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11 de septiembre de 1975- sala común de gryffindor
Remus baja las escaleras hacia la sala común, un montón de chocolate en sus manos. Planeaba dárselos a Lorelei, que actualmente se estaba recuperando de su caída en la enfermería. Quería hacerle saber que estaba agradecido por lo que había hecho por su mejor amigo.
"La luna llena no es hasta dentro de unos días, ¿qué haces con todo ese chocolate?" Peter pregunta, notando que pasaba caminando. Peter, Sirius y James están todos sentados cerca de la chimenea en la sala común.
"Uh, solo tengo hambre." Remus miente, sabiendo que si les contaba la verdadera razón, nunca escucharía el final.
"Acabamos de almorzar." Sirius señala, levantando una ceja con recelo.
"La resistencia del hombre lobo, ya sabes. Me da mucha hambre." Remus tararea, tratando de encontrar una excusa. Pero está claro que obviamente no le creen.
"Claro. ¿Por qué tengo la sensación de que estás a punto de ir a ver a un buscador?" pregunta Sirius y los ojos de Remus se agrandan.
"Puedo ver a James allí mismo." Remus actúa como tonto, recibiendo una mirada en respuesta.
"Lunático. Solo admítelo, vas a ver a Lorelei." James reflexiona y Remus resopla, sabiendo que no tiene sentido negarlo más.
"Como sea. Solo los dejo como una forma de agradecerles." Remus resopla, haciéndolos a todos reír mientras se aleja.
Sus mejillas son de un tono rosado claro mientras sale de la sala común. Se dirige a la enfermería, decidiendo que dejará el chocolate y luego se irá. Cuando llega a las grandes puertas de la enfermería, las abre lentamente, asomando la cabeza. Se da cuenta de que Madame Pomfrey mira hacia arriba y le sonríe.
"Remus. ¿Qué te trae por aquí?" Ella le pregunta y él sonríe tímidamente.
"Solo quería dejar esto." Dice, mientras entra, usando su pie para cerrar la puerta. Mira hacia donde está acostada Lorelei, leyendo un libro y Madame Pomfrey sonríe con complicidad, antes de asentir con la cabeza para que siga adelante. Se dirige hacia donde está Lorelei, captando su atención.
"¡Lupin! No te esperaba aquí." Ella sonríe feliz, dejando su libro.
"Lo siento. Solo quería darte estos, como agradecimiento. Realmente no sabía cuál te gustaba, así que traje de todo tipo." Tararea mientras deja el chocolate en la mesa que ya está adornada con flores.
"Eso es muy dulce de tu parte. Gracias." Ella se sonroja y sonríe feliz, haciéndolo sonrojar a él también.
"Es un placer." Tararea, retrocediendo un poco. "Bueno, te veré en los alrededores entonces. Deseo que te recuperes pronto."
"Remus." Ella dice, impidiéndole irse mientras la mira inquisitivamente. Ella sonríe y palmea el costado de la cama, indicándole que se siente. "No voy a poder terminar ese chocolate sola. Quédate."
"Oh ..." exhala, con su cara de sorpresa y risas.
"Soy mitad Veela, no mitad vampiro. No muerdo." Ella bromea, haciendo que él se ensanche en estado de shock.
"Yo no ... no, eh. No es eso, yo sólo-" Ella lo interrumpe, riéndose de su reacción nerviosa.
"Estoy tirando de tus piernas, Lupin. Ahora, siéntate y pásame un poco de eso." Ella dice, haciéndolo soltar una risa entrecortada. Se sienta en el borde de la cama y le entrega un poco de chocolate. "Sabes, para alguien que es amigo de personas que hacen bromas extravagantes, eres bastante tímido."
"¿Sabes ... sabes sobre eso?" Él pregunta y ella le da una mirada mientras desenvuelve el chocolate.
"La barba de Merlín, Rem. Por supuesto. Es un poco difícil no hacerlo. Aunque, siempre son Black y Potter. Siempre me pregunto cómo siempre se les ocurren esas ideas." Ella tararea y él sonríe tímidamente.
"Yo diría que el cincuenta por ciento de las veces soy yo." Admite, haciendo que sus ojos se ensanchen con una sonrisa divertida.
"Ahora lo entiendo. Detrás de toda esa timidez hay un genio travieso." Lorelei bromea y él se ríe suavemente, mientras se mete un chocolate en la boca.
"Bueno, Sirius y James comparten un cerebro singular, así que no es fácil para ellos pensar todo el tiempo." Dice en broma, después de haber tragado el chocolate. Ella se ríe, sacudiendo la cabeza.
"Es bastante fácil hablar contigo, Rem. Lástima que nunca antes habíamos salido." Ella tararea y él se encoge de hombros mientras mira hacia abajo. Ella se da cuenta.
"Bueno, estoy un año por debajo de ti. Así que realmente no tienes ninguna razón para pasar el rato conmigo." Él señala y ella niega con la cabeza.
"Eso realmente no debería importar. Creo que eres una persona amable, esa es una razón suficiente." Ella tararea, haciéndolo mirarla y su corazón se acelera. "Todavía recuerdo la primera vez que te vi. Fue cuando te estaban clasificando. Eras tan pequeño."
"Haces que parezca que soy cien años más joven que tú." Él dice bromeando y ella se ríe. Estaba sorprendido y feliz de saber que ella ya lo había notado en su primer año.
"Soy un alma bastante vieja, como puedes ver." Ella tararea y él resopla. Antes de que pueda decir algo en respuesta, otra voz detrás de él lo sobresalta.
"Y aquí nos preocupaba que te sintieras sola." Se vuelve para ver a Emily y Lesly sonriendo mientras están paradas frente a la cama. "Es bueno verte aquí, Lupin."
"Hola." Él sonríe tímidamente, un rubor subiendo a sus mejillas. Se vuelve para mirar a Lorelei y sonríe suavemente. "Iré entonces."
"Está bien. Gracias por venir. Te lo agradezco. Y una vez que salga de aquí, tú y tus amigos tienen que pasar el rato con nosotras." Lorelei dice intencionadamente y asiente.
"Te veré por ahí." Tararea antes de levantarse y marcharse. No puede evitar que la amplia sonrisa se abra paso en sus labios mientras sale de la enfermería.
Aturdido, regresa a la sala común, donde encuentra a sus amigos todavía sentados. Se dan cuenta de que entra con una amplia sonrisa y se dan sonrisas de complicidad, mientras él se desploma en uno de los sofás y deja escapar un suspiro de ensueño.
"Querido Lunático. Cuéntanos, ¿qué es lo que los tiene a todos tan mareados?" James pregunta con una sonrisa y la sonrisa de Remus se ensancha aún más.
"Considera el paso uno del plan de Sirius hecho." Remus exhala y Sirius sonríe, sintiéndose orgulloso de sus mejores amigos.
"Ese es mi chico. Cuando te digo eso al final de este año escolar, tú y ella terminan juntos. Lo digo en serio." Sirius dice emocionado, pero Remus lo ignora ya que no puede evitar soñar despierto con su sonrisa y su risa. La misma sonrisa de la que se había enamorado años atrás, ahora él había sido la causa de ella.
