Capítulo#4: El golpe

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Reina-Valera 1960
Proverbios 4:14
No entres por la vereda de los impíos,
Ni vayas por el camino de los malos.

Luego de escuchar ese estruendo sorprendida miré, cuando veo a William tirado en el suelo después de haber recibido un golpe en la mejilla, allí estaba él, Rodrigo, lo había golpeado, su rostro lleno de ira, me quedé parada allí mirando la situación .
Cuando William se levantó, iba directo a golpearlo, pero sin pensarlo me puse en medio y caí al suelo de uno sólo, había recibido el golpe que iba dirigido para Rodrigo en mi mejilla, no lograba escuchar con claridad después de haber recibido aquel golpe, sentía un dolor punzante, corrí a colocar mi mano en mi pómulo, la cual retiré para ponerla a la altura de mis ojos mirando a ver si estaba sangrando pero no veía rastro de sangre en ella, aún así el dolor se me hacía casi insoportable, podía escuchar la voz de William a distancia porque aún estaba aturdida.

—Alan, Alan lo siento no fue mi intención —dijo el con preocupación en su rostro tratando de levantarme.

—¡Suéltala no la toques! Mira lo que has hecho imbécil —dijo Rodrigo apartando las manos de William de mí.
Yo por mi parte no soportaba más, logré ponerme de pie aún un poco mareada pero tenía que ponerle fin a esto.

—Basta no quiero que ninguno de los dos me toque. ¡Déjenme tranquila! —dije desesperada y desconcertada por el dolor en mi rostro.

—Alan por favor sabes que sería incapaz de hacerte daño —dijo William con hombros hundidos, se veía totalmente arrepentido.

—Parecía que la molestabas cuando llegué, así que lo mejor es que te vallas —dijo Rodrigo en tono molesto apretaba sus puños al lado del cuerpo y tensó la mandíbula.

William pensaba responder cuando lo interrumpí de inmediato.

—Basta, William sé que no era tu intención pero ahora no quiero verte por favor vete, no me hagas odiarte —le dije con total seriedad lo cual pudo notar y sin decir una palabra se fue cabizbajo.

—Estás bien Alan ,¿te duele?, nececitas ir a cuerpo de guardia —dijo Rodrigo totalmente preocupado por mí, podía ver en su rostro preocupación .
Mientras me tomaba del brazo intentado hacer contacto visual.

—Suéltame Rodrigo, vete tu también —le dije enfadada por lo que había hecho algo que no soportaba era la violencia, la odiaba, creía que había otra manera de resolver las cosas, no era necesario agarrarse a golpes .

—Alan te acabo de ayudar y me vas a decir que me vaya —dijo el levantado una ceja ,sin entender mi reacción.

—Crees que pedí tu ayuda, no, no la pedí así que no era necesario y menos así, no soporto la violencia y tú sin más llegas y golpeas a un chico que no conoces —le dije muy enfadada, acaso no veía que no me gustó nada lo que había hecho.

—Alan no vi otra manera, solo vi a ese chico tocarte y me hirvió la sangre al verle ponerte las manos encima —dijo enfurecido y a la vez preocupado.

—Pero no Rodrigo, no era esa la manera no lo entiendes —dije intentando hacerle entender lo que sentía.

—Alan de verdad lo siento no vi otra manera eso fue lo que me nació hacer. Perdóname por favor —dijo en tono sublime, lo que me hizo acordar las ganas que tenía de verlo.

—Rodrigo es que no me gusta ver peleas y tú comenzaste una delante de mí —agregué un poco más calmada, intentado relajar el ambiente.

—Alan olvidemos eso, yo vine hablar de otro tema contigo y lo sabes verdad? —dijo acercándose un poco más, atrapándome con su mirada tan penetrante.

Caminando directo al bordeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora