Sk8 [KND +17]

Cap. 1 Pequeño Problema

Un grupo de chicos se encontraba en la "sala" de la que habían autodenominado su guarida. La casa del árbol, era un lugar especial para los skaters, pues al ser un lugar semi-abandonado, dicho grupo de chicos lo había convertido en un lugar al cual podían llamar su segundo hogar, utilizando varios de los escombros para fabricar rampas y obstáculos en los cuales podían practicar sus maniobras sin tener a latosos adultos merodeando donde no los llamaban. Un lugar simplemente perfecto para jóvenes apasionados por el skateboarding, ya que, de ser codiciado entre los skaters el lugar les pertenecía a los chicos del barrio, uno de los mejores grupos de skaters de todo Cleveland pero que con el paso del tiempo su nombre sonaba en todas partes gracias a su increíble destreza y atractivos portes. Básicamente quien no sabía de ellos no era alguien en redes sociales.

Eran un grupo donde se encontraba solo lo mejor de lo mejor convirtiendo lo en un grupo bastante selecto de individuos y si no sabias de ellos básicamente tu vida social era prácticamente inexistente.

Dichos individuos, actualmente, se encontraban sentados en sofás o simplemente ocupaban asiento en el suelo, todos con una cara fastidiada pues si eran honestos preferían estar haciendo cualquier otra cosa que estar presentes en la misma charla que ya habían tenido hace semanas y que aún parecían no poder quitarse de encima.

-Bien, sé que todos están cansados de este tema pero es algo que tenemos que hablar y se me facilitaría bastante si ustedes cooperarán conmigo- comenzó el único individuo de pie frente a todos, le daba la espalda a una gran pantalla plana -Con la reciente salida de Pattie de los chicos del barrio, nos quedamos con una vacante para el puesto como cara femenina del grupo-

Finalizó su explicación el actual líder de los chicos del barrio. Nigel Uno, un joven apuesto de grisácea mirada oculta tras un par de anteojos, su cabellera rapada, pues así lo prefería él, y de una misteriosa personalidad. Nacido en una familia inglesa él había crecido con buenos modales y gran caballerosidad cuando se trataba de las señoritas, aunque no compartía la galanteria de sus compañeros si había tenido un par de novias en el pasado aunque era raro que alguien le llamara la atención. Un líder nato o al menos eso era lo que siempre le decían procuraba el bien de su equipo y además de heredar el título debido a su agilidad y destreza en su board pero no todo venía siempre en rosa pues por lo mismo sus amigos lo miraban en ocasiones como alguien demasiado recto e inflexible.

-Nigel creí que ya habíamos acordado que esto no nos interesa, solo pon a cualquier niñita tonta que encuentres y ya está- suspiro con cansancio uno de los mayores.

Chad Dickson, un chico rubio de ojos azules y personalidad difícil. El chico solo le brindaba su confianza a ciertas personas y con eso bastaba, procuraba no sobresalir mucho debido al trauma que sus padres le habían generado al crecer poniendo altas expectativas sobre él, en el skate había encontrado un escape desde joven y eso solo lo llevaba a sacar sus frustraciones en el al practicar más que nadie. Hasta ese momento en su mente sólo rondaban ideas de cómo perfeccionar la nueva maniobra en la que estaba trabajando.

-Incluso podemos ponerte a ti y sería casi lo mismo, solo hay que conseguirte un vestido bonito y listo- dijo burlonamente un chico castaño, igual mayor y mejor amigo de Chad hablando con un tono más afeminado haciendo revolotear sus pestañas mientras juntaba sus manos.

Justin Caballero, un atractivo chico castaño y de ojos del mismo color, de personalidad tanto galante como abusona pues amaba molestar a sus compañeros en cada oportunidad que tenía y si era que por su camino se cruzaba una bella señorita no dudaría en acercarse a ella con intenciones no tan inocentes. Justo como en este momento no había sido la excepción y aprovecho para molestar a su líder y de pasada hacer reír a sus compañeros.