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Aviso: hechos ocurridos meses después de entrar en la organización de Madeleine y Teodorus.

Vale, que mi vida no era la mejor de todas actualmente.

Vivía encerrado en cuatro paredes ya que consideraban que aquello era lo mejor para mí y no, se equivocaban; lo mejor para mí era estar cerca de Nolan.

Nolan Cox.

Mi Nolan.

Joder, como lo extrañaba.

No habíamos podido vernos—realmente, no había podido verlo pero quiero pensar que todo es mutuo— desde que nos presentaron a aquel tal...—¿Cómo se llamaba? Ender, Ether, Elder... En fin, algo con E era— bueno, a ese. Por alguna razón, me resultaba extraño todo esto, es decir, se supone que, antes de que llegara Theodorus y Madeleine con su cosa de... No sé—últimamente no recordaba mucho de lo que sucedía— estábamos bien. Muy bien.

Supongamos.

Estiré mis labios por debajo de la pañoleta que cubría estos, mirando fijamente el techo blanco de mi fría y solitaria habitación. Mi mente no paraba de dar vueltas en el asunto, y tampoco es como si tuviera una corazonada de lo que sucedía, y tampoco es como si fueran a creerme, y tampoco es como que sea confiable.

De acuerdo, muchos y tampoco.

Dejé salir aire exasperado. Me sentía totalmente inquieto con lo que estaba pasando, tanto así que usualmente daba vueltas en mi habitación haciendo nada, cosa que no solía hacer.

Me incorporé en la cama quedando con las piernas extendidas y la espalda encorvada. Dirigí mi mirada hacia un costado en una mesita de ropa que nunca iba a usar, viendo con atención el cacharro apagado que habían sido tan considerados de darme.

Igual no es como que fuera a usarlo. Creo.

Inmediatamente estiré mi mano a él y lo encendí con efusividad.

Agradecí a lo que sea que estuviera en el cielo—aparte de las masas blancas en él de nombre nubes y lo demás que hay allí— cuando noté que el número de Mack, Nolan y Dan estaba registrado en él.

¡Y puedo poner apodos!

Dan sería el amargado.

Mack sería... Mack.

Y ahí viene la mejor parte...

¡Nolan sería amor! ¡Mi amor!

El órgano en el centro de mi pecho retumbó en él con fuerza. Nolan es mi amor.

Joder, sí que lo era.

Aguanté mis ganas de enviarle primero, después de todo, no quería parecer un intenso, por lo cual le envié a Mack. Esperé un par de segundos una respuesta que no llegó, hasta ver la pantalla iluminarse y vibrar debido a la llamada entrante que no dudé en contestar.

—¡Maaaack!—cantureé con emoción, levantándome de la cama al instante.

—Hola, Vyd—su voz se escuchaba igual que siempre, solo que un poco más apagada.

Si fuera un cachorro, mis orejas se hubieran bajado.

—¿Sucede algo?—pregunté interesado, aunque probablemente la respuesta era la que pensaba.

—Lo extraño—efectivamente era eso y realmente, no sabía qué decirle.

—Él está bien, Mack. No te—

—No, Vyd, no está bien, —soltó un suspiro afligido, casi la ví frotarse el rostro—He intentado contactarme con ella, pero no hay respuestas.

Tampoco iba a haberlas.

Ella no era mala, solo era desconfiada. Buscaba el bienestar de todos nosotros, excepto el de los que ella consideraba como "mortales". No le agradaba la debilidad que significa Mack para Ax, ya que al ser el número uno, su salud era la salud de todos.

Si el no está, todos vamos a morir. Claramente, eso no quiere ella.

Su relación con Ax es más estrecha de lo que podríamos imaginar, incluso más que la de Mack y el propio Ax, por lo tanto, no sabía que responder.

—¿Y Nolan?—pregunté realmente interesado. Tenía un par de días sin verlo por los entrenamientos. Nuestros horarios se encontraban y me era difícil verlo.

—Está ocupado en sus entrenamientos—lo sé—, ¿No lo has visto?—por algo pregunto.

—No...—hundí mis cejas al escuchar una característica voz de fondo, saludando con emoción.

—¿Con quién hablas?—preguntó Nolan, causando que mi piel se erizara.

Mack soltó una risita.

—Vyd—respondió ella, colocando al parecer, el celular en altavoz.

—Hola, Nolan—sonreí ampliamente bajo la tela que cubría mi boca, aunque nadie podía verlo.

—Hey, Vyd—saludó con un tono de voz cansado.

—Te agotan los entrenamientos, eh—bromeé soltando una pequeña carcajada, a lo que él respondió con un cortante "si". Hice una mueca—. Nos hablamos luego, debo entrenar—y con eso, colgué.

No era que no quisiera hablar con ellos, realmente lo amaba. Me gustaba hablar con Mack y amaba escuchar así sea la respiración de Nolan pero... Al parecer para él era lo contrario.

¿Acaso la persona que le agotaba era yo?

Siempre fue muy amigable, aunque cuando trataba de hacerle entender lo que me hace sentir... Es como si fuese un témpano de hielo, difícil de tallar para llegar al centro.

El timbre que indicaba mi hora de entrenamiento sonó, por lo cual dejé el celular encima de la cama para ir

En algún momento lograré que las cosas cambien entre ambos, ¿no? Lograré que me mire con otros ojos que no sean de amistad.

Eso espero.

Realmente no sé bien qué es el amor, solo sé que me desconozco cuando estoy con Nolan. ¿Eso es malo? ¿Es lo mismo que le sucede a Mack con Ax y a Ax con Mack?

Aunque Ax sea... Peculiar, sus ojos brillaban siempre que estaba cerca de Mack. La manera en la que reaccionaba cuando algo tenía que ver con ella, o como actúa con ella, es tan distinto a Nolan... Y a mí.

Yo quiero más, más de lo que Nolan me ofrece. Quiero lo mismo que tienen las personas normales, quiero salir con Nolan a disfrutar de algo, quiero que él sepa que lo quiero y que todos lo sepan. Quiero ser una persona, un humano de verdad, no...

No un simple humano considerado como un experimento, alguien anormal.

Todo sería más fácil si fuera digno para él. Para Nolan.

Las personas normales tienen aquello que tanto deseo; libertad.

Sacudí suavemente mi cabeza alejando todos los pensamientos de ella, dejé escapar un suave suspiro y me levanté de la cama.

Iba a ser un día largo...

———

Hola, aquí la escritora novata. Me tardé un poco en seguir con esto ya que, como saben, el tiempo es lo que más me falta últimamente. Intentaré actualizar más seguido (ódienme por prometer eso) para que ustedes sigan amando la historia y lo que sucederá en ella.

Recalco que es un simple fanfic sobre uno de mis libros favoritos (STRANGE de Alex Mírez) por lo que habrán muchas cosas que no hay en el libro original, por ejemplo, el uso de celulares. Quiénes han leído STRANGE sabrán que nadie los usa (por lo menos, no Mack, Vyd, Nolan, Ax, etc) y los únicos con acceso a los  dispositivos electrónicos son los superiores y así.

Nuevamente, todos los créditos van a mi diosa Alex.

Dicho esto, me despido.

—Besos en la cola.

Pain or Silence | Vyd & Nolan [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora