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Suspiró, Kocho lo miró apenada y con lástima, releyó los papeles sobre sus manos una y otra vez sin creerlo.
-Lo lamento mucho Kaiyo-kun...-murmuró la fémina dejando su estetoscópio en su escritorio, sin despegar la mirada del chico.-
-N-no se preocupe Kocho-san, e-era algo que no se podía evitar..-
Algunos se preguntarán, ¿Qué ocurre? Bueno, este fué el momento en el que a _____________ se le detectó cáncer de corazón.
Hace algunas semanas que estaba sintiendo una presión en el pecho y dificultad para respirar, esta al ser una enfermedad que lo llevará a la muerte por su poca resistencia física, no se podía hacer nada, sólo tenía 1 mes de vida. Agradeció a Shinobu y sin más se retiró a la finca de su amado.
Perdido en sus pensamientos caminaba por el bosque que rodeaba la vivienda del Pilar del agua, las preguntas lo abrumaban ¿Qué le diría? ¿Lo tomaría bien? ¿Sería lo mejor decírselo? Entre ellas sin notarlo llegó a la entrada de la finca, con su temblorosa mano tocó la puerta.
-¡Giyuu! ¡Re-regresé! -de inmediato la puerta fué abierta y fué recibido por el nombrado.-
Fue rodeado rápidamente por la cintura, formando un abrazo que fué correspondido.
-¿Cómo te fué? -preguntó dulcemente dejando pequeños besos en el cuello de su pareja.-
Guardó silencio durante unos segundos, pensando en qué contestarle.
-Bastante bien, sólo es el estrés lo que me causa dolores de cabeza -le restó importancia.-
Ambos entraron en la finca, el recién llegado dejo sus zapatos en la entrada como de costumbre y seguido de eso directamente fueron a dormir por petición del peli-___________.
Durmieron "sin preocupaciones",abrazándose el uno al otro y dándose calor mutuamente; mientras ellos dormían, el tiempo afuera pasaba, hasta que llegó de nuevo la mañana donde Giyuu fué el primero en despertar y se encargó de repartir besos por el rostro del menor hasta que este despertó.
-Me haces cosquillas -rió y bostezó.-
-Hora de levantarse dormilón, voy a preparar el desayuno-asintió ante lo mencionado, el más alto abandonó la habitación, dejándolo solo con la compañía de sus pensamientos.-
Debo decirle, se enterará de todos modos. Quisiera no tener esta estúpida enfermedad y poder estar junto a él. Eran pensamientos que se asomaban por su mente, los ignoró y se dispuso a comenzar su día como si fuera uno normal; ya cambiado, salió a donde estaba su novio a el cual se abrazó cual garrapata.
-¿No podemos dormir un rato más? -pidió nuevamente entre bostezos.-
Giyuu negó ignorando la cara de cachorro que le hacía _____________ para convencerlo, le indicó que le ayudara y así lo hizo, encargándose de cortar algunas frutas que se necesitarían para el desayuno; Giyuu al no ser muy charlador al igual que su pareja, desayunaron en silencio, sólo dedicándose algunas cuantas miradas y sonrisas. El peli-azul por un momento se levantó de la mesa para ir al baño y en ese corto periodo de tiempo, Kaiyo devolvió a la olla gran parte de su comida.
Cuando Tomioka volvió, se encontró a su pareja terminando de comer y lavando su plato, terminó igualmente de almorzar y siguieron con su vida relativamente normal.
Al llegar la noche, una nueva pregunta se planteaba dentro de él.
¿Cómo se lo diría a Tomioka? Y más importante, ¿Se lo diría?
