La casa.

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Entramos en uno de los barrios ricos de Londres, calles y aceras impecables, casas blancas e inmaculadas con verjas muy altas y espléndidas.

El coche avanzó hasta detenerse en la ultima casa, una mansión con todas las letras, se abrieron las puertas y entramos.

Aparcó el coche en un garaje al lado de otros coches, los que más me llamaron la atención fueron: un Ferrari rojo, un Land rover y un Ranger Rover negros,mi gran pasión. Y un audi blanco tuneado.

A la entrada de la casa nos encontramos con otro guardaespaldas al que Paul había llamado Mark, que nos acompañó dentro de la casa.

Una vez dentro pude ver que era mas grande el interior que el exterior y realmente me encanto, tenia un aire masculino pero si pasarse, y estaba perfectamente decorada.

Mark llamo a los chicos y ellos vinieron corriendo, si que imponía este hombre, y me presentó.

- Chicos, ella es Emma, la chica que se va a quedar con vosotros estas semanas.

- Hola - les saludé con una sonrisa tímida.

-Hola Emma.- dijeron a la vez. Que monos por dioh. Ok Emma controlate que no noten que esta apunto de darte un infarto.

Los chicos se ofrecieron a enseñarme mi habitación y realmente estaba muy bien decorada, se puede decir que era unisex, ni para chico ni para chica, tenia una cama con sábanas blancas, un escritorio con un ordenador y un reproductor de música y unos cuadros de diferentes monumentos y lugares de Londres que no dudaría en visitar.

Cuando terminé de instalarme se ofrecieron a llevarme a comer y a enseñarme un poco los alrededores del barrio.

Llegamos a un italiano que habían reservado los chicos y pedimos, en lo que nos traían la comida me estuvieron preguntando cosas banales para conocernos mejor y le aseguraron que el acogerme en su casa no era cortesía, ni lo hacían obligados, me dijeron que en cuanto se lo mencionaron estuvieron totalmente por la labor y muy encantados.

Después de la comida empezaron a enseñarme el barrio, estaba lleno de tiendas pero desafortunadamente era todo muy caro, los chicos me dijeron que si necesitaba algo se lo pidiese que no tendrían problema en comprarmelo, que les sobraba el dinero y el algo tenían que gastarlo, yo por su puestisimo les dije que no hacia falta, ya que no quería ser una molestia para ellos, claro que esto no se lo dije.

Terminamos mi tour y volvimos a casa, me contaron cosas sobre ellos y se portaron demasiado bien conmigo, solo llevaba un dia con ellos h ya me mimaban.

-Em, ¿te puedo llamar asi? Bueno, que mas da, ya lo he echo- dijo Harry - ¿Porqué me da la sensación de que tu no eres como las demas fans? -Me pregunto con cara de curiosidad.

- Por que probablemente no lo sea. -Respondi sinceramente.

-Explicate -me ordenaron todos a la vez.

- Pues que yo no grité al veros, no he tuiteado ni he colgado nada sobre vosotros, no se, podría haber filtrado vuestra dirección y no lo he hecho, eso quizá me hace diferente- les expliqué.

-Si, a mi también me pareciste diferente desde que te vi por primera vez - me dice Zayn e irremediablemente hace que me sonroje - No se por que pero me parece que vas a cambiar muchas cosas mientras estés aqui.

Los demás le miraban extrañados.

- No me mireis asi, no se si sera cierto, solo digo que lo presiento. - se explicó.

Ya era tarde y me fui a dormir, antes de acostarme los chicos me dijeron que habían quedado con sus novias y que Niall y Harry se quedarían en casa ya que no habían quedado.

Y asi pasé mi primer dia con mis ídolos. Bendito dia en el que se me ocurrió cantar una de sus canciones.

¿Por qué yo? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora