Lissy era astuta, si quería algo lo tenía y en este caso solo deseaba provocar a Max, al firmar se inclinó más de lo necesario haciendo que la falda del vestido se alzará más de lo normal, revelando partes llenas de tinta que no recordaba en ese momento, Max no desperdició la oportunidad levantándose de su silla y observando el panorama que se le ofrecía. Obviamente no perdió el detalle y se sorprendió un poco, pero no dijo nada, ya preguntaría por ello después, ahora su sangre comenzaba a acumularse en otros lugares haciéndolo bajar la guardia.
Después de firmar Lissy entregó el bolígrafo a Max, este se acercó a ella por detrás sorprendiéndola, puede que fuera bastante coqueta y atrevida pero cuando alguien devolvía sus coqueteos quedaba totalmente desarmada. Se puso nerviosa sin más, comenzando a alejarse de a poco, pero no contó con que Max la tomaría por las caderas pegandola a su entrepierna semi erecta.
-No eres tan coqueta ahora o si?- Susurro tras su oreja causándole un escalofrío y que todos los vellos de su cuerpo se erizarán, instintivamente paso su mano por el cuello de Lissy, solo quería molestarla un poco, el era bastante paciente, esperaría hasta que estuviera cómoda, pero su cordura se perdía en el momento en que veía a la chica ser tan descarada con el. Eso lo hizo cuestionar muchas cosas, pero no era el momento para decirlo.
Tomó a la chica por los hombros y la giró bruscamente hasta estar frente a frente. No esperó más y unió sus bocas en un beso demandante, Lissy no podía competir por el control sabía que Max lo tenía y gustosa lo recibió.
El asunto comenzaba a calentarse en buenas proporciones, ambos estaban cómodos con lo que estaba sucediendo, puede que esto sea rápido pero ¿No era acaso lo que ambos querían? Sin más preámbulo Lissy tomó ambas manos y las colocó en su cintura, rozando su trasero con los dedos más largos de Max quien gustoso las hizo descender un poco más, hasta caer de lleno sobre sus glúteos firmes.
Lissy nunca había estado más agradecida de las veces en que su mejor amiga la había obligado a ir con ella al gimnasio. Max apretó ambos lados con fuerza, como queriendo memorizar sus caricias en la mente de Lissy, cosa que estaba funcionando pues un jadeo leve se desprendió de sus labios.
-Aah, espera ¿Estás seguro de esto?- Max retiró sus labios de los ajenos y dio una ligera carcajada -Eso debería preguntarlo yo querida…- Lissy no sabía muy bien qué era lo que podría esperar de él, pero vaya que lo quería, estaba caliente y no iba a desperdiciar la oportunidad de estar con Máx.
-Yo si lo quiero, ¿Y tú? No me digas que ahora te has acobardado y pretendes echarte para atrás- Miro a sus ojos con una sonrisa de superioridad, no esperando que Máx le diera una fuerte nalgada haciéndola gemir. -Conque te va lo Sado eh? Tu y yo nos vamos a entender muy bien. Déjame decirte que una vez que comienzo no puedo detenerme, así que piénsalo 2 veces- Lissy lo tomó de la corbata y camino moviendo la caderas hasta el sofá de la habitación, intentando con todas sus fuerzas el no salir corriendo de la habitación, sus encuentros sexuales no habían sido muchos y fueron con adolescentes imbéciles e igual de inexpertos que ella nada comparados con lo que seguramente Max sabría.
Lo sentó en el sofá y ella sobre sus piernas -Antes de comenzar quiero decirte que no soy experta en esto, solo he estado con chicos de mi edad y no ha sido la mejor experiencia del mundo, puede que lo haga mal, pero si realmente quieres voy a dar lo mejor de mi para que lo disfrutes- Lissy comenzó a restregar sus nalgas en la entrepierna despierta de Max causando que alguno que otro jadeo saliera de su boca -No te preocupes, conmigo aprenderás y podrás disfrutar todo lo que quieras solo déjate llevar y dame el control a mi- con eso unió sus bocas en un apasionado beso moviendo las caderas de Lissy de atrás hacia adelante y en círculos a un ritmo más rápido. Pronto descendió hacía su cuello dejando leves mordidas y succiones hasta bajar al comienzo de los botones en su vestido, los abrió rápidamente con una mano y siguió bajando, beso tras beso arrancó por fin el vestido del pequeño cuerpo en su regazo admirandolos, contemplando el conjunto a juego de color azul que traía puesto. -Has planeado llevarme a la cama como sea verdad linda- Lissy sonrió -Te gusta? Lo elegí para ti, no soy lo que crees guapo- No se quedó atrás, por fin desabrochó el saco y la camisa retirándola de su lugar y lanzándola a un lado, igualmente desabrochando el cinturón y el único botón en aquel pantalón de vestir. -Me encanta la lencería linda, este color queda muy bien en ti, pero creo que te verías mejor sin él, ¿No lo crees?-
Max introdujo sus dedos a los labios semi abiertos de Lissy para lubricarlos, ella los chupo lo mejor que pudo, dejando un rastro de saliva bajar por su boca. Una vez los sintió bien lubricados movió a un lado las pequeñas bragas de encaje azul e introdujo un dedo, podía sentir la lubricación natural de Lissy entre sus pliegues por lo que sus otros dedos masajeaba la zona acompañando al que estaba dentro de ella.
Lissy ya no sabía qué sentir, si los dedos en su interior, los besos y mordidas en su clavícula o el duro miembro aún cautivo entre las capas de tela que friccionaban intentando salir a su encuentro.
-Maas, por favor- Max adentro otros dos dedos dentro de ella haciendo movimientos lentos y tortuosos haciéndole morder sus labios con fuerza, no le gustaba para nada que la tocaran de esa forma pero con él vaya que le estaba gustando. -Te sientes tan húmeda y es por mi linda, recuérdalo- Max deslizó una mano hasta las de Lissy posicionándose en su miembro despierto, invitándole a tocar. Comenzó a subir y bajar sus manos hasta que se animó a ir más allá y liberarlo de la ropa interior, no podía más con los dedos dentro de ella pero ver ese pedazo de carne erecto palpitando en ambas palmas la calentó mucho más. -Es- grande, no cr-creo que quepa todo dentro de mí- trataba de hablar lo mejor que fuera pero estaba cerca de su liberación, lo podía sentir y al parecer Max también puesto que comenzó a mover más rápido sus dedos en su interior, incluso jugando con su sensible clítoris haciéndola cerrar sus ojos con fuerza -Bas-Basta detente, voy a…- no pudo terminar su frase porque el orgasmo la atacó sin previo aviso haciéndola gemir fuertemente en el oído contrario mojando la mano dentro de ella. Su respiración era un poco descontrolada, se sentía un poco sudada, intentaba hablar pero sus sentidos no responden como ella quería.
-Eso fue… ¿Qué fue eso? No tengo idea de que haya sido pero me encantó- Abrió los ojos encontrando los oscuros de Max observando de manera lasciva su cuerpo, pero con cierto toque de duda en ellos.
-¿Nunca habías tenido un orgasmo?- Lissy se sonrojo al escuchar eso, ¿Alguna vez lo había tenido? La verdad era que no, pero no sé lo diría, no arruinaría el momento por lo que sin más se bajó de las piernas de Max, tomó el miembro aún erecto entre sus manos y comenzó a lamerlo.Ahora sí amigxs míos, se viene lo bueno en esta historia.
Quiero pedir disculpar por quién espero el maratón o una actualización más rápida pero yo siempre escribo primero en una hoja de papel y luego lo transcribo, por cualquier error o nuevas ideas pero la lluvia me tomo por sorpresa un día y se mojaron todos mis papeles haciéndome perder gran parte de lo que ya tenía escrito :(Ahora estoy tratando de descifrar el papel mojado, y pues muy fácil no es jajaja mucho menos si como yo escribes con colores super claros o con brillitos, además ingresé a la universidad ya se imaginarán que no había tenido tiempo.
De todos modos estaré publicando lo más rápido que pueda se los prometo. Muchas gracias por darle la oportunidad a esta historia, que tengan un lindo día, tarde, noche, madrugada, etc.💖✨
ESTÁS LEYENDO
MY SUGAR DADY
RomanceUna joven conoce a alguien por una página de citas, un hombre bastante mayor, todo comienza como un pequeño juego pero cuando se conocen todo comienza a volverse un caos total, no existen prejuicios ni preocupaciones pero cuando comienzan a enamorar...