1. Feliz cumpleaños

59 7 0
                                    

*Flashback*

Jiang Cheng se encontraba en su habitación llorando encima de su cama, seguía sin entender lo que acababa de pasar; Su padre trajo a otro niño CARGANDO, le dijo que ahora iba a vivir con ellos y como le tenía miedo a sus perros, se tenía que deshacer de ellos.

¿Sus únicos amigos, sus mejores amigos, sus confidentes y protectores se tenían que ir porque ese niño no podía estar en la misma casa que ellos?

Simplemente no lo entendía... ¿por qué tuvo que traer a otro niño?, ¿acaso no era suficiente para él? o como nunca pudo enorgullecerlo, ¿Lo iba a reemplazar?

Alguien tocó la puerta, rápidamente Jiang Cheng se secó las lágrimas para ir a abrirla. Era ese niño otra vez, al ver su cara no pudo controlarse y evitar culparlo mientras le gritaba; El niño asustado, huyó corriendo de sus amenazas lo más rápido que podía.
Jiang Cheng, al minuto se arrepintió de haber hecho eso.
A pesar de su corta edad, entendía que la culpa no era de ese niño... Sino, suya por no ser suficiente para sus padres.

Se quedó un rato en la puerta esperando que aquel niño temeroso volviera, pero paso el tiempo y empezó a sentir impaciencia y miedo. Fue corriendo con su hermana mayor para contarle todo lo sucedido, seguro ella sabía que hacer.

Su hermana lo calmó y ambos decidieron ir a buscar a ese pequeño niño que apenas habían conocido, después de tiempo buscándolo lo encontraron arriba de un árbol, aferrado a una rama de éste.
Cuando por fin lo convencieron de bajar, Jiang Cheng se disculpo con él y le prometió que desde ese día siempre lo protegería.

Ambos regresaron a la secta y decidieron darse una oportunidad de empezar con el pie derecho. Con suerte, podrían ser muy buenos amigos.

*♡--------varios años después-----------♡*

Jiang Cheng despertó como cualquier otro día, sus ojos seguían cansados debido al insomnio, con la poca energía que tenía se dirigió detrás del biombo de su habitación, para limpiarse y ponerse su túnica. Odiaba las mañanas y tener que vivir otro día más, pero algo que lo hacía sentir fuerza y energía era pensar en sus hermanos, quienes siempre lo apoyaban y lo hacían reír.

Cuando al fin termino de vestirse, fue y se sentó en su tocador para empezar a peinarse con su características trenzas en un moño (chongo).
Mientras se desenredaba el cabello miro al reflejo de su espejo, no le gustaba mirarse en los espejos porque odiaba lo que veía, rápidamente desvío la mirada de su cara a cualquier otro lugar, evitaba de cualquier forma que esos pensamientos que se esforzaba tanto por reprimir, volvieran para arruinarle su, de por sí, no tan buen día.

Su sorpresa fue cuando en el reflejo, sus ojos fueron a parar al calendario revelando que día era, 5 de noviembre.
El día que más odiaba del año, el aniversario de su nacimiento.

Jiang Wanyin siempre, inconscientemente, esperaba que sus padres lo abrazaran o simplemente lo felicitarán con una muestra de cariño en sus cumpleaños. Siempre, año tras año terminaba decepcionado y se odiaba después por sentirse así, aún no había aprendido que eso, sencillamente, no iba a suceder.
Aunque no todo era tan malo, sus hermanos y las personas de yummeng siempre hacían una pequeña celebración en su honor y salían a pasar el tiempo en la ciudad, con la gente de su secta.

El sonido de alguien tocando la puerta lo despertó de esos recuerdos.

-A'cheng, ¿puedo pasar? -preguntó una dulce y suave voz desde afuera.

-Adelante -respondió Jiang Cheng, con una sonrisa en su cara, levantándose del banco de su tocador, sabía perfectamente a quien le pertenecía la voz.

Nuevo AmanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora