T/N es una estudiante de universidad en la facultad de medicina, tiene 20 años y conoce a la toman desde la secundaria. Baji keisuke llamó especialmente su atención desde la primera vez que lo vió, pero un infortunado suceso los separa interrumpien...
No hay marcha atrás, pedirle a Baji que se deje llevar es algo que lamentaré quizás por la mañana, pero en estos momentos mi mente está nublada por el placer que me provoca el solo sentirlo dentro de mi moviéndose lentamente y las ganas que tengo de que me haga suya a su ritmo.
Duda un poco en acelerar el ritmo, mi espalda se arquea un poco pidiendo una sensación más placentera que ésta. Nota que busco una sensación más fuerte así que comienza a embestir fuerte y con rapidez, en vista de que puedo soportarlo acelera aún más el ritmo logrando que salgan sonidos lascivos cada vez más fuertes de entre mis labios. El choque de nuestros cuerpos y el rose de la piel hace cada vez más deliciosa esta sensación.
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Por fin dejó de contenerse, sus embestidas son fuertes y veloces, con sus labios busca los míos y los besa apasionadamente mientras ahoga nuestros gemidos. Se separa de mí dejando besos por toda mi cara, bajando hacia mi cuello chupándolo y mordiendolo haciéndome estremecer, sigue besando suavemente mi cuello y aparta mi cabello para morder mi oreja suavemente y susurrar con su voz ligeramente ronca:
- Te extrañé, princesa- sus palabras aceleran mi corazón mientras que me excitan más por su tono de voz.
Continúa con las fuertes embestidas cuando de pronto siento que me voy a correr, Baji se percata de ello y apresura aún más el ritmo, acerca su boca de nuevo a la mía y ligeros gruñidos salen de su boca. Estoy intentando resistir pero no puedo más:
- Solo resiste un poco, princesa- dice entre jadeos mientras que sus embestidas no dan tregua.
-B-baji es q-que, ahhhhhh, n-no puedo...... más- en ese precioso instante comienza a dar estocadas más profundas logrando que una corriente de placer recorra todo mi sistema nervioso e instintivamente lleve mis brazos a su espalda para arañarla bruscamente.
Él coloca sus manos sobre mi cabeza sin apartar su rostro del mío ni dejar de besarlo y marcarlo con pequeños mordiscos en la mandíbula, cuando de verdad llega ese momento en que ya ninguno de los dos puede aguantar, nos corremos al mismo tiempo mientras nos besamos lentamente.
Logro calmar un poco mi respiración mientras que baji sale de mi y se quita el condón para tirarlo en un pequeño bote en la orilla de la cama. Estoy agotada, me duele la entrepierna que por cierto está escurriendo de todos mis fluidos vaginales, Baji se acuesta a un lado mío y me jala de la cintura de modo que termino entre sus brazos y pegada a su cuerpo: tan cálido, tan bien definido, tan hermoso y yo soy quien tengo la oportunidad de tocarlo y mirarlo así de cerca.
Baji
Ésta noche es espectacular, cada pequeño momento ha sido perfecto y maravilloso, más de lo que imaginé al decir verdad. La tengo entre mis brazos, desnuda e indefensa, tan linda, su piel es tan suave y clara. Su rostro está pegado a mi pecho, subo una de mis manos por su espalda suavemente para acariciarla, ponerla en su cabello y acariciarlo cariñosamente, es tan suave y lacio, largo y oscuro, me es muy fácil pasar los dedos sin molestarla.
