Capítulo 1 " Fuego en el cielo"

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La tierra…un hermoso planeta, uno que sorprende cada día a los que lo habitan, aquel que ofrece bellas vistas y paisajes que solo el mismo puede otorgar. Sin embargo, se sabe bien que no estamos solos… Existen tantos mundos desconocidos allá afuera, en ese existencial infinito. Pero, ¿habrá vida en ese infinito?... la hay, definitivamente la hay, al menos eso pensaba Park Jihyo, una chica cualquiera que amaba mirar las constelaciones todas las noches.

Jihyo era estudiante de tercer año de preparatoria y vivía en los más tranquilos barrios de Busan, sin embargo, a pesar de ser una chica dulce, linda y algo traviesa, no tenía muchas amistades, todos preferían mantenerse lejos de ella, ¿Por qué? Muy simple, era diferente y por ello solo tenía un par de amigas con las que podía estar en paz y podía confiar en ellas.

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-Señorita Park, ¿está escuchándome?- aquella voz molesta la sacó de sus pensamientos, haciéndola retirar su mirada de la ventana por la que observaba.

-Dígame profesor- respondió, dedicando una cálida sonrisa.

-Podría decirnos que opina del último viaje a la luna, estamos comentando el proyecto de final trimestral sobre astronomía- repitió aquel hombre a Jihyo y ésta solo pensó deductivamente.

-Podría decirse que el gobierno norteamericano miente ante lo que sucedió realmente, ya que no se asegura concretamente la razón del porque dejaron de enviar hombres a la luna. Tal vez encontraron algo que no les gustó ver- dijo ella, tomándole el pelo a aquel hombre.

-¿Podría explicarse?- hablo el profesor algo confuso a aquellas palabras.

-¿Qué tal si encontraron una forma de vida superior? Algo así como una forma de vida que succiona cerebros. Sería genial si así fuera- dijo despreocupadamente la joven, causando un suspiro resignado de aquel maestro, ya estaba acostumbrado a las rarezas de la chica.

Antes de poder protestar, el timbre de término de clases se hizo sonoro, liberando de un posible regaño a Jihyo, quien salió casi triunfal de aquel salón topándose con su mejor amiga, que salía con mala cara justo en el aula de al lado.

-¡Nabongs! Que cara tan fea tienes- dijo la más joven, saludando a Nayeon y ésta solo frunció más el ceño.

-¡Que grosera eres! Yo no me burlo de tus dos grandes melones- respondió al insulto de la castaña.

-Si que lo haces, todo el tiempo, pero no me refería a eso, digo que tienes mala cara, ¿problemas con química?- respondía divertida Jihyo a Nayeon y esta solo suspiró cansada.

-No me puedo entender con ella todavía, es tan difícil-refunfuño la pelinegra como si fuese una niña enojada.

-¡Claro que no! es muy fácil, pronto le encontraras el gusto-dijo Jihyo a Nayeon y ésta solo refunfuño más. Sabía el discurso que la menor le daría sobre la importancia del estudio y la gran responsabilidad que tenía al ser una estudiante foránea.

Dispuesta a evadir el pronto sermón, simplemente soltó un suspiro. Comenzaron a caminar juntas fuera de la escuela, cuando un mensaje llegó al celular de Nayeon y ella rápidamente tomo el celular de su bolsillo para contestar.

-Es Haesol, quiere que vayamos a dar una vuelta por las orillas del bosque- decía emocionada la pelinegra y Jihyo solo se limitó a mirarla, como si fuese a añadir una nueva represalia a su charla mientras caminaban a casa.

-Nayeon, ya es el tercer chico de este mes, ¿de verdad no has aceptado salir con ninguno de ellos? Siguen llegando como moscas y tú no te limitas a darle el sí a alguno- Jihyo expresó sin vergüenza alguna, al contrario de la pelinegra, que se sonrojó ante aquellas palabras, pues si bien era un pasatiempo divertido para ella, no era algo que le gustara presumir o hablar en voz alta.

Enemy Mine [JiTzu & MiNayeon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora