.

«¿Aja?».

¿Dannette tendrá conciencia?.

«Todos tenemos, Concha tu madre JAJAAJA».

¿Idiota sé que todos tenemos pero le hablará así como tú a mi?.

«Seguramente».

—¡Oye semáforo!- Me chilla Dannette frunciendo el ceño.

—¿Y ahora porque semáforo?- preguntó sonriendo.

—Te estuve hablando por minutos y estabas ahí parado como un semáforo pero tú ni de color cambiabas- Ríe a carcajadas, música para mis oídos.

Sonrió al verla roja de tanto reírse y noto que tiene algunas lágrimas.

—Oye terremoto -hablo suavemente.

Se seca las lagrimitas que soltó y suspira para controlarse.

—¿Si?- Pregunta mirándome directamente a los ojos.

Déjame besarte otra vez.

Déjame hacerlo cómo aquel momento, déjame hacerlo porque desde esa vez no te saco de mi puta cabeza, qué cosas digo si no sales de ella desde que te vi en la sala de tu departamento.