Primer Ministro Omega - PJM/MYG

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Meterme a la habitación de una pareja a las 4 de la mañana, se podría considerar suicidio, pero no para mí, entré en silencio viendo a mis hyung dormir junto a las niñas en medio y sonreí, mordí mi labio acercándome hasta mover el hombro de Yoongi y poder despertarlo, quien lo hizo dando un brinco y mirándome confundido, sonreí culpable y él suspiró mirando el balcón para que saliera y así lo hice para esperarlo en la terraza.

—¿Qué haces despierto? Si no duermes, no creces

—La ley de la vida no funcionó contigo o ¿sí? —Recibí un golpe en la cabeza y luego tomó asiento a mi lado.

—Suéltalo

—Le dije todo y él me contó su pasado igualmente

—Vaya... tuvieron una primera cita muy productiva, no entiendo cual es el problema que te tiene despierto a esta hora —Me miró y yo desvié la mirada suspirando agotado mentalmente

—Me dijo que le llamara si quería empezar a vivir... pero no sé si estoy listo

—Tienes miedo y es normal, no es que no estés listo, solo tienes miedo a que todo se repita, pero está en ti y él para que las cosas fluyan con calma y amor ¿es tu predestinado?

—¿Cómo...

—Jimin

—Así que se dio cuenta...

—Eres un buen alfa Jungkook-ah, no tienes nada que temer y llámale para que se nos una mañana, quizás así te sientas más seguro, iremos a un templo —Miré la tranquila y luminosa noche de japón, su exceso de luz artificial me perturbaba un poco, pero tenía su encanto, me despedí de Yoongi quien asintió yendo a la cama y salí de la habitación. Ahora solo debía intentar dormir y llamarle temprano por la mañana para que se nos uniera, Hyung tenía razón, tenía que dejar que las cosas fluyeran con calma y quizás, esto era lo que necesitaba, darme una real oportunidad para ser feliz.

—Bien, este es el plan, ustedes van a comportarse como las lindas cachorras que son en lo que mamá Min las viene a buscar ¿sí? Yo voy a terminar de arreglarme para la cena, mierda espero no llegar tarde

—¡Meda! —Mi cuerpo se congeló por completo y me giré mirando a las niñas quienes cubrían sus boquitas con ojitos traviesos, ellas sabían que no debían repetir esa palabra.

—Si lo repiten no las volveré a llevar al parque para que jueguen con sus amigos, no sean cachorras desobedientes, su tío está lo suficientemente estresado porque va a conocer a sus suegros, así que les pido cooperación —Las miré serio y ellas me devolvieron la mirada para luego aplaudir divertida, negué con una sonrisa ¿qué estaba haciendo pidiéndoles a unas cachorras comprensión ante mi presión? Definitivamente me había vuelto loco.

—¡Jungkookie! Estoy en casa

—¡Oh mamá! —Grité entusiasmado, sí, le decía mamá a mamá Min, ella entró a mi habitación y sonrió saludando a las cachorras.

—Pero que guapo ¿a dónde va mi pequeño hijo?

—¿Qué opinas? —Alcé dos camisas distintas y ella apuntó la de franjas cruzadas, asentí y me la puse de inmediato, luego alcé los pantalones—. Gracias

—Deberías ponerte el abrigo que Hyunyeol te regaló junto al cinturón que es de color similar y... zapatos negros, botines —Tomé las cosas y me las fui acomodando como ella había indicado—. ¿Cuándo lo vas a presentar?