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- ¿Qué hace aquí? - le pregunto mientras lo miro curiosa

- ¿Qué hace usted aquí? - por un momento creo que es una broma, pero después su rostro muestra que espera una respuesta.

- Pues yo vengo acá cada vez que quiero, es mi lugar seguro por así decir. Me gusta todo aquí; la vista, el aire y la tranquilidad.

- Ya. Entonces este es su escape de todo lo de alla dentro.

Inmediatamente mi sonrisa se borra, lo nota y al final se que tiene razón. Es eso.

- Sí - logro contestar e intento no parecer tan apenada como me siento.

- Bueno no puedo imaginar uno mejor. Es este o lo profundo del bosque, solo que allá sería un poco más tardado regresar.

Me doy cuenta de que solo jugaba y una sonrisa vuelve a tomar lugar en mi rostro.

- Exacto - Tomo asiento y el Doctor me hace voltear a verlo aclarandose la garganta - ¿Me puedo sentar? - me pregunta señalando un espacio a mi lado con la cabeza.

- Por favor

Una hermosa sonrisa ilumina su rostro e incluso puedo notar que arrugas le podrían quedar en unos cuantos años. Es imposible no derretirse ante está hermosura, es taan atractivo. Me encantan sus sonrisas, todo en el parece ser perfecto, su cabello, sus ojos color miel y su tonta barba tan bien cuidada, es único. Nunca he visto nada igual.

* Bueno Anne, tampoco es como que hayas visto muchos hombres en tu vida pero si, el es precioso.

Me río ante el último pensamiento y el turna miradas entre su rodilla y mi rostro, no volteo a verlo pero puedo notarlo con el rabillo del ojo.

*Se ve tan bien de traje

Durante unos minutos nos quedamos en silencio, el viendo a un lado y yo al opuesto perp casi hombro a hombro, puedo apostar que el también está pensando en sus cosas, hay silencio pero no es incómodo, es agradable y cómodo, no hace falta hablar para saber que disfrutamos la compañia del otro.

Al final decido hacer como que no esta y seguir con lo planeado. Me inclino con cuidado hacia atrás y estoy completamente acostada, doblo mis piernas y mi espalda no puede estar mas recta. Esto se siente tan bien, que si seguimos sin hablar podría olvidar que él esta aquí y hasta quedarme dormida.

No hace falta voltear pero logro notar como el Doctor Pierre, se pone de pie y se recuesta a mi lado. Volteo la cabeza a la derecha y tan pronto como mi mirada se encuentra con la suya, la regreso a ver el cielo. Por ahora no veo nada, miro pero no observo, ahora tan solo puedo pensar en el. No entiendo cómo es que puede causar esto en mi si apenas lo conocí en la mañana.

***

No se bien cuanto tiempo ha pasado, me quede dormida, ni siquiera se si estoy en el techo con el doctor, o si fue pura imaginación mía. No quiero abrir los ojos y averiguarlo, me duele la garganta y creo que el brazo lo deje arriba por que me duele como nunca.

Siento el aire en la cara, pero no tengo frío, mis hombros sienten una ligera tela sobre ellos y me lleno de toda la vergüenza del mundo.

El calor en mi oreja me dice que no soñé estar en el techo con Anton, su voz, su hermosa y grave voz me obligan a no volverme a quedar dormida y me dice que la hermana ya nos habló para cenar.

-No nos vió pero salió al jardín y te gritó como si hubieses ido al bosque así que tenemos tiempo.

Me levanto de golpe y automáticamente me duele la cabeza, me detengo por un segundo pero me obligó a seguir, toda la vergüenza que me llenaba se convierte en preocupación tan pronto como me incorporo, le doy su saco al Doctor y le agradezco entre dientes, no se si me escucha pero sinceramente no me importa. El cielo esta completamente oscuro y me pregunto como cuanto me dormí. Anton apenas y me puede seguir el paso, recoge sus zapatos y un libro y baja tan pronto como puede.

- Oye tranquila, puedes decir que estabas algo lejos y lo suficientemente cansada como para correr.

- Cuánto tiempo me quede dormida? - le grito mientras evito los últimos escalones y doy un salto tan grande como puedo.

- N-no estoy seguro, tres o cuatro horas - tartamudea mientras me contesta y una pequeña parte de mi se siente culpable por haberlo apresurado tanto.

No tardo en redimirme de mis sentimientos y me alegra no ser yo esta vez la que este nerviosa, sonrío por un momento aunque eso se borra en cuanto me pregunto si habré hablado o hecho alguna posición rara durante mi pequeña gran siesta.

Me doy prisa y creo que voy a lograr llegar a la cena sin que la hermana se enoje, ya en la entrada siento la mano de Anton en mi muñeca y automáticamente detengo mi paso.

Volteo y me pregunto si tiene algo, claramente le falta el aire, pero parece preocupado.

- Anne... después de la cena, - se acerca un poco mas y de nuevo olvida el sentido del espacio personal - después de la cena ¿Podrías ir a mi habitación? te esperaré.


Holii, aquí de parte de su escritora: mil disculpas por tardarme tanto con la cuarta parte. Como unos sabrán, la semana pasada entre a clases y estoy ahogada en tareas, por si no fuera poco, mi teléfono se apagaba de repente y justamente anteayer dio de si. No doy excusas, solo pido que comprendan y pues ojala y con todos los deseos del mundo, les haya gustado esta parte. gracias por leerme y seguir en cada parte a Anne, muchísimas gracias.

Por cierto, esta es mi segunda historia en realidad, para los que leían Cuando todo paso y ahora leen Borroso, muchas muchas gracias por seguirme también en esta historia, no saben cuanto significa para mi. Una disculpa si querían seguir con Cuando todo paso, tuve unos problemas con la aplicación y borro un día de nuestra querida Agatha, no supe como seguir y me frustre, decidí volverla a escribir pero simplemente no podía, espero al terminar Borroso poder seguir con Agatha y a los que no la leían, poder darles las gracias de seguir la historia, en fin. Por ahora no voy a segur con Cuando todo paso, esta pospuesta por así decir y lo lamento mucho.

En cuanto a Borroso, si les gusta la historia, no olviden votar y comentar en todo lo que quieran. Intento ya casi no tener faltas de ortografía, pero si ven alguna y les molesta tanto, no se repriman, a veces solo tenemos que sacarlo. Igual si no escribí bien una oración, acepto todo tipo de comentarios, hay que mejorar entre todos. Y para los que comentan por nuestro queridisimmo Doctor Anton o Anne, no saben cuanto me alegran, me hacen el día y en serio me inspiran a seguir.

Para no aburrirlos (perdón por tanto texto), si les gusta la historia voten por ella, les agradecería muchísimo. Y sobre la portada, fue caridad de una lectora, mil gracias por ello. El simple hecho de que quisieras y te hayas dado el tiempo significa mucho para mi y, si alguien hace book-trailers y les interesa hacer uno de Borroso, no lo duden y escríbanme, con gusto les ayudo.

Sin entretenerlos y molestarlos mas, mil gracias @CamilleBagnale por nuestra nueva portada y pues buenos días, tardes o noches, no se cuando lo lean pero que la pasen bien.

BorrosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora