¿No es así?/Naruhina

03

¿Por qué se sentía así?

Sí hace unos seis meses le hubieran dicho que esto pasaría, probablemente hubiese hecho algo para evitarlo, hubiese hecho algo, porque no soportaba verla con él.

Kiba sin duda era un buen chico, realmente la amaba, pero aún así no podía evitar pensar que su lugar no era junto a él.

¿Por qué?

La misma pregunta una y otra vez, día tras día, noche tras noche.

¿Por qué quería tomar su mano?

¿Por qué deseaba jalarla de la muñeca y correr lejos de todos?

¿Por qué seguía pensando en ella y en un futuro?

Tengo una punzada en el pecho cada que los veía besarse... ¿Ella habría sentido lo mismo con Sakura y con él?

Le dolía pensar en la posibilidad de eso, ella era como un ángel, el más bello de todos, y pensar en que él la haya hecho sufrir... dolía más que nada.

Su corazón duele. Por ella, por Kiba, por Sakura.

Dolía por Sakura, dolía ser consciente de que también la lastimaba, dolía saber que ella se preguntaba por qué no parecía tener deseos de besarla, de tocarla o tan solo mirarla, dolía saber que salía herida porque sus miradas no eran para ella, pero no sabía que a él le dolía mirarla a ella tanto como a Sakura le dolía que lo hiciera.

Dolía por Kiba, porque era un pésimo amigo, porque no podía esperar el momento para que Hinata lo deje, porque llevaba meses imaginando cientos de escenarios junto a su novia y eso estaba mal, tan mal.

Duele por Hinata. Duele tanto, Duele intentar hacer contacto con sus ojos y no encontrarlos porque ella no lo estaba mirando a él, duele oler su cabello cuando esta a unos cuantos metros y no poder acariciarlo, duele tener que ver sus labios y anhelar algo que no sabía que era.
Dolía no estar a su lado, y dolía no saber porqué dolía tanto.

Hoy, ellos cumplían seis meses de novios, habían sido seis horribles meses para él, en donde soñaba con Hinata y despierto para ir a ver a Sakura.

¿Por qué era Hinata a quien deseaba ver?

—Naruto, cielo, ¿estás listo?— La voz de Sakura se hizo presente cuando el no parecía dar indicios de encender el auto siquiera. ¿Estás listo?. No. No estaba listo para seguir viéndolos.

—Claro, vamos— contestó y sin más, Naruto puso en marcha el auto.

—¡Que bueno es verlos a todos!— Kiba mantenía su brazo rodeando la cintura de Hinata, queriendo sostenerla cerca de él. Y ella, parecía tan cómoda, eso dolía. 

—¡Claro que íbamos a venir! Es una fecha especial para dos de nuestros mejores amigos— Ino se lanzó para abrazar a la pareja. Ella estaba siempre con una actitud tan positiva desde que sus queridos amigos anunciaron su relación, para ella, nadie merecía ser feliz tanto como Hinata.

—Y bien, ¿Qué sorpresa será ahora? Según se los aniversarios son algo íntimo la mayoría de veces para las parejas, así que si nos reunimos es porque hay algo que quieren compartir con nosotros, ¿cierto?— La lógica que Sai uso no le agradó en lo más mínimo y su cuerpo comenzó a tensarse al notar la mirada de complicidad que la pareja se daba.

—Siempre tan perceptible Sai, bueno queremos informarles que Hinata y yo decidimos dar el siguiente paso, decidimos vivir juntos— Kiba tomó su mano delicadamente ofreciéndole una mirada de amor que decía cuán feliz estaba por anunciar la situación.

Naruto sentía como el lugar se hacía más pequeño, sofocandolo.

—¡No! ¿En serio? ¡Eso es asombroso Kiba! ¿dónde vivirán?—

—Encontramos un buen departamento hace unas semanas, esta cerca de aquí y a solo media hora de la universidad...—

Las voces se empezaron a volver casi inaudibles, y sus ojos observaban lastimados como ella sonreía mirando a Kiba hablar emocionado de su nueva dirección.

Tenía que salir de ahí. Su cuerpo reaccionó poniéndose de pie más brusco de lo que pensaba, rompiendo a la vez el contacto de Sakura que estaba pegada a su brazo.

Todas las miradas posaron en él, pero él solo podía mirar a Hinata y su mirada confundía, triste y herida.

—Tengo que ir al baño— dijo prácticamente huyendo para poder calmarse.

El contacto del agua helada en su rostro no funcionaba, se sentía enojado, furioso, molesto, confundido, dolido.

Al fin tenía todo lo que siempre quiso. Tenía amigos, tenía una novia, pero no la tenía a ella.

De verdad quería a Sakura... pero él no la amaba...

...¿No era así?