Capítulo 3

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El distrito de la Ciudad Comercial de Taiei era bien conocido en todo Tokonosu como el lugar turístico más atractivo de la ciudad. Con un enorme centro comercial que cuenta con unas impresionantes cinco plantas con más de cien tiendas. Por no hablar de los restaurantes exclusivos, los puestos familiares y los grandes precios. También era un lugar bastante común para los residentes locales, ya que estaba situado en el corazón de la ciudad. Cuando no estaban en la escuela, la mayoría de los adolescentes pasaban aquí el resto del día con sus amigos. En los recreativos, de compras o simplemente pasando el rato.
 
Naruto no era una de esas personas. Por lo que no pudo evitar preguntarse, ¿qué demonios estaba haciendo?

"Maa, Naruto-kun pareces deprimido". Comentó Misuzu, con una sonrisa de oreja a oreja.

Que se sepa que Uzumaki Naruto siempre pagaba lo que le correspondía. En este caso, se dejó convencer para acompañar a Misuzu y Niki en un día de "diversión y descanso" en el distrito comercial de Taiel.

"Ya sabes, entiendo que estás tratando de hacer que me caliente a ustedes, pero esto está haciendo que me desagradéis aún más". El rubio habló sin rodeos. Un ceño fruncido firmemente colocado en sus rasgos.

Misuzu prácticamente sonrió a Naruto. Aparentemente impasible ante su anterior insulto. "¡Oh, por favor! ¡Si nos odiaras de verdad habrías dicho que no! Además, se dice que Niki y yo, la tímida chica dio un pequeño chillido al mencionarla, "somos unas de las chicas más atractivas de nuestro curso. ¿No sientes que la sangre caliente te recorre mientras acompañas a dos hermosas damas?"

Naruto no sentía nada de ese bombeo de sangre caliente. De hecho, no sentía nada, sólo quería irse a casa. "No." Replicó secamente.

Misuzu hizo un puchero en respuesta, abrazando rápidamente a Niki mientras lágrimas falsas salían de sus ojos arrugados. "¡Wahhh, Naru-chan no cree que estemos calientes Niki!"

La pobre chica no pudo hacer nada para ocultar su sonrojo mientras su mejor amiga enterraba su cara en los amplios pechos de Nikki. Hasta el día de hoy Misuzu podía jurar que sus padres debían estar alimentando a Niki con algo para que tuviera un busto de ese tamaño a su edad.

"¿Podemos hacer esto e irnos? Tengo que estar en un lugar más tarde esta noche". "Oh..." Misuzu sintió que se hundía, su propia imaginación corriendo sin su consentimiento. "¿Vas a estar con Sa-Busujima-senpai?" El breve destello de dolor en esos profundos ojos marrones se perdió para la rubia, pero no para Niki.

Una sola ceja rubia se levantó. "No. En realidad estoy haciendo un favor a un viejo amigo... un muy viejo amigo".

"¿Amigo...? repitió Niki en voz baja.

Naruto resistió el impulso de sudar. Todo el tiempo ella apenas ha dicho una sola palabra, demasiado asustada incluso para mirarle a los ojos. Sin embargo, en cuanto alguien menciona las palabras "amigo" y "Naruto" en la misma frase, de alguna manera logra sorprenderla lo suficiente como para hablar. El rubio admitiría que no se esforzaba por hacer relaciones o forjar lazos, pero eso no significaba necesariamente que hubiera olvidado cómo hacerlo. "¿Antiguo amigo?" Repitió Misuzu, "¿Como en viejo amigo o VIEJO amigo?".

Naruto parpadeó. Junto a los dos, Niki no pudo evitar dar un suave suspiro. Uzumaki realmente era denso, muy denso. Discretamente, la atención de Niki se desplazó hacia su mejor amigo. Viendo como ella tomaba la mano del rubio y comenzaba a guiarlo, todo el tiempo una brillante sonrisa se dibujaba en su rostro. Parecía realmente feliz en ese momento. Una diferencia notable, pero bienvenida, de cómo Misuzu había estado actuando últimamente.

Pero, ¿por qué él?

El mismo pensamiento seguía resonando en su mente. Era la misma pregunta que ella hizo anoche después de la revelación repentina de Misuzu.

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